La denominada compra en blanco tiene múltiples ventajas y una creciente demanda, algo que se ha visto reflejado especialmente luego de que se diera a conocer la puesta en marcha del IVA a la compra y venta de viviendas.

Según cifras entregadas por la Cámara Chilena de la Construcción, el interés de las personas por adquirir un bien raíz nuevo aumentó en Santiago un 20% en el segundo trimestre de 2017, en comparación con igual período del año pasado. Del total, un 81% de las unidades vendidas correspondió a departamentos, 8 puntos porcentuales más que en 2016.

Ante este escenario, un importante factor de venta son las de viviendas en blanco, más aún si se considera el buen momento del mercado inmobiliario debido a las bajas tasas de interés de los bancos. “Los proyectos con venta en blanco tienen gran demanda porque los valores de venta son menores en relación a viviendas de entrega inmediata, y además permite disponer de mayor tiempo para juntar el pie, o pagarlo en cuotas, de acuerdo a los meses que falte para la entrega del proyecto”, asegura Jessica Arata, Subgerente Comercial de Inmobiliaria Lo Campino.

Quien accede a este sistema de compra también puede ahorrar hasta un 30%, debido a la plusvalía que genera el inmueble en el período de tres años. “A medida que avanza la construcción y se acerca la fecha de recepción municipal y, por ende, de entrega, el precio sube considerablemente, por lo que comprar en blanco se transforma en una gran opción, especialmente si la vivienda será vendida a futuro”, señala el Gerente General de Inmobiliaria Norte Verde, Roberto Bascuñán.

Sin embargo, la Gerente Comercial de Siena Inmobiliaria, Ana María del Río, aclara que “el precio no es la única ventaja de la compra en blanco. Otro aspecto importante para el futuro propietario es que permite elegir una mejor ubicación y orientación de la vivienda”, así como también los estacionamientos y bodegas.

Finalmente, al momento de comprar un bien raíz siempre es importante considerar los amenities o áreas comunes que ofrece un proyecto inmobiliario, ya que pasan a formar parte de la extensión del departamento donde, por ejemplo, se puede contar con gimnasio, piscina, lavandería con wi-fi- quinchos, salones de evento, entre muchos otros atributos que pueden marcan la diferencia a la hora de invertir.