¿Qué funciones cumple la Sociedad Chilena de Acústica?
Dentro de su objetivo de difundir los principales aspectos acerca de la problemática acústica, la SOCHA realiza periódicamente seminarios y talleres, además de mantener permanente contacto con universidades, institutos y organismos como la CONAMA y el SESMA. El propósito que se busca es fomentar el debate, denunciar aspectos que puedan mejorarse, educar y demostrar que el ruido es un agente nocivo que afecta la vida cotidiana de la gente y que hay que tomarlo en serio.

¿Cuáles son las principales acciones que ha tomado para cumplir sus objetivos?
Hemos tratado de generar conciencia en el público a través de distintas actividades durante el año, como el reciente "Día de la Descontaminación Acústica", efectuado el pasado 12 de Junio. Por ejemplo, hemos denunciado las dificultades que tienen para entender a los profesores los alumnos de liceos y colegios situados en cercanías de avenidas ruidosas o cómo afectan las vías reversibles a calles cercanas que reciben un elevado flujo vehicular aumentando su exposición al ruido.

Por otra parte, en Octubre desarrollaremos el Encuentro Chileno de Acústica y en Noviembre, junto a la CONAMA y el SESMA, el Seminario Taller de Contaminación Acústica. Asimismo, cada dos años participamos en el Congreso Iberoamericano de Acústica, organizado por la Federación Interamericana de Acústica, que reúne a las asociaciones de varios países y cuya próxima versión es el 2004 en Portugal.

¿Cómo ha sido la recepción de las autoridades respecto a esta problemática?
No se puede negar que existe voluntad en el Estado respecto al tema de la contaminación acústica. De hecho, entre otras acciones, están fiscalizando los ruidos molestos provenientes de fuentes fijas y regulando la emisión de ruidos de la locomoción colectiva. Además, hay normas en estudio para regular, por ejemplo, los ruidos provocados por las actividades de la construcción y a futuro las emisiones de ruido de los vehículos livianos, medianos y motocicletas. Sin embargo, creemos que aún falta voluntad de incorporar mayores exigencias a la construcción, como lograr la aplicación de la norma chilena oficial 352 que establece parámetros básicos que se deben cumplir para que las obras realizadas sean aptas acústicamente, de modo de lograr una calidad mínima aceptable para obtener un buen descanso en el hogar, aumentar la concentración en el trabajo y mejorar la enseñanza, entre otros elementos.

¿Cuál es la situación actual de la construcción chilena en esta materia?
Una de las consecuencias del progreso es el avance tecnológico, que nos permite construir más rápido y a menores costos, pero no necesariamente con mejor calidad, ya que, por ejemplo, las lozas utilizadas cada vez son más delgadas y los muros divisorios entre casas pareadas o departamentos continuos son muy livianos, aspectos que generan diversos problemas acústicos. Por eso, creo que el cliente final debe fijarse en las cualidades acústicas de un inmueble al momento de adquirirlo y ver si el lugar donde se emplaza no sufre de ruidos molestos. En ese sentido, hacer un diseño acústico adecuado en la etapa de proyecto debiera constituir una parte fundamental en el desarrollo de una obra.