Seguridad y rapidez en los plazos de entrega, son dos de los aspectos que importan en la construcción de proyectos mineros. ¿Cómo responder a esta necesidad? Una de las alternativas es la industrialización de los procesos constructivos, a través, por ejemplo, de la construcción modular. Claro, porque a través de la industrialización, concuerdan los expertos, se busca obtener una mayor productividad en la construcción.

El sistema de la construcción modular es un proceso de fabricación en serie, donde el producto es el que va avanzando por distintas estaciones de ensamble en un ambiente controlado y con un estricto control de calidad en cada una de las etapas. Esta tipología de construcción, señalan los entendidos, se adapta rápidamente a los cambios normativos y a los nuevos requerimientos de los mandantes, mejorando el estándar en obra.

Entre las aplicaciones para minería, las más comunes son las ampliaciones de campamentos existentes y nuevos, hoteles modulares, edificios de apoyo y naves industriales para mantención de equipos menores y mayores, entre otras edificaciones.

Eugenio Correa, CORREA TRES ARQUITECTOS LTDA.

Cecilia Molfino, FASTWORK CHILE DE COMINTECC.

César Donoso, ASAP SOLUCIONES INDUSTRIALES.

Carlos Lecaros, SAGEMAR.

Diego Mellado, TENSOCRET.

León De Grenade, ASAP SOLUCIONES INDUSTRIALES.

Jorge Grez, CONSTRUTEC.

Javier Vergara, CINTAC.

Patricio Reveco, CINTAC.

La interrogante que hay que hacerse en lo que a construcción modular se refiere es en qué estamos hoy respecto a la construcción modular y su aplicación en minería. De acuerdo a Eugenio Correa, Gerente General y Socio de Correa Tres Arquitectos Ltda., “estamos igual que hace 20 años. Hoy este mercado está representado por varios actores, pero lamentablemente ha habido cero innovación en los últimos años. Lo que observamos, como oficina de arquitectura especializada en soluciones modulares, es que hace dos décadas prácticamente no se ha cuestionado la manera de construir los módulos. Hoy se ocupa la misma tecnología, por ejemplo, que se utiliza en Canadá, para construir”, comenta.

Actualmente, la innovación choca con la tradición del sector. Hecho que lo ejemplifica Cecilia Molfino, Encargada de Fastwork Chile de COMINTECC. “Estamos hace poco en el mercado con nuestro producto, un módulo de hormigón liviano que tiene distintos espesores. Nos hemos encontrado con un gran susto a innovar entre los mandantes; esto refleja lo que cuesta entrar con nuevos productos y servicios. A pesar de la resistencia inicial, ya lo hemos aplicado con óptimos resultados en productividad y rapidez”.

Existe consenso entre los proveedores de que el camino para desarrollar la construcción modular en minería es introducir innovación. Eugenio Correa relata que “como empresa estamos enfocados, a través de dos proyectos CORFO, a desafiar un poco la manera de fabricar módulos. La construcción modular para minería es muy apropiada, en particular porque la mano de obra en faena es de un costo muy alto y cualquier esfuerzo de prefabricación será atractivo para las compañías mineras. Junto con ello, queremos integrar el concepto de que estos módulos se puedan reciclar de un campamento a otro. Sin ir más lejos, para el proyecto SGO (Spence Grow Option) de Spence, se están llevando módulos de Escondida, algo que siempre ha vendido la industria modular prefabricada, pero, como no es el énfasis de su negocio vender productos usados, se enfocan en comercializar módulos nuevos”.

Una de las ventajas de esta industria es justamente la reutilización de módulos, ya que los proyectos en la etapa de construcción requieren de mucha gente alojada, pero después las instalaciones quedan deshabitadas “y es ahí donde estamos haciendo un proyecto de innovación, de los cuales uno es la reutilización de módulos en faena para nuevos usos, ya sea para empleos internos de la minera o usos asociados iniciales. Además, estamos diseñando el nuevo módulo del futuro, recogiendo toda la experiencia obtenida en 20 años de construcción modular. Esto porque creemos que llegó el momento de aplicar innovación”, prosigue Correa. La construcción modular en minería, como lo señala César Donoso, Socio Director y Gerente de Sustentabilidad de ASAP Soluciones industriales, “ha coincidido en cierta medida con el desarrollo minero local, el cual tuvo un auge muy potente durante 10 o 15 años, y de alguna manera, ante la baja del cobre, pasamos un buen tiempo en que la infraestructura modular construida era suficiente para absorber nuevos proyectos”. Hoy el acento está puesto en los requerimientos que demandan los trabajadores mineros, los que prefieren muchas veces desplazarse diariamente, a cumplir turnos de trabajos, en pro de una mejor calidad de vida.

En opinión de Carlos Lecaros, Ingeniero de Proyectos de Sagemar, otra aplicación de la construcción modular, “junto con los campamentos y hoteles, es que los módulos se utilizan para talleres de mantención minera, donde se alojan equipos menores y mayores y también en stock pile modulares”.

El prefabricado de hormigón, desde hace varios años, es un producto que ha entrado fuerte en el rubro minero. “Además de fabricar elementos para minería, construimos prefabricados de hormigón, principalmente naves industriales, para fundaciones prefabricadas, pero también hay una serie de edificaciones que prestan servicios para la minería. En esa línea hemos fabricado estos elementos para empresas de Antofagasta, lo que se conoce como el back up del proyecto minero. A veces trasladamos las piezas desde Santiago y en algunos casos instalamos plantas móviles cercanas a la faena, lo que favorece la productividad y la alta calidad técnica de las piezas”, ejemplifica Diego Mellado, Director de Tensocret.

Residencias mineras

Mención aparte merece la transformación de la industria en lo que a campamentos y hoteles mineros se refiere. Desde hace un par de años que se convirtió en estándar en el rubro, pasar de los campamentos a los hoteles modulares, con la consiguiente mejora en la calidad de vida para los trabajadores, mayores comodidades y entretención en estas verdaderas ciudades que muchas veces alojan a cerca de 5 mil funcionarios pertenecientes a diversas áreas de la operación.

Parte de esta innovación ha provenido de parte de nuevas materialidades aplicadas en los módulos. Como lo explica León De Grenade, Gerente General de ASAP Soluciones industriales, “si bien nosotros no fabricamos módulos, sí los montamos. En la actualidad estamos montando un edificio en Los Bronces, hecho 100% en madera, de seis pisos, con ascensor y con un estándar muy bueno, en base a cubiertas modulares, y un elevado estándar en eficiencia energética”.

A pesar de que existen dos mundos bien marcados, los mineros que pertenecen a las compañías mineras, y los contratistas, donde ambos cuentan con estándares distintos, igualmente ha habido adelantos y mejoras a nivel general. A modo de ejemplo, hoy los clásicos pabellones largos con un baño al centro prácticamente ya no se fabrican. “Ahora los baños son individuales, a lo más son compartidos cada dos dormitorios. Sumado a ello la cantidad de personas por habitación también mejoró; antes eran para cuatro personas y hoy son para dos, con lo cual mejoró el nivel de habitabilidad”, comenta De Grenade.

Lo que ha avanzado bastante fueron las instalaciones de recreación. “Casi todos los campamentos cuentan con gimnasio o spa. Algunos tienen espacios para poder trabajar, salas de cines y recreación. Hoy los sindicatos también apuestan a tener peluquería, pequeñas clínicas, creándose finalmente verdaderas ciudades en torno a la faena minera”, explica César Donoso de ASAP.

En la actualidad, existe el consenso, cada vez mayor, de la necesidad de migrar los procesos tradicionales a un estadio de mayor certidumbre y estándar, lo que se consigue con sistemas constructivos industrializados. Justamente la construcción modular es parte de este concepto más amplio e integral. La industrialización en Chile es de larga data y se han realizado importantes esfuerzos y búsqueda de sistemas constructivos más eficientes e innovadores. Para Diego Mellado, “incorporar la construcción industrializada a los procesos implica el concepto de mejora continua. Pensando en la minería, sabemos que la mano de obra es escasa en la zona norte, también en la zona central, por ejemplo en Teniente, en especial en períodos de agricultura. Con el concepto de industrialización podemos introducir la prefabricación o modularización, entre otros sistemas, logrando procesos de alta calidad y mayor productividad”.

Hoy la robotización en la construcción crece de manera agigantada y para la minería los modelos de prefabricación “son sumamente apropiados, cómodos y resultan de gran efectividad. Es un producto que se puede ejecutar en serie con alta calidad, versus lo que a menudo se encuentra en terreno en la construcción convencional”, expone Eugenio Correa. Y es que la industrialización y sus procesos “están permanentemente en un estadio de romper paradigmas”, refuerza, por su parte, el ejecutivo de Tensocret.

La gran deuda de la construcción modular en minería pasa por la normativa. Para Eugenio Correa es urgente integrar un capítulo minero en la Ordenanza General de Urbanismo y Construcciones (OGUC): “Hoy no hay un anexo dedicado a la minería, y resulta que Chile es un país minero. No hay una norma para este tipo de construcciones, y finalmente hay que someterse a una ordenanza”. Similar opinión es la de Jorge Grez, Socio y Arquitecto de Construtec y Director de Promoción de Construye2025, quien destaca que es una situación aún más profunda con varias aristas.

A modo de ejemplo, detalla que “en Chile no existe norma estructural para estructuras metálicas y llevamos 300 años construyendo con ellas. Y en su defecto tenemos que aplicar normas de hormigón armado a las estructuras metálicas”.

Otra gran brecha que arrastra la construcción modular para su inserción definitiva en el país, de acuerdo a los expertos, viene dada por el conocimiento. “Hoy la formación desde la universidad, tanto para ingenieros, arquitectos y diseñadores, no introduce la investigación. Las tecnologías existen hace mucho tiempo, pero los profesionales no tienen la capacidad de buscar alternativas como lo puede ser la industrialización”, grafica Jorge Grez. En la misma línea, Javier Vergara, Jefe de Ventas de Conjuntos de Viviendas de CINTAC, señala que “hoy se apela a lo tradicional, el mercado prima sobre la innovación y la tecnología, al final las personas que deben manejar el vocabulario, que deben entregar formación al cliente, lo hacen con pocos argumentos técnicos”.

Desde la vereda del acero, Patricio Reveco, Jefe de Proyectos Industriales de CINTAC, detalla que la empresa, desde hace algunos años que ha venido haciendo un cambio paulatino en lo que es el segmento industrial. “Tanto nuestros galpones y conexiones, entre otros elementos, han sido modificados, pensando en las normativas. En paralelo, conformo un Comité del ICHA (Instituto Chileno del Acero), en el cual estamos revisando el capítulo de la protección contra el fuego para el acero, una de las grandes limitantes del tema modular para este material. Hoy estamos llegando a un consenso para elaborar un manual de cómo poder cambiarlo frente al MINVU. En eso estamos avanzando, de manera de revertir el por qué hoy no construimos en acero edificios de 20 pisos en base a módulos”.

El futuro de la construcción modular y su industrialización, necesariamente deberá pasar por un cambio cultural de parte de todos los actores. En el caso de la minería, la aplicación de innovación y nuevas tecnologías serán prioridad los próximos años.