El gobierno hondureño solicitará la ampliación de préstamos de organismos multilaterales a efectos de iniciar la construcción de embalses para hacer frente a la escasez hídrica que, sorprendentemente, por cierto, también afecta a un país tropical centroamericano.

Así lo confirmó el Presidente Juan Orlando Hernández, quien puso énfasis en la severa sequía que afecta a los distritos Central, La Paz y La Ceiba, zonas que, además del déficit pluviométrico, también exhiben un rezago importante en términos de infraestructura hídrica.

Honduras pidió así más dinero al Banco Mundial (BM), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Banco Central de Honduras (BCH) y al Banco Europeo de Inversiones (BEI). “Lo que queremos es una ampliación por dos años en cada crédito que nos han dado y el equivalente de esos créditos, usarlos de manera agresiva para construir represas grandes, medianas y pequeñas para agua de consumo humano y producción”, señaló el mandatario hondureño, quien calificó de “dramática” la crisis hídrica que sufren esas regiones, lo que obligaría al gobierno a reinstaurar los racionamientos de 2018.

El gobierno informó que las reservas se encuentran a la mitad de su capacidad. “El problema de la falta de lluvia con el patrón de la caída de agua y ya no responde a la agricultura tradicional que va repercutir en la parte de alimentos”, indicó Hernández.