Sergio Torretti Costa.

¿Qué importancia asigna la CChC a potenciar la alianza público-privada?
La alianza público-privada -entendida como la acción complementaria de ambos sectores en pos del bien común- ha sido pieza fundamental para el desarrollo del país en las últimas décadas. Y, asimismo, ha permitido satisfacer los requerimientos más urgentes de millones de chilenos, que, sin la acción de los privados, no tendrían acceso a bienes y servicios de primera necesidad que hoy están a su disposición.

¿Cómo piensan contribuir en este tema?
Nuestro gremio ha tomado la decisión de trabajar activamente en difundir y reposicionar en la sociedad el rol del empresariado y las virtudes de la alianza público-privada, tanto para abordar temas país como sectoriales, estos últimos relacionados con la provisión de viviendas y de infraestructura, así como con la creación de entornos urbanos que mejoren la calidad de vida de las personas.

¿De qué modo impacta, a su juicio, el actual escenario político existente en el país?
No cabe duda de que estamos ante un escenario complejo, con incertidumbres políticas y económicas, producto principalmente de las reformas que se han impulsado y la falta de certezas en las reglas del juego, lo cual se ha traducido en una caída de las inversiones privadas y un menor crecimiento económico. Para revertir esta situación se necesitan reglas claras y, sobre todo, que sean coherentes con el objetivo de dinamizar la economía y promover su componente principal, que es la inversión del sector privado. Reglas que por cierto se construyen a partir del diálogo y de consensos entre los distintos actores sociales.

¿Cómo afecta al sector de la construcción el bajo crecimiento económico nacional?
La construcción es altamente sensible a los ciclos económicos y su comportamiento depende de cómo actúen los demás sectores productivos. Esto significa que, si la economía crece, a la construcción le va aún mejor; pero, si decrece, nuestra industria cae todavía más. Y este último es el escenario que hemos vivido en los años recientes, en que nuestra industria ha presentado niveles de crecimiento muy bajos.

¿Qué medidas resultarían necesarias para lograr un mayor desarrollo de esta industria?
La medida más positiva para reactivar la construcción es que al país le vaya bien y su economía crezca con fuerza. Así se reactivan las obras de infraestructura privada y pública y la demanda inmobiliaria. Por lo pronto, una medida oportuna cuando las finanzas públicas están débiles es impulsar las concesiones.

¿Cómo proyectan el próximo año para el sector?
La construcción suma ya varios años con niveles bajos de crecimiento, lo que se explica por la caída en la inversión de proyectos de infraestructura productiva privada, el menor presupuesto de infraestructura pública y por la contracción en las ventas inmobiliarias. Para el próximo año nuestras perspectivas sectoriales apuntan a un crecimiento nulo.

¿Qué áreas de la industria deberían tener un mayor dinamismo o requieren más inversiones?
La construcción asociada a proyectos inmobiliarios continúa con una alta actividad, ya que se siguen ejecutando los proyectos que se vendieron exentos del pago de IVA que impuso la reforma tributaria. Y también por efecto de los programas habitacionales DS 19 y DS 116. Esto, sin embargo, ha sido contrarrestado por la caída de la inversión en infraestructura, tanto pública como privada, que explica cerca de dos tercios de la inversión total en construcción.

¿Cuál es el desafío de la CChC en cuanto a potenciar el desarrollo en regiones?
Como gremios estamos convencidos de que las regiones son clave para el progreso del país. Por eso nos gusta decir que Chile solo será desarrollado si logra el desarrollo de sus regiones. Y por ello es que también tenemos una Comisión de Descentralización, abocada a promover esta visión, y nuestras cámaras regionales juegan un rol cada vez más activo, promoviendo temas y visiones de interés local.

En términos más concretos, y solo para dar un ejemplo, estamos elaborando carteras de infraestructura regional y trabajando con la Subsecretaría de Desarrollo Regional para que las regiones tengan mayor protagonismo en el manejo de los recursos que obtienen a través del Fondo Nacional de Desarrollo Regional.

¿Qué desafíos existen en construcción sustentable y seguridad en las obras?
La sostenibilidad de las empresas de la construcción y la seguridad laboral, que es parte de la primera, son una prioridad central de la gestión gremial. Por ello nos impusimos el desafío de que nuestras empresas socias incorporen a su gestión los principios de la sostenibilidad y llevamos más de un año trabajando en el diseño de un programa integral que ofrezca a nuestros socios herramientas adecuadas a sus necesidades, que les permitan avanzar en este camino. Por otra parte, hemos asumido el compromiso de hacer todos los esfuerzos que estén a nuestro alcance para lograr el cero accidentes fatales en nuestras obras. ¿Cómo? Desarrollando una campaña que incentiva la implementación de lo que llamamos nuestras Siete Reglas de Oro para construir una cultura de seguridad, con énfasis en dos de ellas: el liderazgo de nuestros asociados en la gestión de riesgos y el involucramiento de los trabajadores.

En este marco, estamos llamando a nuestros socios a comprometerse y a comprometer a sus trabajadores en la gestión de riegos mediante la implementación en las obras de un sistema de reporte de incidentes y de condiciones inseguras, cuya oportuna gestión disminuye la probabilidad de ocurrencia de los accidentes fatales.