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En los últimos años hemos sido testigos de un gran avance tecnológico. La llegada del Covid-19 trajo consigo una gran aceleración en el mundo digital, pues todas las actividades cotidianas se volcaron a la virtualidad. La educación, salud y trabajo, por necesidad, fueron llevadas a lo digital lo que se tradujo en un incremento exponencial en el tráfico de internet y una cantidad significativa de datos que proteger.
Esto también resultó en un gran aumento de empresas y procesos migrando hacia la nube y las aplicaciones. Este escenario, sin duda, ha exigido un nuevo enfoque de estrategias TI para que las empresas brinden una experiencia de usuario eficiente y segura, independientemente de dónde se encuentren los usuarios y las aplicaciones.
Para poner en marcha esta nueva estrategia es importante tener en consideración lo que se ha denominado como Secure Access Service Edge (SASE), la combinación de redes definidas por software en una red amplia (SD-WAN) con tecnologías de seguridad en la nube. De hecho, según datos de Gartner, se estima que el 40% de las empresas tendrán estrategias explícitas para adoptar SASE para 2024.
“Hoy en día es esencial considerar en todo aspecto del negocio la seguridad virtual. SASE trabaja identificando entidades dentro de una red, como personas, sucursales, dispositivos, aplicaciones o servicios, y monitorea permanente los riesgos de seguridad. Una arquitectura con el Perímetro de Servicio de Acceso Seguro permite aplicar, en tiempo real, políticas de seguridad a cualquier entidad, sin importar dónde se encuentren, dando agilidad a la compañía”, aseguró Claudio Ortiz Welsch, Gerente General de Cisco Chile.
Es así como los departamentos de TI han asumido un rol clave para garantizar que las aplicaciones funcionen sin problemas, que los usuarios estén satisfechos y que se mantengan las operaciones. A pesar de no ser una tarea sencilla, es posible ofrecer soluciones con un mejor rendimiento y menor costo en entornos de cloud pública que administren las cargas de trabajo considerando diversos recursos.
“Actualmente, gracias a la tecnología, es posible manejar servicios desde una aplicación. La experiencia que ofrece la misma depende, en gran medida, del rendimiento de la red, la satisfacción e interacción del cliente y/o los empleados. Si las aplicaciones no funcionan a la perfección, pueden perjudicar los resultados de una empresa e incluso afectar el valor de su marca” afirmó Ortiz.
Fortaleciendo el negocio con estrategias multicloud
Cada día existen más exigencias en las industrias, y para satisfacerlas es importante contar con mejores infraestructuras que permitan adaptarse oportunamente a las demandas. Ante esto, contar con diferentes ambientes virtuales es una oportunidad para impulsar el desarrollo del negocio.
Hoy más que nunca, se hace primordial trabajar en ambientes multicloud ya que estos ofrecen grandes beneficios. Permite interactuar sin complicaciones, desarrollar, implementar, migrar y gestionar aplicaciones, con seguridad garantizada.
Las aplicaciones son el principal vector de negocios y la puerta de entrada o salida de los clientes en las empresas, por lo que es esencial repensar su enfoque desde una base digital. “En la era digital, los consumidores otorgan igual o mayor importancia a las experiencias digitales que a la interacción cara a cara con una marca. Los servicios digitales, y las marcas detrás de ellos, deben reconocer y recompensar la lealtad del consumidor y proporcionar contenido y experiencias personalizadas” concluyó el ejecutivo.
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