Como señala José de la Vega, “dentro de estos sistemas de calefacción hay variedades. Por ejemplo, en soluciones eléctricas tenemos estufas por convección y con calefactor directo por radiación; y en calefacción a gas están las estufas radiantes y otros modelos que asemejan estufas a biomasa en las que se ve la masa; éstas últimas aportan a la estética, pero a veces el rendimiento no es el mejor”.

Por su parte, Sergio Bahamondez Rivera agrega que “en nuestro mercado disponemos de una amplia oferta, pasando por cinco empresas grandes o marcas, que importan su equipamiento y apoyan en el desarrollo de proyectos de calefacción. Después tenemos varias empresas medianas y pequeñas que importan de forma directa parte de su equipamiento. Esto gracias a los tratados económicos que ha tenido Chile en los últimos años y a los puentes comerciales generados tras la salida de empresarios a las grandes ferias de diferentes países”.


Sistemas más usados

El factor geográfico muchas veces define el tipo de equipo a utilizar en las distintas regiones del país.
El Docente del Area Refrigeración y Climatización INACAP Santiago Sur, comenta que “en la zona norte se aprovecha el sol con equipamiento solar con apoyo eléctrico, mientras que en la zona central se utiliza toda la gama de equipamiento existente: equipamiento de agua caliente con calderas, colectores solares y equipos eléctricos”. En esta zona, precisa el profesor de la carrera de Técnico Universitario en Electricidad Sede Viña del Mar UTFSM, “también se usa la calefacción a leña con el uso de estufas de doble combustión, en tanto que otras viviendas y edificaciones ocupan la climatización, que es una forma de manipular el estado del aire”. Añade que en el sur del país se ocupa calefacción a leña, equipos de agua caliente con calderas y equipos eléctricos.

Además de la zona geográfica del país, José de la Vega indica que el tipo de vivienda incide en el tipo de calefacción a utilizar, al igual que el presupuesto existente a la hora de escoger una determinada solución. “A veces las personas por ignorancia eligen el sistema equivocado: hay que ver las condiciones de la construcción de la casa. Por ejemplo, una de madera se tempera con menor cantidad de energía, no así una casa de material sólido que necesita mayor cantidad. La madera es un aislante térmico, no así los materiales como el cemento o el ladrillo”, afirma.

Cabe señalar, acota Sergio Bahamondez Rivera, que en el caso de las calderas generadoras de agua caliente, trabajan con una amplia variedad de combustibles como el gas, eléctrico, biomasa, pellet, leña y combustibles líquidos. Su uso va a depender principalmente del lugar geográfico, su fácil adquisición, el costo y las normativas de contaminantes que existen por región o zona. Añade que en lo que respecta al uso de estufas, es transversal en todas las regiones del país.
 

Nuevas tecnologías y soluciones sustentables

Sergio Bahamondez Rivera explica que uno de los productos que ha entrado muy fuerte dentro de los hogares son los equipos de aire acondicionado Split de presentación muro. La característica de este equipo es solucionar el problema de enfriamiento, y por tener una bomba de calor, también de calefacción; una particularidad de este equipo Split que lo hace ser más económico.

Además, para mejorar la eficiencia en las calderas generadoras de agua caliente destaca el ingreso del pellet y la biomasa como combustible, además de las de condensación en las calderas murales.

Por último están los sistemas de calefacción híbrida donde una caldera puede trabajar con dos tipos de combustible. En estos sistemas, además de disponer de un precalentamiento con energías renovables como el sol, se llega a la temperatura con una “caldera convencional” usando menos combustible tradicional.

Actualmente existen diversas soluciones sustentables, como por ejemplo aquéllas que usan energía solar. En este sentido, José de la Vega señala que “el Estado la da un apoyo al sistema, entregando un subsidio a todas las viviendas nuevas que empleen energía solar para utilizarlas posteriormente en sistemas de calefacción. Sin embargo, este apoyo es tímido y faltaría extenderlo. Por ejemplo, dar la posibilidad que construcciones que no son nuevas pudieran implementar estos sistemas accediendo al subsidio”.

Añade que en otros casos, se ha utilizado esta modalidad en blocks nuevos en que se implementan sistemas para calefacción de agua, pero no se incluye conversión de energía eléctrica para poder ocuparla posteriormente como calefacción.


Importancia de la mantención

El docente de INACAP Santiago Sur sostiene que la mantención es clave para asegurar el buen funcionamiento y rendimiento, tanto del sistema como del equipo que se utilice. “La mantención asegura que éste no consuma más energía de la necesaria, aumenta su vida útil y da seguridad y tranquilidad si trabajamos con los que usan combustibles”, comenta.

Coincidiendo con lo anterior, el profesor de la UTFS, sede Viña del Mar, precisa que “un equipo de calefacción mal mantenido puede provocar un incendio. Sobre todo las estufas que emplean chimenea, ya que a veces el exceso de hollín en ella genera inflamación y si no está debidamente aislado el sistema de evacuación de gases, producen sobrecalentamiento en el entretecho y vamos generando un incendio. Las estufas a gas también pueden producir incendio si no hay una adecuada mantención, a causa de la alta temperatura que desarrolla el sistema. También es fundamental cuidar que no quede una llave abierta o chequear periódicamente para evitar el eventual rompimiento de una manguera, que provoque un escape y una posible explosión”. Por ello, concluye, todos los sistemas de calefacción deben someterse a mantención de acuerdo a los estándares que entrega el fabricante.