Sebastián Meza.

¿Cómo ven este año 2016 para el área residencial?
Por los incentivos en la reforma tributaria de 2015, la construcción se vio beneficiada porque la reforma adelantó la demanda y, por lo tanto, existen muchos proyectos inmobiliarios en 2016 en construcción. La problemática es que estos elementos exógenos concentran la demanda y crean incertidumbre respecto al comportamiento del consumidor en los años venideros. Ya los permisos de edificación cayeron en un -8,6% anualizados a enero del 2016.

En lo que respecta a nosotros, a través de nuestra área inmobiliaria Iandes estamos desarrollando un proyecto en La Dehesa a cinco años, donde contemplamos tres edificios habitacionales.

En su opinión, ¿cómo cree será la evolución de otros segmentos de la construcción?
Miramos con preocupación el mercado de la construcción en general, pero también con optimismo. Hemos visto reducciones en el mercado de la minería, las inversiones de mediano plazo y otras variables conocidas por todos. El índice de confianza del sector de la construcción se mantiene en una zona pesimista, de 33.3 a enero de 2016. Por eso, creemos que debemos ser más ingeniosos y concentrarnos en la productividad eficiente e innovadora.

¿Cuáles son los problemas durante la ejecución de un proyecto que aumentan los costos?
Como en todo mercado, siempre existen problemas “prácticos” que resolver. En el rubro de la construcción, estamos enfocados en la calidad de nuestras construcciones, en el cumplimiento de los plazos comprometidos y en el cuidado de nuestra gente a través de programas de Prevención de Riesgos muy estrictos. Nuestra empresa trabaja continuamente con certificaciones de calidad, de la mano con la Mutual de Seguridad en sus programas preventivos, y de la mano con proveedores para darle mayor eficiencia a nuestro trabajo y apoyar al cliente en los plazos de su proyecto.

En este contexto, muchas veces, un proyecto mal definido, golpea los costos y los plazos muy fuertemente, por eso es relevante que cada proyecto pase a su fase constructiva con todas sus variables bien definidas.

¿Qué medidas están adoptando para reducir sus costos o aumentar su eficiencia?
Nuestras medidas, están enfocadas en continuar desarrollando y consolidando un equipo humano-profesional de excelencia, basado en relaciones de largo plazo. Asimismo, estamos trabajando en un sistema informático de Gestión de Obras para mejorar varios aspectos como la planificación de obra en terreno, el control de avances de obra, medir y proyectar utilidades de obras, gestionar el uso de mano de obra, maquinaria, equipos, herramientas y materiales, y finalmente, medir productividad y eficiencia. Lo anterior, sin descuidar la calidad de nuestras obras y el cuidado de nuestros trabajadores. Adicionalmente, hemos seguido mejorando nuestros “Sistema de Incentivos”, para retribuir a nuestros colaboradores y socios estratégicos los resultados obtenidos.

¿Cómo buscan diferenciarse como empresa constructora?
Cada empresa constructora tiene su sello, su forma de llevar adelante las relaciones comerciales y las dinámicas en obras. Nosotros tenemos una política de relaciones de largo plazo, donde priorizamos mantener a nuestros clientes más allá de los contratos puntuales.