Edificios íconos en el mundo, como el Empire State Building en Nueva York y el Al Burj Dubai en Emiratos Arabes; y en Chile la clásica Torre Santa María en la década de los ochenta y Titanium en la del dos mil, dan cuenta de la necesidad del hombre por llegar lo más alto posible. Porque ya desde la antigüedad se ha asociado la altura -y concretamente las edificaciones en altura- con poder.

A juicio del arquitecto Andrés Weil, Gerente de Senarq, oficina de arquitectura de Abraham Senerman, y Profesor de Taller de Diseño Arquitectónico de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Chile, en la actualidad, en una economía que se rige por los parámetros de la libre competencia, subir y marcar altura, también es parte de transmitir una imagen de éxito.

Según Weil, el desarrollo de la edificación en altura es el resultado de una demanda por ubicación. "La gente quiere vivir en lugares determinados con buenas condiciones de iluminación, grandes vistas y calidad de vida. Una respuesta a esa demanda es, en la mayoría de los casos, la edificación en altura".

Estamos frente a una demanda creciente, porque Santiago se está haciendo cada vez más denso y complejo, y existe un marco normativo que, en la mayoría de los casos, permite la edificación en más o menos altura.

Un reflejo de la sociedad

Definitivamente, la arquitectura y las construcciones dan cuenta de lo que pasa en la sociedad y son un reflejo de ella. "Particularmente nosotros como empresa dimos un paso en altura respecto a los edificios que proyectamos hasta el año 2000 al identificar una nueva necesidad en el mercado local, y existir una oportunidad particular en el terreno de La Portada de Vitacura. Con el nuevo milenio, el país y el mundo cambiaron cultural y económicamente, lo que se manifiesta en la nueva arquitectura urbana en altura", señala el arquitecto.

Para este profesional, los edificios no se construyen porque sí, sino porque hay una demanda por habitarlos. "Son el resultado de ideas que dan sentido a otros que quieren ser parte del proceso", indica. En cuanto a la tendencia vanguardista de las edificaciones corporativas frente a los estilos tradicionales de las viviendas unifamiliares, cita al filósofo chileno Humberto Gianinni, quien en su Reflexión Cotidiana señala que la vivienda representa nuestro pasado, aquello que nos da seguridad y es familiar, en cambio nuestro lugar de trabajo representa los desafíos profesionales y el futuro, "por lo tanto resulta comprensible que la mayoría busque estilos tradicionales para sus viviendas y arquitectura de vanguardia para su lugar de trabajo. Los edificios corporativos representan una apuesta hacia el futuro, avanzar más allá", afirma.

Tecnología y seguridad

Las edificaciones en altura incorporan las últimas innovaciones en cuanto a tecnología constructiva. Destaca la utilización de materiales y sistemas para el uso eficiente de la energía, además de otros que aseguran la integridad y robustez de las construcciones en caso de sismos. Por ejemplo, el edificio
Titanium La Portada incorporó disipadores de energía sísmica en su construcción, porque como indica Andrés Weil, "aunque las estructuras pueden resistir sin disipadores, para los usuarios es muy importante tener la sensación que el edificio oscila menos y que no se va a ver mayormente afectado, aún cuando aumente la intensidad del movimiento".

Además de esta tecnología, los edificios incorporan otras que no están restringidas a la altura, como las utilizadas en las construcciones en extensión, entre ellos, nuevos sistemas de climatización y de domótica, que aportan confort y comodidad a quienes los habitan.

En las edificaciones en altura también sobresale el desarrollo en sistemas de seguridad, porque junto con la protección sísmica hay un énfasis en la seguridad contra incendios, apoyado por controles centralizados. Y si bien en este ámbito no existen productos nuevos, sí hay un evidente mejoramiento de las tecnologías que hay tras ellos -como en el caso de los spinklers, detectores de humo y los circuitos cerrados de TV- y en los sistemas de comunicación en que se apoyan; completamente online.

"Asimismo, en materia medioambiental también se evidencian avances en el desarrollo de sistemas para disminuir el impacto en el medioambiente y hacer más efectivo el reciclaje de residuos, por medio de sistemas de administración ", recalca el profesional.

Las proyecciones del mercado de las edificaciones en altura son al alza, especialmente teniendo en cuenta el rápido crecimiento y evolución de las ciudades. Además, considerando que la extensión de las ciudades tiene un cierto límite, la solución es la densificación, es decir, la edificación en altura. Como explica Andrés Weil, poco a poco la gente está volviendo a los sectores más tradicionales y, por lo general, está cambiando sus parcelas por departamentos en zonas centrales, porque el tiempo es una cuestión fundamental. "Este desarrollo va de la mano del sistema de transporte público, donde el metro es un elemento muy importante y, en la medida que siga desarrollándose, seguirá determinando zonas potenciales para nuevas construcciones en altura", concluye.