El primer paso para lograr el mejoramiento es medir. Esto permite establecer una línea base sobre la cual trabajar. Calibre proporciona, entre otros servicios, este punto de partida. Un proceso de medición tradicional (MEC) considera un seguimiento en terreno que se extiende por 10 días, generando informes diarios de niveles de actividad y uso de recursos, entre otros. Además, se desarrollan informes consolidados con análisis y conclusiones que se traducen en recomendaciones de mejoras. Esto permite identificar y cuantificar las dificultades, y reconocer posibles medidas correctivas en un proyecto. La medición genera impactos de corto y mediano plazo, los que se consiguen adoptando de manera práctica las soluciones. Para proyectar estos resultados y lograr un ciclo real de me-joramiento continuo además de optimizar el uso de recursos y el funcionamiento de un proyecto, es necesario avanzar a otra etapa: Controlar y evaluar las medidas adoptadas. Así, aquellas que resulten exitosas continuarán aplicándose en la obra estudiada y en otras de similares características.

La mejor estrategia para incrementar la productividad es controlar la obra por medio de un seguimiento continuo de los procesos. Respondiendo a estos requerimientos, la CDT proporciona a las empresas la posibilidad de realizar mediciones de seguimiento en sus obras. La nueva modalidad es el "Seguimiento CALIBRE" (SEC), creado como una herramienta de control y evaluación de medidas correctivas obtenidas de las conclusiones de una medición tradicional. El SEC es una herramienta de control de las partidas ya medidas y tiene una duración mínima de cinco días. Su costo es sustan-cialmente inferior a un MEC, pudiendo resultar hasta un 70% más económico. La aplicación de ambas modalidades de medición ha comenzado a dar frutos. Se han registrado disminuciones del 10% en las pérdidas de tiempo en resultados globales de una obra y hasta un 20% de mejoras en partidas relevantes de proyectos. Estas cifras no consideran el impacto de las mejoras en el cumplimiento de plazos, ni disminuciones de pérdidas de tiempo en los recursos no controlados directamente.

Gestión innovadora

La experiencia nos ha permitido innovar en la aplicación del sistema. Con los cambios introducidos, CALIBRE apunta a convertirse en una herramienta de gestión permanente e indispensable para las empresas. El nuevo modelo pretende realizar planes de medición, control y seguimiento que abarcan diversas obras de una empresa en períodos de un año, realizando procesos (MEC) y de seguimiento (SEC) en las distintas etapas constructivas. Estas modalidades posibilitan el mejoramiento continuo y el aprendizaje por medio del bench-marking interno, que se suma al bench-marking con otras compañías del sector. Las reducciones de tiempo perdido confirman que el uso de sistemas que respaldan la gestión de los proyectos, generan mejoras concretas. Además, los costos asociados al uso de herramientas como CALIBRE no significan un gasto adicional para la obra, sino una inversión que tendrá retornos en el corto plazo.