La consolidación del uso de prefabricados de hormigón llega a la máxima expresión en la etapa de diseño de la nave industrial para fábrica de muebles y el altillo para oficinas y sala de exhibición de Empresa La Alpina, ubicada en La Serena. La necesidad del cliente de disponer la fábrica en el menor plazo posible significó la preparación de una propuesta por parte de la empresa de prefabricados de una solución arquitectónica y constructiva, considerando el 100% de obras con prefabricados de hormigón.

La decisión de construir una fábrica se basa en la necesidad de las empresas de agregar valor a sus negocios. Ya sea nueva, ampliación de instalación en uso o sucursales, y para diversos fines tales como manufactura, bodega de materiales, frigorífico, logística o centro de distribución, en cada etapa de decisión de inversión la infraestructura tiene que cumplir objetivos básicos para el resguardo del equipamiento, materiales y, principalmente, para que se mantenga la operación frente a singularidades como terremotos e incendios. Hoy, en mercados tan dinámicos, incluso pensar en el escenario de la futura reutilización para otros tipos de negocios aumenta el valor residual en la etapa de evaluación.

Montaje de vigas prefabricadas.

A partir de lo anterior, la definición del presupuesto y plazo de construcción del proyecto, dimensionamiento en superficie de la estructura, altura libre, modulación entre pilares y materialidad de la superestructura y techumbre, cobran una mayor trascendencia. Lo tradicional en la etapa de diseño es la presentación de tipologías de naves industriales buscando el menor costo de construcción basados en los proyectos ejecutados por cada oficina de arquitectura, sin embargo, la construcción industrializada, junto a mayores y nuevas consideraciones en la etapa de evaluación, generan un punto de inflexión.


La evaluación integral de proyectos que promueve y desarrolla la consultora Discovery Precast, especializada en el uso de prefabricados de hormigón, señala que la construcción industrializada no es una etapa aislada o consecutiva sino una de las principales que puede incluso viabilizar proyectos de inversión que con método tradicional de construcción no lo serían financieramente. Basta considerar algunos de los siguientes atributos, por ejemplo, cuando se toman en cuenta los parámetros certeza de plazo y costo de construcción junto a la reducción de plazo para la puesta en marcha del negocio, estos directamente generan nuevos ingresos por la oportunidad de comenzar producción, bodegaje o arriendo con varios meses previos a lo establecido; durante la construcción, la menor emisión de polvo y ruidos permite desarrollar proyectos en cualquier lugar y en especial en zonas urbanas; lugares de difícil acceso o en condiciones climáticas adversas como alta montaña, se viabilizan gracias a una planificación de construcción compatible con el entorno; por materialidad, el nulo costo de mantenimiento y menor pago de prima de seguros contra incendio; por calidad, durabilidad y capacidad resistente, mayor vida útil que se traduce en una estructura más rentable y segura; por mínimo grupo de personal para el montaje y construcción, no se supedita el proyecto a la escasez de mano de obra y al creciente aumento de su costo; y la oportunidad de asignar terminación arquitectónica con la imagen corporativa evitando costos por materiales adicionales por el alto estándar de calidad de terminación del hormigón a la vista y con cualquier rasgo, relieve y color.

Vista interior de fábrica.

A partir de esto, la evaluación típica con pilares de hormigón armado “cast in place” o metálicos, junto a vigas y costaneras del mismo material, en modulaciones estándar entre pilares de 10 m x 12 m, al ser comparadas con soluciones integrales con prefabricados de hormigón en modulaciones 15 m x 25 m, con experiencias en Chile en módulos de 23 m x 35 m, hacen necesario en la etapa de diseño del proyecto evaluar los atributos de todas estas ventajas competitivas y comparativas. Para el Gerente de Finanzas de una compañía, se establece un escenario financiero que no hace indistinta la metodología constructiva y la materialidad, comenzando a asignarse a la evaluación del proyecto una mirada global y relacionada con el negocio y no solo al presupuesto de construcción.

La empresa de prefabricados entrega un claro ejemplo de la importancia en la integración de actividades en la presentación de propuesta. Primero, la opinión del arquitecto de Pretam ofreciendo un ambiente amplio e iluminado, minimalista por su forma simple y rítmica por la disposicion ordenada de sus llenos y vacíos, integrando elementos característicos del contexto del negocio del cliente como el Torreón de 12 m de alto por 5 m de ancho y sus arcos de medio punto en el acceso principal; y a nivel constructivo, un proyecto de rápida ejecución basado netamente en actividades de montaje de piezas prefabricadas de hormigón desde las fundaciones hasta la techumbre. La única actividad de hormigón realizada son las uniones húmedas y sobrelosa de pisos en altillo.

Muros prefabricados arquitectónicos.

El costo y plazo de construcción no sufrió modificaciones y, comparando las soluciones entre prefabricados y el método tradicional, se redujo el plazo total del proyecto en 50%. En este caso, el cliente tenía muy claro y esperaba el cumplimiento de las certezas declaradas y resultó que todos se mostraron muy impresionados cuando observaban que no existió el trabajo tradicional de movimiento de materiales, personal y maquinaria, retiro de residuos de construcción, espera de camiones con hormigón premezclado para vaciado en moldajes y consolidación de hormigón. Señalaban: … “la obra se veía deshabitada”.

La fábrica es una estructura de hormigón armado y está estructurada en base a elementos prefabricados de hormigón. El sistema de fundaciones es del tipo cáliz junto a vigas de fundación de amarre. La superestructura está compuesta por pilares para la nave y altillo, vigas portantes de sección I pretensadas y viga puntal sección rectangular, prelosas y escaleras en altillo junto a muros perimetrales arquitectónicos de hormigón armado y la techumbre conformada por vigas T. En total, 492 piezas y 950 m? de prefabricados de hormigón armado y pretensado. Consultado el calculista de Pretam, el proyecto de cálculo se realiza según la normativa y códigos vigentes de cálculo estructural, citando normas NCh, Decretos Minvu y ACI 318.

Tipología nave industrial más altillo y proyecto de ingeniería.

Comúnmente las publicaciones relacionadas con las experiencias en proyectos de construcción atienden aspectos netamente técnicos, como las características de los materiales, desafíos e hitos más importantes. En esta oportunidad nuestra intención es mostrar un panorama más amplio y transmitir el impacto de la construcción industrializada en los negocios y lo vital de la participación de todos los actores a lo largo del proceso, desde la decisión de inversión, financiamiento, arquitectura, hasta la construcción y puesta en marcha.

La construcción industrializada, la rapidez y demás ventajas del uso de prefabricados de hormigón, aportan claramente en los plazos para adelantar y comenzar la operación de los negocios. Además, permiten advertir respecto a costos que no son despreciables, relacionados con uso y mantención a lo largo de su vida útil, lo que necesariamente cambia y exige nuevas maneras de evaluación de proyectos para sintonizar con las características de cada negocio viabilizando con mayor certidumbre los actuales, aumentando su rentabilidad y permitiendo aprobar otros gracias a un análisis de sensibilidad considerando los nuevos escenarios con mayor valor agregado que otorgan los atributos de los prefabricados de hormigón.