Los tiempos de espera en los puntos de control de seguridad del aeropuerto a menudo son impredecibles, lo que los convierte en un dolor de cabeza para los viajeros y los gerentes de seguridad. La tecnología adecuada puede proporcionar ayuda, como por ejemplo, una solución inteligente que evita que las líneas se prolonguen demasiado en el aeropuerto de Budapest (Hungría). Para evitar esto, se han introducido pantallas de tiempo de espera como parte de un piloto frente al punto de control en la Terminal 2A del aeropuerto.

Todos los que viajan en avión están familiarizados con el procedimiento: antes de la salida, su equipaje de mano pasa a través de una radiografía, mientras que lo escanean y, posiblemente, lo revisan. El control de seguridad lleva un tiempo; se puede encontrar viajeros molestos en largas filas frente a los puntos de control de seguridad en prácticamente todos los aeropuertos del mundo en las horas pico de viaje.

Para Istvan Szabo, tratar este problema es parte de su trabajo diario. Como Director de Seguridad del Aeropuerto Internacional Ferenc Liszt de Budapest, es responsable de garantizar que los controles de seguridad se realicen de manera exhaustiva y eficiente. Para facilitar esta tarea, buscó una solución técnica que pudiera construir la infraestructura existente que ya existía. “Quiero usar lo que ya existe y no invertir en un sistema adicional”, señala.

Todas las especificaciones se implementaron según lo planeado: las videocámaras Bosch FLEXIDOME IP Starlight 7000 VR podrían integrarse en la infraestructura existente. Gracias al alto contraste, el bajo nivel de ruido y el rango dinámico extremo, ofrecen excelentes imágenes de video como entrada al procesamiento analítico que puede producir datos de conteo altamente precisos. Estos se envían a una aplicación central y también se almacenan, en caso de que el personal de seguridad necesite revisarlos con el fin de comprobar los tiempos de espera pasados en caso de reclamaciones de pasajeros en vuelos perdidos.

La solución reconoce cuántas personas están de pie frente a cada punto de control de seguridad y cuánto tiempo necesitan, en promedio, para pasar por el control de seguridad. Este cálculo se realiza en tiempo real. La fase de prueba para el algoritmo duró tres semanas y alcanzó una tasa de precisión del 96%. La precisión fue validada midiendo el tiempo de espera en el campo.

Las pruebas en un entorno real eran necesarias para determinar el número requerido de cámaras de video y su posicionamiento ideal. La compañía descubrió que las dos cámaras inicialmente en uso no eran suficientes. En su lugar, se necesitaron cinco cámaras en total: una en la entrada del punto de control de seguridad y cuatro adicionales detrás del punto de verificación (una en cada salida).

Ahora que el sistema para predecir los tiempos de espera en el aeropuerto de Budapest ha superado con éxito las pruebas internas, Szabo tiene otros planes. “Como próximo paso, estaremos interesados en mostrar el tiempo de espera respectivo para cada terminal en nuestra aplicación de aeropuerto. De esa manera, los viajeros podrían acceder a esta información en una etapa aún más temprana a lo largo de su viaje”, comenta. Los objetivos generales son claros: Mejorar aún más el servicio al cliente y promover la innovación en el Aeropuerto Internacional Ferenc Liszt de Budapest.

Maarten Wings, Global Vertical Manager Airports en Bosch Security and Safety Systems, identifica estos objetivos como tendencias a gran escala. Está convencido de que se instalarán más cámaras en los aeropuertos. Estos últimos no solo se enfocarán en recolectar las imágenes; se concentrarán en hacer un uso inteligente de las cámaras. El ejemplo en el aeropuerto de Budapest ha demostrado que, gracias a los datos recopilados, se pueden mejorar los procesos de seguridad.