Pilar Urrejola.

¿Por qué urge contar con la Ley de los Colegios Profesionales?
Porque es indispensable que la sociedad se sienta confiada en la calidad y consistencia de aquellos que con sus servicios profesionales colaboran en la solución de sus necesidades cotidianas. Esta ley viene a entregar a los ciudadanos herramientas de información que permitan tener antecedentes sobre los profesionales y reconoce legalmente a los Tribunales de Ética.

De este modo, las reglas de probidad y transparencia serán transversales a las distintas profesiones. Para controlar el servicio que las disciplinas tienen que dar a los ciudadanos es fundamental que esta iniciativa legal -que está en el Parlamento desde el año 2009- se convierta en ley para otorgar mayor credibilidad y protección a los usuarios.

¿En qué consiste la “regionalización” de los Colegios Profesionales?
Este concepto responde a la necesidad de contar con gremios fortalecidos en las condiciones específicas propias que presentan en términos culturales, tradiciones, materialidades y paisajes en las distintas ciudades del país. Fortalecer los colegios regionales y colaborar con ellos responde a entregar un servicio propio al caracter e identidad de ellos.

Otra de sus prioridades tiene que ver con la educación…
El cambio en el que hoy estamos inmersos a partir del desarrollo de las Tecnologías de Información y de Comunicaciones ha transformado el modo de vida en general y de modo particular en nuestra disciplina. Ello implica que hay nuevas formas pedagógicas apropiadas a las nuevas generaciones manteniendo un espíritu crítico y creativo frente a la cantidad de información que reciben. Como Colegio intentaremos armar una red de escuelas de arquitectura para saber cuáles son sus perfiles en este nuevo contexto.

Plaza de Armas.

¿Cómo evalúa el nivel de la arquitectura en Chile?
Muy bueno. En general, hay una arquitectura de vanguardia, reconocida en el mundo. A modo de ejemplo, acabamos de tener al arquitecto chileno Alejandro Aravena como Presidente de la XV Bienal de Arquitectura de Venecia 2016, hito que valora a esta disciplina de manera integral.

¿Qué importancia tienen los espacios públicos?
El espacio público es esencial para la ciudad, entrega identidad y pertenencia, es el que nos transforma en habitantes compartiendo lugares de encuentro. La vivienda puede ser retringida en términos de metros, pero si las personas tienen un buen entorno es posible expandir y acoger la vida social. A pesar de los avances logrados, estamos en deuda como país y como gremio; debemos trabajar en diseñar, construir y mantener espacios públicos de consistencia en el tiempo.

¿Qué desafíos hay en materia de patrimonio?
La arquitectura es un arte que está expandido por la ciudad, en que todos estamos involucrados. La arquitectura patrimonial ha tenido cierto avance en términos puntuales, sin embargo en lo que respecta a paisaje, edificios de calidad y la ciudad como un todo, falta muchísimo. Es incongruente que en los concursos de edificios públicos las licitaciones estén definidas prioritariamente por aspectos económicos en lugar de aquellos de consistencia arquitectónica, espacial y contextual. Espero que con el Ministerio de Cultura el patrimonio arquitectónico adquiera el valor que han logrado en otros países.

La discusión sobre participación ciudadana también es habitual…
Pienso que todos creemos en ella, sin embargo, el nudo de esa efectividad está en cómo los profesionales podemos interpretar arquitectónicamente esas expectativas. Lo propio es tener la capacidad de ajustar esos sueños con las medidas de las condiciones, oportunidades y restricciones existentes, y entregar soluciones innovadoras que respondan a los modos de vida contemporáneos.

Barrio Yungay.

Museo de Ballas Artes.

Parque Forestal.