Por muchos años, el sueño de la casa propia ha sido para miles de chilenos una meta hacia la cual se llega con mucho esfuerzo y constancia económica.

Las tendencias han cambiado. Según datos de la Encuesta Casen, un 24,5% de quienes viven en zonas urbanas -un millón 270 mil hogares- arrienda, en comparación con un 19,2% que lo hacía hace siete años.

Más de 3 millones de viviendas se arriendan en Chile al año 2018. La migración y la transformación del núcleo familiar hacen que sea cada vez más común el arriendo de grupos de amigos, solteros o familias de dos personas.

Un 43% de la mitad de los jóvenes que declara tener o haber tenido endeudamiento, menciona hacerlo mediante a un crédito universitario. Sin embargo, existe un 39% que declara endeudamiento con tarjetas de casas comerciales o de crédito, sumando además un 30% que menciona deudas a través de un crédito de consumo de la banca o el retail.

“Actualmente, el mercado castiga mucho al que tiene DICOM, pero en Tattersall le damos mayor validez al factor humano, entrevista personal, de cada caso que se acerque a nosotros con la inquietud de arrendar un inmueble”, explica Sandra Betancur, jefa de arriendos y propiedades de Tattersall.

Pero ¿qué elementos convierten a esta nueva generación de moradores en prospectos confiables a la hora de arrendar? Sin duda muchos factores hacen que una persona interesada en adquirir un inmueble se transforme en el candidato ideal para adquirirla ya que cada caso es particular.

Sandra Betancur, jefa de Arriendos y propiedades de Tattersall, entrega algunos datos para que puedas saber si eres un prospecto adecuado.

1. Tener la última liquidación de sueldo o la información requerida por el arrendador para asegurar ingresos (documentación: flujos de ingresos, ya sea con liquidaciones de sueldo o boletas de honorarios; por lo general se piden las ultimas seis liquidaciones o si son dependientes las últimas declaraciones de impuestos).

2. Elegir al candidato más allá de los papeles por afinidad, entendiendo que los acuerdos son por mínimo seis meses renovables.

3. Ser claros en fechas de pago, arreglos, otros. Llevar una comunicación permanente con el arrendatario ayuda al correcto monitoreo de la propiedad.

4. Obligaciones del arrendatario vs el dueño de la propiedad: El rol de Tattersall es velar por una sana convivencia y control de funcionamiento.

5. Evitar cláusulas abusivas: Saber que en muchos casos si es permitido subarrendar el estacionamiento y la bodega

Respecto a los pagos extras o devolución de garantías, Sandra Betancur responde: “ Hay cosas que obviamente se van a deteriorar como la limpieza de las paredes, etc. Legalmente es importante establecer cláusulas objetivas como la forma de pago de la renta, la vigencia del contrato, estado del inmueble al momento de la entrega, así como lo que estará estrictamente prohibido como romper paredes o pisos, o utilizar para otros fines, etc.”

Los arrendatarios hoy en día prefieren contar con acceso a espacios comunes, áreas verdes, gimnasio y lavandería por sobre el metraje del inmueble, lo que hace que el panorama inmobiliario este cambiando de acuerdo a las constantes necesidades de los usuarios.