Atendida la inquietante realidad que vive la construcción en Chile, acaso una de las más afectadas por el estallido social, comienzan a alzarse voces al interior de la industria que proponen una serie de medidas concretas y políticas de largo plazo para salir del atolladero que provocado por el deterioro de las expectativas.

Una de estas ideas es la que manifestó Paula Arancibia, Directora de Leqtus, quien invitó a los inversionistas a avanzar decididamente en la adopción de tecnologías de la información que tornarán más eficientes sus procesos productivos. “Se hace más necesario que nunca que esta industria avance en la revisión de sus procesos internos, se atreva a usar las nuevas tecnologías disponibles, que contrastan con el día a día artesanal que seguimos viendo en terreno, y aceleren el paso hacia la transformación digital”, señaló la timonel de la empresa que diseñó una novedosa plataforma de gestión de proyectos de construcción.

La Directora de Leqtus recordó que “el escenario de la construcción en nuestro país es adverso, según confirman las cifras negativas del sector, entregadas por la CChC. Se registró una caída de 23,1% en la venta de viviendas en Santiago, respecto al año anterior, e ingresarán menos obras este 2020, con una caída de 7,7% anual de la inversión en construcción, el mayor retroceso en la última década, sumado a la pérdida de 40 mil puestos de trabajo”.

En consecuencia, Arancibia invitó a los empresarios del sector a reflexionar sobre el impacto económico que supone la transformación digital. “Si habrán menos proyectos, al menos sus procesos constructivos deben ser más eficientes, y ejecutarse dentro de los plazos comprometidos, ahorrando costos que acarrean trabajos mal ejecutados y sin coordinación en las obras. Es tiempo de aplicarse”, señaló.