Resumen

Dos edificios de 23 pisos debían unirse por dos puentes de cuatro pisos cada uno para constituir, desde el punto de vista normativo, un solo edificio, logrando ventajas en el aprovechamiento del terreno. Una unión rígida entre los puentes y edificios se demostró inviable por las enormes fuerzas que se producirían en la unión durante un sismo. Similarmente, una alternativa dilatada o con uniones deslizantes fue descartada debido a la magnitud de las deformaciones laterales de las torres. Se creó, entonces, un sistema de puentes auto-centrantes, una solución intermedia que permite su utilización activa en el comportamiento dinámico de la estructura. Esta característica se logró incorporando en estos puentes un sistema de vigas híper-elásticas, consistentes en bielas unidas a las estructuras mediante torones de cables pretensados y un sistema independiente de cargas verticales, con aisladores de goma y deslizadores.


Introducción

El proyecto consiste en dos torres simétricas en planta, cada una de las cuales posee 23 pisos y ocho subterráneos, con una superficie aproximada de 115.000 m2.Se debía proyectar un complejo de oficinas y centro comercial unido en los subterráneos y en los pisos 8, 9, 10 y 11, así como en los pisos 16, 17, 18 y 19.

El constituir un solo edificio permitió ofrecer plantas libres de gran tamaño, con acceso por ambos edificios y en sus niveles inferiores se planificó un centro comercial que alberga diversas tiendas, restaurantes y servicios, constituyendo un punto de encuentro para el conjunto de edificios de Nueva Las Condes.


Estructuración

El primer paso consistió en la estructuración de los edificios, decidiéndose una estructura dual (marco-muro) de hormigón armado con marcos perimetrales y un núcleo de muros de hormigón armado. La estructuración cambia bajo el nivel de calle por la presencia de muros perimetrales unidos al núcleo por losas, las cuales, además de su funcionamiento estático, transfieren esfuerzos sísmicos desde el núcleo a los muros de gran longitud del perímetro. El desafío mayor se presentó ante el requisito de unir algunos pisos de las torres mediante puentes. El enfoque tradicional, consistente en permitir desplazamientos mediante dilataciones en zonas específicas para evitar impactos durante eventos sísmicos, no resultó aplicable dada la incertidumbre que hay respecto a la magnitud de los desplazamientos, lo cual condujo a una dilatación extremadamente conservadora. En este escenario se decidió buscar una solución innovadora que permitiera materializar la propuesta arquitectónica, pensándose en el concepto de viga hiper-elástica, estructurando puentes capaces de acomodar las deformaciones impuestas por cada uno de los edificios manteniendo una capacidad de restitución, otorgada por cables postensados, que permiten a los puentes retornar a su posición.