A partir de la década de los noventa, los Muros Cortina comenzaron a ser parte de la imagen arquitectónica de Chile. Sin embargo, fue durante la última década que se perfeccionó la tecnología necesaria para desarrollar Muros Cortina, que permitieron cubrir las cuatro fachadas de un edificio, con distintas formas de sujeción a la estructura del edificio y una gran variedad de cristales especiales, dependiendo de su uso.
Su avance y desarrollo los han transformado en una alternativa altamente confiable, hecho que fue confirmado después del terremoto que afectó al país durante febrero de 2010, donde salvo excepciones, la gran mayoría de las construcciones con Muros Cortina no sufrieron daño alguno.
Como indica Guillermo Silva, Gerente General de Achival, Asociación Gremial Chilena del Vidrio y Aluminio -que trabaja en el mejoramiento de la normativa y que edita manuales técnicos para la optimización del uso e instalación del vidrio y aluminio-, "antes del terremoto existía cierto temor respecto a cómo sería el comportamiento de los Muros Cortina frente a un sismo de gran intensidad, y la verdad es que se comportaron perfectamente bien".
Edificios ícono, entre ellos el Titanium y Consorcio, que resultaron prácticamente ilesos durante el terremoto del 27F, validaron el sistema de Muros Cortina, convirtiéndolo en una alternativa segura incluso para construcciones en altura.
Gran visibilidad y estética de nivel superior
Según Guillermo Silva, quien junto a la Corporación de Desarrollo Tecnológico, CDT, liderará un proyecto Innova-Corfo destinado a la capacitación empresarial del sector, el desarrollo de los Muros Cortina responde a una necesidad estética, derivada principalmente del interés de los arquitectos por dotar a las edificaciones de un diseño más versátil y moderno.
"Los Muros Cortina son una tendencia, relacionada con un estilo muy determinado y que viene dado en gran medida por la influencia de las grandes construcciones que se levantaron hace una décadas atrás en Medio Oriente, Europa y Estados Unidos, de corte estilizado y vanguardista", señala.
Pero, junto con el diseño y la impronta del cristal en grandes fachadas, una de sus ventajas más importantes está dada por la visión panorámica que ofrecen, desde el interior y hacia fuera de las edificaciones, permitiendo importantes ahorros en consumo energético y disminuyendo las horas de uso de luminarias artificiales.
Asimismo, al ser utilizados para uso corporativo y comercial, aportan gran cantidad de luminosidad natural, mejorando la productividad de quienes trabajan en su interior, ya que distintas investigaciones confirman que el espectro de luz natural mejora el ánimo y el desempeño de quienes están expuestos a ella por más tiempo.
Además del valor que el diseño le entrega a un edificio, en términos de eficiencia los Muros Cortina funcionan de manera independiente de la construcción del edificio, lo que posibilita hacer un trabajo modular, haciendo más rápida la ejecución de la obra.
En el aspecto económico, son muy convenientes por la velocidad de instalación, gracias a que gran parte de ellos puede pre-fabricarse.
Un mercado innovador
El crecimiento del mercado de Muros Cortina, a juicio del Gerente General de Achival, está ligado estrechamente también al desarrollo e innovación en cristales. Actualmente se están fabricando con un valor U cada vez menor, denominados Low-E (de baja emisividad de calor) y que están en alrededor de 0,4 U.
Gracias al avance de la tecnología aplicada a su fabricación, en la actualidad éstos pueden ser sometidos a todo tipo de tratamiento, como templado y termoendurecimiento.
Igualmente, si el objetivo es aislar acústicamente, existen vidrios laminados que cumplen eficientemente con este requerimiento, permitiendo que el ruido exterior no llegue al interior de una oficina, aun cuando fuera existan grandes fuentes emisoras de ruido.
Estos cristales se utilizan en distintos tipos de Muros Cortina: de fachada continua o discontinua. Los de fachada continua, contemplan vidrios de piso a cielo, y en todo su perímetro, mientras que los discontinuos están compuestos entre las losas del edificio.
"Asimismo, en algunos edificios el diseño está pensado para que los cristales estén enmarcados en perfiles de aluminio, mientras que en otros el vidrio es un paño liso, sin perfiles", explica el ejecutivo.
La seguridad es otra tendencia presente en el mercado de Muros Cortina. Y en este punto Guillermo Silva indica la necesidad que todos los cristales utilizados en su construcción sean de seguridad. "Por eso es importante privilegiar los cristales templados, que al romperse no dañan a las personas que están cerca; o los cristales laminados, que tienen en su interior un pvb, polímero de alta resistencia elástica, que de llegar a romperse, adhiere hacia el centro las partes del cristal, sin permitir que las astillas salgan hacia afuera".
