¿Cuál es el objetivo de normalizar en esta materia? El propósito es cumplir con las condiciones de calidad que deben estar presentes en toda obra. Por lo tanto, los elementos deben ser controlados para que las condiciones del inmueble permitan un ambiente que ofrezca el mayor confort interno para las personas, seguridad y un bajo nivel de inversión. Particularmente, en el caso de vidrios y aluminios, las normas en Chile están orientadas al uso de estos materiales en viviendas, en particular puertas y ventanas. Sin embargo, aún no abarcan otros aspectos, como la aplicación en muros cortina. Si bien, en el ámbito internacional existe una serie de normas para este tipo de uso, éstas deben ser homologadas a normas nacionales, dado que una cantidad importante tanto de cristales como de elementos de vidrio son importados, no existiendo requerimientos nacionales para sus condiciones. ¿Qué avances presentan las normas en el uso del vidrio? En Chile se ha avanzado mucho en esta materia, las normativas están bien acotadas y si bien aún quedan temas sin resolver, se van abordando a través de las actualizaciones y homo-logaciones de las normas, por ejemplo, complementándose con algunas ya existentes que validen los componentes químicos y los sellos primarios y secundarios del cristal. En el caso de los vidrios laminados existe una norma que, junto con especificarlos, permite hacer una inspección de ellos con posterioridad a su instalación. Esta atribución, en cambio, no es posible para vidrios de doble vidriado, monolíticos ni templados. Por eso, falta complementar la norma, homologando normas existentes a la realidad nacional. ¿Qué aspectos faltan para desarrollar la normativa? Es necesario que haya uniformidad en torno a los requerimientos que se les debe exigir a ciertas aplicaciones, como por ejemplo los muros cortina, donde aún no hay una normativa desarrollada. Es preciso recalcar que cada país tiene características propias, tanto de presiones de viento como condiciones de temperatura y niveles de certificación, que no son iguales en todas partes. Los muros cortina deben responder a las necesidades sísmicas del país y no a las condiciones donde se fabrican, por lo que deben generarse normas que respalden los requerimientos particulares de cada lugar para cautelar el bien de las personas. Aunque, para normalizar, Chile se ha dividido en zonas climáticas, todavía no se ha especificado la norma en muros cortina, pero sí en materia de ventanas, donde se han desarrollado diversos trabajos en los últimos años relacionados con la regulación térmica, acústica y de seguridad para las personas. Sin embargo, en materia de muros cortina no hay nada, y cada día se utilizan más en la construcción. Lo más relevante a controlar en este tipo de aplicación es que el diseño de los muros se realice siguiendo las condiciones del edificio donde se instalan, y que las infiltraciones de aire y la penetración de agua correspondan a las condiciones de cada región. |