Definidas como dispositivos que emiten imágenes directamente a la red sin necesitar de un PC, las cámaras IP están irrumpiendo en el mercado local por las múltiples ventajas que ofrecen. Por ejemplo, posibilitan ver sus transmisiones las 24 horas del día desde cualquier lugar del mundo, sólo conectándose a Internet, son capaces de comprimir un archivo de video y enviarlo por correo electrónico y de utilizar diferentes cantidades de fotogramas para conservar el ancho de banda según las necesidades.

Rafael Cordero, Ingeniero de Preventa de Magenta, consigna que "dentro de las ventajas de las cámaras IP está el uso de la red de datos para el transporte del video. Estas no necesitan de una nueva red comúnmente coaxial, para la implementación de la solución y la mayoría pueden telealimentarse utilizando el cable de datos a través del estándar PoE, lo que evita contar con un punto de energía eléctrica en el lugar de instalación. También existen alternativas Wireless que permiten integrar estas cámaras a las redes Wi-Fi existentes en las instalaciones del cliente".

"Básicamente las cámaras IP nos permiten monitorear eventos de manera remota a través de una red de datos local o Internet. Y sus principales aplicaciones son seguridad-vigilancia y monitoreo de procesos. Sin embargo, la creatividad del cliente puede llevar el uso de estas cámaras a otros ámbitos como el marketing y la publicidad, y mostrar a través de una página web por ejemplo, el avance de una obra en construcción o apreciar el flujo de gente en un pub", sostiene Gonzalo Gamio, Product Manager B&P de Sony.

En opinión de Daniel Salcedo, Consultor Tecnológico de Transworld, las diferencias de las cámaras IP radican en que éstas no requieren de un enlace dedicado, generan alarmas y permiten almacenar las imágenes en caso de detectar algún movimiento. "Una de las principales ventajas de las cámaras IP es que posibilitan el monitoreo detectando movimientos sin sensores o equipos adicionales, lo que las hace mucho más independientes, ya que además, tienen su propio servidor web", añade el profesional.

Idalides Terán, Regional Business Manager para Cono Sur de D-Link Latinamerica, en tanto, sostiene que las cámaras IP son transversales a cualquier mercado productivo porque sirven para todo lo que se quiera monitorear a distancia. "Con ellas se puede monitorear diversos acontecimientos a distancia, ya sea en fábricas, colegios, jardines de párvulos, empresas, calles y casas, entre otros lugares".

Los requisitos

Si bien sus aplicaciones y manejo posterior son de fácil entendimiento para el usuario, a la hora de implementar uno o más dispositivos de este tipo, se requiere tener algunas consideraciones en cuenta.

"Los requisitos que debe cumplir un usuario empresa u hogar, es contar con una red de datos al interior de su estructura. Esta red deberá ser capaz de soportar el número de cámaras IP a instalar (comúnmente 300 Kbps por cámara), lo cual ya no es problema debido a que comúnmente se cuenta con anchos de banda iguales o superiores a los 100 Mbps y a que hoy en día es posible priorizar y separar el tráfico a través del uso de VLAN", explica Cordero.

Terán, en tanto, sostiene que en el hogar, las cámaras IP se utilizan como una solución de ‘Hogar Digital’, por lo que sólo se necesita un acceso a Internet. En el caso de una empresa, las cámaras se emplean como una solución de monitoreo constante, motivo por el que se requiere de un PC o una solución de storage para almacenar la información que diariamente capturan. "Aquí lo vital es que el distribuidor o integrador sepa diferenciar muy bien los modelos y los requerimientos específicos de cada usuario, como por ejemplo, movimiento, audio y zoom exterior o interior, entre otros", explica la ejecutiva.

Para Daniel Salcedo, las condiciones del entorno son muy importantes al momento de la evaluación de un proyecto de este tipo. El profesional aclara que "se debe considerar si existe la posibilidad de llegar a ellas con cableado o si deben ser inalámbricas, si estarán en el interior o exterior de la empresa o hogar o si se requiere que trabajen con poca o cero luz".

Ahora bien, el que se implemente un sistema más o menos complejo, añade Gamio, dependerá de la necesidad final del cliente. "Puedes partir con una cámara fija administrada desde su browser interno y conectada punto a punto con el PC, para seguir con instalaciones más sofisticadas que incluyan decenas de cámaras, sistemas de alarma y almacenamiento, software de administración, y distribuirlas en distintos lugares geográficos", indica.

Sus potencialidades

Las cámaras IP están en constante evolución y día a día aparecen nuevos y mejores modelos, lo que sin duda está contribuyendo a su incremento, pero, ¿estamos en un buen pie o aún nos queda mucho camino por recorrer?

Gamio explica que hoy es posible encontrar cámaras con sistema de movimiento PTZ (Pan-Tilt-Zoom), rotación de 360° continuo, detección de movimiento, distintos compresores y protocolos, alarma I/O, salida de video analógico y notificación vía e-mail de eventos. No obstante, el mercado de cámaras IP en Chile aún está madurando, por lo que existe un gran potencial de desarrollo.

"Las principales dificultades para su expansión no obedecen estrictamente a un criterio económico, sino más bien a temas relacionados como la falta de conocimiento sobre esta tecnología en el cliente final, prejuicios contra la estabilidad, seguridad y costos, confusión entre webcam y cámara IP, y claridad respecto de los fabricantes serios en este mercado", indica el ejecutivo de Sony.

Por otra parte, Terán señala que existen múltiples tipos de soluciones, ya sea alámbricas o inalámbricas, con o sin audio, y opciones de controlar el movimiento de la cámara en forma remota, pero lo más importante está en ofrecer a los usuarios respaldo en términos de call center, soporte técnico e ingeniería focalizada en cada segmento de mercado. A su vez, la profesional agrega que la mayor barrera para su expansión está en la desinformación respecto de sus usos y los requisitos que se necesitan para obtenerlas, señalando que "no todos saben que no es necesario contratar un enlace de Internet con IP fija, cuyo costo es mayor, para instalar una cámara IP, sino cualquier enlace que tenga un ancho de banda mínimo de 256 Kbps".

El precio, es según José Badilla, Director Comercial Cono Sur de OvisLink, una limitante en la masificación de las cámaras IP. "Aún en Chile el mercado es muy pequeño comparado con los países que adoptaron esta tecnología como válida en el campo de la vigilancia. Esto, porque son todavía muy caras para la mayoría y obviamente en la medida que se reduzcan los costos, veremos una mayor expansión de éstas".

A juicio de Salcedo, la mayoría de las cámaras IP del mercado tienen funciones similares, lo que las diferencia son su calidad, software de procesamiento de datos y soporte de pre y postventa que entregue la marca. "Por esto, antes de comprar conviene hacer un buen análisis de costo/beneficio para no malgastar el presupuesto del cliente", recomienda.