En el caso de Chile, las empresas dedicadas a venta y arriendo de compresores se han encargado de obtener convenio con los principales fabricantes. No obstante, el lugar y qué tipo de producto comprar, dependerá de los requerimientos específicos del trabajo y los gastos asociados, sean estos de transporte, gestión o mantenimiento, entre otros factores demandantes de una buena planificación.
Clasificación
Existen diferentes clasificaciones para los compresores de aire, de acuerdo a su fabricación, aplicación y también a la presión de trabajo, entre otros factores. La clasificación basada en su principio de funcionamiento, divide en dos a los compresores de aire: de desplazamiento positivo (también llamados volumé- tricos) y compresores de aire de tipo dinámicos.
Los compresores de desplazamiento positivo trabajan en función de la disminución del volumen de gas o aire contenido en su cámara de compresión (comprimir aire). Tienen como ventaja su eficiencia, y variedad de presiones, pudiendo, además, generar una alta presión de aire comprimido. Como desventaja, está el alto nivel de vibraciones y ruido.
Los compresores dinámicos, en cambio, basan su principio de funcionamiento en la aceleración de las moléculas del aire, las cuales son “movidas” a gran velocidad gracias al giro de una turbina. Como ventajas comparativas, poseen menor cantidad de componentes en relación a los de desplazamiento positivo, y a igual tamaño pueden producir mayor caudal y trabajar por períodos más prolongados.
Atributos a considerar al adquirir un compresor
• Determinar si se requiere uno portátil o fijo.
• Calcular el nivel de presión y caudal que se necesita.
• Establecer el espacio disponible para el equipo y elementos asociados, principalmente en los fijos. Los portátiles generalmente no presentan este problema al poder moverlos de manera relativamente simple.
• Cerciorarse de tener un nivel de ruido tolerable en el lugar asignado para el compresor.
• Determinar si se tiene acceso a un aire limpio (baja humedad y partículas contaminantes); algunos compresores son muy susceptibles de fallas por este factor.
• Averiguar si el sistema es sensible a fluctuaciones de presión.
• Mantenimiento asociado al tipo de compresor.
Con esta información se puede determinar qué tipo y características debe presentar el compresor que se quiere adquirir. Actualmente, las empresas de servicio de venta y arriendo de compresores, para las áreas de minería y construcción, ofrecen asesoría en la elección del tipo de compresor a utilizar. Adicionalmente, cuentan con servicio de mantención, lo cual puede estar integrado en el contrato, garantizando así la continuidad operacional, aspecto clave a la hora de cumplir con los plazos de las obras y potenciar la rentabilidad.
Tecnologías e innovaciones
Gracias a la constante evolución de la tecnología de los materiales en la construcción de compresores, ha sido posible fabricarlos más compactos y más eficientes en relación a sus partes constitutivas.
En ese sentido, destacan:
• Niveles de ruido cada vez menores.
• Reducción de los tamaños.
• Compresión libre de aceite.
• Disminución del consumo energético.
• Aprovechamiento del calor generado.
• Control remoto.
• Incorporación de monitoreo constante, asociado a la Internet de las Cosas.
Aplicaciones habituales en minería y construcción
• Compresores para maquinarias de perforación, los cuales a través del aire comprimido entregan la fuerza al equipo de perforación.
• Herramientas de percusión tales como taladros, martillos.
• Transporte de materiales en la mina.
• Extracción y limpieza de aire.
¿Comprar o arrendar?
Empresas de maquinaria y equipos cuentan generalmente dentro de sus áreas de negocios con una división de Venta y otra de Arriendo, respondiendo así a los distintos tipos de demandas de los clientes. ¿Cuándo comprar o arrendar un equipo? Los expertos señalan que, generalmente, cuando se necesita un compresor de aire por períodos acotados, como por ejemplo tres o seis meses, el arriendo es una muy buena opción. En cambio, si se requiere uno de estos equipos por períodos prolongados de tiempo, como un año o más, comprarlo es más ventajoso, tanto en términos financieros como de bienes de capital.
