Con el objetivo de entregarle a la ciudadanía información relevante sobre la eficiencia de los calefones, el pasado domingo 1 de julio entró en vigencia la obligatoriedad de la Etiqueta de Eficiencia Energética para Calefones, la que permite conocer los niveles de eficiencia que tienen estos aparatos, obligación que es requisito esencial para su comercialización, aspecto que está siendo fiscalizado por la Superintendencia de Electricidad y Combustibles, SEC.

Esta identificación, además, permitirá a los consumidores comparar datos como el consumo energético, prestaciones durante el uso (cantidad de agua que calienta) y otras características, de manera fiable y sencilla, permitiendo de esta forma entregar información relevante para el proceso de compra, escogiendo el artefacto que más se adecúe a las necesidades de cada grupo familiar.

Cada calefón tendrá una etiqueta, con letras que van desde la A hasta la D, donde la letra A es la más eficiente y la letra D la menos eficiente, esto visto desde las variables de consumo de gas y cantidad de agua que calienta por minuto cada aparato.

El Superintendente de la SEC, Luis Ávila Bravo, aseguró que “los comerciantes deben preocuparse de vender sólo calefones que tengan este nuevo etiquetado, situación que ya estamos fiscalizando. Y a los ciudadanos interesados en comprar calefones, les sugerimos que deben fijarse en que el producto tenga su Sello SEC, es decir, que haya cumplido con todas las pruebas de seguridad que exige la normativa, y utilizar la información que tenga la Etiqueta de Eficiencia Energética para tomar la mejor decisión de compra, lo que permitirá acceder a un ahorro en la cuenta mensual de gas”.

El sistema de etiquetado para calefones a gas aplica tanto a los artefactos “de tiro forzado” como a los “de tiro natural”. Estos últimos podrán alcanzar como máximo el nivel de Eficiencia de letra B.

Una consulta recurrente en cuanto al uso de calefones es la vida útil de estos aparatos. Al respecto, el Superintendente Ávila indicó que “en términos generales los calefones tienen una duración, aproximada, de 10 años, pero lo mejor es seguir, siempre, las recomendaciones de cada fabricante, en cuanto a su instalación, mantención y recambio”.

El titular de la SEC reiteró la necesidad de que los calefones sólo sean instalados por Instaladores de Gas Autorizados por SEC, cuyos datos pueden ser encontrados en www.sec.cl, ya que “el gas es un combustible que requiere cuidados, por lo que la normativa es muy exigente en cuanto a la instalación de estos aparatos”.