Como un excelente ejemplo para barrios que quieren recuperarse sin destruir su trama patrimonial y sin generar efectos negativos en su entorno, el jurado de los Premios Aporte Urbano 2015 distinguió a Patio Bellavista con el primer lugar en la categoría “Regeneración o Rehabilitación Urbana”.

Los premios, creados por la Cámara Chilena de la Construcción A.G., el Ministerio de Vivienda y Urbanismo y la Asociación de Oficinas de Arquitectos A.G., tienen como fin destacar aquellas obras inmobiliarias que destaquen en sus respectivas áreas por generar un aporte urbano desde los más distintos puntos de vista.

Los responsables de esta contribución arquitectónica fueron los profesionales del estudio Lira y Tuckermann arquitectos.

A la fecha han proyectado diversas obras de viviendas unifamiliares, edificios de departamentos, edificios de oficinas, arquitectura interior, espacios públicos y proyectos comerciales.

Varias de sus obras han sido publicadas en diferentes medios especializados nacionales y extranjeros, y presentadas en la Bienal de Arquitectura de Santiago. En el año 2010, el proyecto Patio Bellavista 2, fue seleccionado para ser expuesto en el pabellón de Chile en Expo Shanghai. En el mismo año, el proyecto fue seleccionado para ser expuesto en la Bienal de Arquitectura.

Martín Lira cuenta que la convocatoria del concurso era “abierta para quien quisiera participar y cada oficina podía presentar el proyecto que estimara más pertinente. Una de las categorías era justamente la de Reconstrucción y Aporte Urbano. Bajo esa premisa postulamos el proyecto y nos avisaron que habíamos quedado dentro de los tres clasificados”, señala.

En el proyecto se abrieron patios interiores manteniendo el perímetro de su fachada, extendiendo los patios y generando lugares de encuentro o plazas.

Justamente la gracia del proyecto Patio Bellavista es el rescate patrimonial que se hizo. Entendimos que era un barrio que existía como tal, que tenía una escala y una morfología de construcciones de una época, con una identidad de barrio, de la vida bohemia. Uno de los plus del proyecto es que rescata la escala, rescata las construcciones existentes y las recicla para un nuevo uso”, señala Lira.

En el proyecto se abrieron patios interiores, manteniendo el perímetro de su fachada, extendiendo los patios y generando lugares de encuentro o plazas que “le llamamos interiores, que además de los efectos propios de habilitar mesas, también son plazas que se le entregan a la ciudadanía y que los mismos habitantes del barrio usan”, destaca Martin Lira.

Se trata por tanto de un espacio que principalmente no se restó del barrio. “Eso es importante porque hay muchos proyectos que terminan rompiendo la trama, y lo que hace Patio Bellavista es justamente abrirse a la trama urbana, darle la posibilidad a una persona que atraviesa desde Constitución hacia Pío Nono, de hacerlo por la mitad de un espacio privado y eso es bien particular de este proyecto”, comenta Sebastián Larroulet, arquitecto asociado de la oficina.

Para los profesionales, la mayoría de los edificios lo que hace es generar una sombra. Lo que se ha hecho con esta obra es “la activación de Constitución al lado de Pío Nono, permitiendo tener la esperanza de que algún día Constitución logre llegar completamente hasta Pío Nono, porque permite la permeabilidad, alimenta de circulación, entregando programas, plazas y atajos”, destaca Larroulet.

Patio Bellavista se abre a la trama urbana, permitiendo a una persona que atraviesa desde Constitución hacia Pío Nono, hacerlo por la mitad de un espacio privado.

Cabe destacar que la oficina de arquitectos lideró la transformación de patio Bellavista desde la etapa 2 en adelante, “y ahora vamos en la etapa 4, en que se han hecho cambios importantes de adaptación en algunas zonas del proyecto o que por programa se han ido readecuando. Venimos trabajando en este proyecto desde el año 2006, es como un proyecto en constante evolución”, indica Martín Lira.

En toda obra patrimonial hay muchos desafíos que se deben tomar en cuenta. “Lo primero es hacer un levantamiento de los edificios existentes, en el caso de Patio Bellavista se trataba de casas antiguas de fachada continua que en sí no tenían mucho valor patrimonial, pero respondían a una identidad de barrio”, cuenta Sebastián Larroulet.

Luego hay que verificar la calidad estructural para saber cómo intervenir, registrar elementos, “nos encontramos con varias sorpresas, por ejemplo, a nivel de fundaciones, en que alguna casas estaban sobre bolones de piedra”, comenta Lira.

En cuanto al reforzamiento de las estructuras de casas existentes, lo que se hizo fue darle un nuevo uso a una cáscara existente, y ponerlo en valor para que siga durando muchos años más.

Otro tema es el reforzamiento de las estructuras de casas existentes, en el caso de este proyecto, “seguramente hubiese sido mucho más simple partir desde cero, pero lo que hicimos fue darle un nuevo uso a una cáscara existente, y ponerlo en valor para que siga durando muchos años más. Para ello en algunas zonas se botaron zonas hechas completas en adobe y se reconstruyeron con la misma geometría y materiales”, expresa Larroulet.

La oficina hoy desarrolla proyectos en dos áreas: una de casas particulares donde se ejecutan casas a pedido, y la otra de desarrollo inmobiliario con proyectos de edificios de oficinas, residenciales, y también comerciales y strip centers. “También desarrollamos un área más de interiorismo y diseño, de habilitación de edificios comerciales y restaurantes”, comenta Larroulet. Esta última es un área a una escala de mayor detalle, donde se trabaja el mueble, la iluminación, es un trabajo más específico, “es más cercano al retail de habilitación de interiores, con complejidades particulares”, expresa Larroulet.

Los edificios de oficina también han concentrado el interés de los profesionales, en base a proyectos pequeños, clase B+, edificios boutique con una trama urbana que invita a la circulación.