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| Nicolás Goldstein, Presidente Ejecutivo de Accenture Chile. |
Casi de la noche a la mañana, las organizaciones de todo el mundo tuvieron que trasladar la mayoría de sus fuerzas de trabajo y operaciones fuera de las instalaciones debido a la pandemia. Esta hazaña no habría sido posible sin la tecnología. La transformación digital ya no es una aspiración. Ser digital se ha convertido en un imperativo para la supervivencia.
¿De qué se trata la fluidez digital? La fluidez digital se basa en 4 pilares clave: el desarrollo tecnológico de la fuerza de trabajo (TQ) + operaciones digitales + bases digitales + liderazgo y cultura digitales. Cuando las cuatro facetas están en lugar, los trabajadores ganan agilidad, y la organización lidera en métricas clave de rendimiento como innovación y servicio al cliente.
Accenture acaba de lanzar un estudio para medir la madurez digital de las empresas y establecer mecanismos clave para avanzar. De acuerdo con el reporte, sólo el 14% de las empresas a nivel mundial es digitalmente madura. Según explicó Nicolás Goldstein, Presidente Ejecutivo de Accenture Chile, “es muy importante avanzar en este aspecto, ya que las organizaciones que son más fluidas digitalmente tienen 5,7 más posibilidades de contar con un crecimiento sobre el 20% en los próximos tres años. Además, las empresas líderes en fluidez digital tienen una mejor percepción entre sus empleados y consumidores: 69% es considerado un buen lugar para trabajar por sus colaboradores y 68% lidera en satisfacción del cliente. Así también, alcanzan mayor eficiencia en el negocio: 62% lidera en innovación y 61% en eficiencia operacional”.
Los líderes empresariales, y también los trabajadores, están luchando por navegar en este nuevo mundo de trabajo posibilitado por la tecnología. Muchas empresas no estaban preparadas para esta transición abrupta. La investigación de Accenture muestra que más del 60% de los trabajadores está trabajando a distancia, y menos de la mitad de las empresas estudiadas en el reporte no tenían políticas de control remoto para toda la empresa en agosto de 2020. Un tercio de los trabajadores estaban usando sus propios dispositivos para el trabajo, y el 25% de los trabajadores estaba experimentando problemas regulares con sus tecnologías remotas.
El reporte establece tres aspectos clave en los que deben avanzar las empresas para alcanzar la fluidez digital.
Desarrollo: La fluidez digital debe ser pensada de manera similar a como la gente usa los idiomas. Si alguien sabe leer y escribir en un idioma, entiende las herramientas básicas del habla, como la lectura y hablar. Sin embargo, si alguien maneja con fluidez un idioma, es capaz de crear algo nuevo con las herramientas, como la elaboración de un poema o participar en una conversación robusta. La fluidez desbloquea nuevas formas de conocimiento, creatividad e innovación. Tener fluidez digital no es diferente. La fluidez digital permite a las personas construir sobre bases tecnológicas y liberar la creatividad. El estudio concluye que la fluidez digital es el eje para impulsar una fuerza laboral ágil y que explica el 54% de la capacidad de un trabajador para ser ágil.
Personas: El estudio de Accenture identifica 4 tipos de trabajadores digitales: colaborador remoto; trabajador disciplinado enfocado en metas; colaborador adaptativo para trabajar en equipo y el innovador continuo. Cada uno de ellos tiene sus necesidades específicas e identificarlos es clave para que las empresas puedan cerrar su brecha de fluidez digital y, de esa forma, alcanzar la agilidad.
Plan: El COVID-19 puso de relieve la brecha entre las empresas de alto rendimiento digitalmente y las de bajo rendimiento. La transformación digital permite a una organización ser más eficiente y estar preparada para el cambio, creando nuevas experiencias para los trabajadores y los clientes. Algunas de las tecnologías emergentes que son parte integral de fluidez digital, como la nube, pueden equipar al negocio para girar rápidamente en medio del cambio y permitir la democratización de la IA, la robótica y la preparación de los trabajadores.
Pero alguien debe liderar el viaje de la organización para perfeccionar su fluidez digital. El CIO tiene un papel integral que desempeñar en el viaje, pero el papel en sí mismo ha cambiado. Lo digital se ha integrado en la forma en que funciona el negocio. El CIO puede ayudar a liderar el viaje y establecer la línea de tiempo para construir la base digital, desde la rotación de aplicaciones y datos a soluciones basadas en la nube, hasta la creación de un lugar de trabajo digital rico en oportunidades. Pero el viaje hacia la fluidez digital es responsabilidad de todo el C-Level.
Hay ciertas tecnologías clave en el viaje hacia la fluidez digital. Y, de acuerdo con el estudio de Accenture, los trabajadores cuentan con un entendimiento medio de ellas:
En una escala de 1 a 5, los trabajadores están mejor preparados en herramientas de colaboración digitales, robótica, cloud computing e inteligencia aplicada.
Para enfrentar este escenario es necesario que las empresas utilicen data analytics para determinar el nivel de preparación de su fuerza de trabajo para trabajar junto con las tecnologías. Diseñar un plan de rendimiento, las recompensas y el aprendizaje alrededor de cada tipo de trabajador digital. Por ejemplo, uno podría querer reconocimiento público, como una placa digital, mientras que otros pueden querer beneficios monetarios.
Además, las organizaciones deben habilitar las operaciones digitales, impulsando las tecnologías como la nube para mejorar el rendimiento. Estas tecnologías permiten a las personas trabajar más eficientemente, tomar decisiones informadas y rápidas y ser más receptivos a las cambiantes necesidades de los negocios. Pero no es tan simple como sólo digitalizar procesos. La transformación digital debe ser vista más holísticamente con consideraciones acerca de cómo afecta a los procesos, las políticas y las formas en que las personas trabajan e interactúan con los clientes.
Cuando las tecnologías están ahí y las personas están equipadas con las habilidades correctas para usarlas, puede transformar las formas de trabajo para beneficiar al negocio en su conjunto. Por ejemplo, permitir una mayor el acceso a la información puede ayudar a las personas a ser más eficaces en sus trabajos. Pero la gente necesita entender el valor que estas innovaciones traen. De lo contrario, las tecnologías se quedan sin hacer nada y no se utilizan para mejorar el trabajo diario. Para avanzar, es necesario impulsar una cultura digital al interior de las organizaciones.
El informe está disponible en shorturl.at/pxMQ3
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