La elección de los productos de DVP en los proyectos habitacionales de Javiera Peralta nació con la necesidad de resolver la problemática que planteaban las ventanas, específicamente en una vivienda de  200 m² que hace cerca de cuatro años planificaba levantar en el balneario de Maitencillo. En ese caso, optó por trabajar con Vinyl Windows para evitar que éstas se atascaran producto de las deformaciones que provoca en los materiales tradicionales la humedad y salinidad de la zona.

A partir de esa experiencia conoció la línea Vinyl Siding y sus beneficios para el revestimiento de muros. "Nos enfrentábamos al problema de la falta de tiempo para hacernos cargo de la mantención de la construcción, por lo que la alternativa de usar Vinyl Siding se nos hizo muy atractiva, puesto que nos explicaron que no necesitaba pintura y que ofrecía una duración de mínimo 50 años", señala la empresaria.

De esta forma, tomaron la opción de construir toda la casa en este material, lo que incluyó el revestimiento de todos los muros, tanto interiores como exteriores. "Antiguamente tuvimos otra casa en Lampa, que por una decisión estética construimos en base a fardos de pasto, que se veían muy bien, pero que generaban un gran desgaste en términos de mantención. Es por eso que en esta ocasión decidimos buscar una alternativa más práctica, la que afortunadamente también significó una buena decisión en términos estéticos, porque logramos una casa de veraneo con aspecto de madera recién pintada, acorde con el entorno, y que nos dejó muy satisfechos", agrega.

La experiencia se replicó tres años más tarde con la construcción de la casa-oficina-negocio de 330 m² que Javiera Peralta levantó en Colina, donde se buscaba habilitar cerca de 100 m² cuadrados para una cafetería y otros 200 para la vivienda de la familia.

En la ocasión se volvió a utilizar Vinyl Siding y a esto se sumaron cielos de PVC, además de accesorios para los baños, barandales, esquineros, estacionamientos y guardapolvos, entre otros.

"En este proceso, nos encontramos con agradables sorpresas desde el punto de vista estético, porque la oferta de modelos y colores de DVP se amplió bastante. De esta forma, utilizamos un tipo de tablón más ancho que la vez anterior, de color café, lo que le dio una apariencia muy agradable a la casa. Junto con esto, se amplió la oferta de accesorios, lo que nos sirvió mucho para abordar otras necesidades de la construcción", comenta.

Estándar estético y técnico

DVP es pionero en Latinoamérica en la fabricación de Vinyl Siding, un revestimiento de PVC con apariencia de madera especialmente diseñado para cubrir muros de construcciones nuevas, remodelaciones y ampliaciones, entre otras. Se trata de un material fabricado en PVC coextruido y otros componentes, con filtro UV en sus caras exteriores, que ofrece un excelente rendimiento frente a la intemperie. Entre sus principales beneficios destaca que actúa como barrera contra la humedad y presenta un comportamiento que asegura una garantía de 50 años sin mantención, donde una limpieza simple con agua mantiene inalterables sus características. Junto con esto, cabe subrayar que el producto no se decolora, no se deforma, ni se descascara; presenta además una muy fácil instalación, no requiere de pintura y es 100% a prueba de termitas. Está presente en una serie de colores y modelos, como el americano, alemán, doble 5", beaded 6 ½" y crane board, que le permiten adecuarse a cualquier tipo de construcción.

"Estamos muy satisfechos con los resultados que hemos obtenido, principalmente con lo que tiene que ver con el ahorro de tiempo y dinero que implican las mantenciones, y que en este caso se reducen a cero. En términos de limpieza, nuestra opción ha sido utilizar una vez al año una hidrolavadora, con la cual retiramos todo el polvo y dejamos la casa como nueva. De todas formas, es posible mantener la limpieza del material sólo con un paño húmedo y jabón", sostiene Javiera Peralta.

Otra de las características que destaca es el excelente nivel de terminaciones que ofrece el material, donde todo se articula como un mecano, a través de un sencillo sistema de instalación. "En mi experiencia, este material de PVC tiene innumerables ventajas por sobre materiales alternativos como el fibrocemento, que requieren de pintura y que están expuestos a riesgos como que se quiebren frente a golpes, lo que no ocurre con el Vinyl Siding".

Postventa

Junto con las ventajas del producto, Javiera Peralta resalta el excelente apoyo que en todo momento entregó DVP, que se materializó en una completa asesoría en las especificaciones de los proyectos, indicando siempre las mejores alternativas. A esto se suman los tiempos de respuesta de entrega de los materiales, que siempre se ajustaron a las necesidades. "En cada una de las experiencias la respuesta fue muy oportuna en términos de stock, lo que nos permitió avanzar de la manera que teníamos previsto".

Desde el punto de vista de la instalación, trabajaron con instaladores acreditados por DVP, lo que en la práctica implicó que todo el proceso se desarrolló de manera adecuada, sin atrasos y sin pérdida de material por errores en la manipulación.

"Finalmente, lo que uno más agradece es el servicio 100% eficiente que ofrece una empresa como DVP, que es una compañía grande, con proyectos de cientos de viviendas, y donde me trataron con la misma dedicación con que lo hacen con las grandes constructoras", concluye.