Con el término del año 1996, comenzaba una nueva etapa en la historia de la industria de la computación en Chile con la consolidación de un modelo de distribución. Nombres como Computek, Microcomputadores, Markvision, TecnoMundo, CHS Promark y Computer 2000 daban sus primeros pasos conquistando la fidelidad del canal de distribución. Otros, como Hardware Express y Clon Express, comenzaban a sentir la presión de mayoristas con grandes espaldas y un gran apetito por market share, muchas veces sacrificando rentabilidad en pos de obtener mayor volumen y eficiencia a su logística.

Para desgracia de Lan Chile y American Airlines, los ejecutivos de las empresas informáticas ya no necesitaban peregrinar mensualmente a las bodegas de Merisel u otros en Miami para abastecerse de memorias, tarjetas y discos duros, pues ahora lo más lejos implicaba ir a la Panamericana Norte o a Huechu-raba.

En esos años, el mercado de computadores personales alcanzaba unos 200 mil equipos al año y las marcas que dominaban eran Acer, IBM y Compaq.

Curiosamente, ninguno de esos fabricantes aparecen hoy en este segmento. Los que seguían a este trío son hoy marcas que continúan siendo muy relevantes: Apple, Packard Bell, Hewlett-Packard y Dell, aunque en esa época competían codo a codo con Epson, Digital, Olympia y Data General.

Los equipos ensamblados localmente no pasaban del 20%, aunque ya eran percibidos como una real amenaza por las marcas tradicionales.

PCs en el supermercado

En aquella época, la computación era algo serio, muy profesional. Y si bien Bill Gates ya se había hecho famoso pronosticando que en el futuro inmediato habría un computador en todos los hogares, la sola idea que los PCs podrían venderse en supermercados junto al pan y la pasta de dientes hacía entrever sonrisas entre quienes se les hiciese tan disparatado comentario.

No obstante lo anterior, Quintec se asociaba con Falabella para crear una cadena de tiendas para ventas al detalle de tecnología e informática para el mercado hogar y Sonda hacía lo propio con Almacenes París a través de su cadena Tecnopolis. Al centro de estas conversaciones, estaba la posibilidad de empezar a vender computadores con las tarjetas de crédito de las multitiendas.

Así, como nadie prueba la profundidad del río con ambos pies, las multitiendas optaron prudentemente por buscar asesoría con los expertos antes de entrar al misterioso mercado de la computación. A una década de lo anterior, el impacto del gran retail en la industria de la computación no cesa de ir en aumento.

Los distribuidores importantes de la época, del tipo Asicom, ASC, ST Computación, Makros o Rimpex, amén de la cadena Infoland, se preparaban para un futuro lleno de promesas y amenazas. Sólo algunos pasaron la prueba. Destaca entre estos últimos Impresión Uno, quizás el ejemplo más impactante de cómo algunas empresas lograron percibir que para enfrentar los inminentes cambios, había que optar por la focalización y la especialización en nichos, optando por los servicios y el valor agregado como los elementos que rentabilizan su gestión, más que el incierto márgen que se pudiese obtener por el movimiento de cajas.

Entre los productos que amenazaban con llegar a futuro al mercado, destacaban en esa época los monitores de cristal líquido. El año 96, a precios internacionales, una pantalla LCD de 12"se vendía en US$650. Este es quizás uno de los nichos que más tardaron en popularizarse y alcanzar volumen, al punto que recién ahora, después de 10 años, se comienza a vislumbrar una transformación del mercado, en que los monitores LCD comenzarán a desplazar definitivamente a los CRT.

Otro de los destacados es Palm, que con el lanzamiento de la Pilot 1000 inauguró una nueva categoría de equipos, las PDAs. Por US$300 era posible adquirir una de estas maravillas, con 128 kbytes de memoria y un procesador de 16 MHz. Lejos de los pequeños monstruos que hoy se comercializan, pero con una dosis de funcionalidad muy similar a la que hoy es posible obtener de las nuevas generaciones de PDAs.

El sueño de que además incluyera telefonía y datos móviles ya dejó de ser un sueño, pero aún no madura lo suficiente como para popularizarse en el mercado. Quizás haya que esperar un par de años más.

También el DVD comienza a imponerse como formato. Evitando los costosos conflictos del tipo VHS-Betamax, los diferentes consorcios encabezados por Sony y Philips por un lado, y Matsushita, Toshiba y Time Warner por el otro, introdujeron en conjunto en 1996 una norma común del DVD, el cual rápidamente ha barrido del mercado tanto a CDs como a los propios VHS, apoyando de cierto modo la convergencia digital entre lo que es computación y entretenimiento en el hogar.

1996 también es el año de la consolidación de Internet. Microsoft lanza Internet Explorer 3.0, que introdujo elementos como Internet Mail y News 1.0, la libreta de direcciones, soporte para CSS y productos hoy tan conocidos como NetMeeting. Esta versión, ya podía mostrar imágenes en formato .gif y .jpg, así como reproducir archivos .midi.

HP y Verizone, Visa y otros aceleran el desarrollo de sistemas seguros de pago a través de Internet, sentando las bases para que se desarrolle el comercio electrónico.

Interesante por último, resulta recordar cuando en 1996, las expectativas de la industria eran poder llegar a vender el extraordinario número de 10 mil notebooks en el siguiente año. Era una meta extremadamente ambiciosa, considerando que entonces las características de precio y capacidad eran inversamente proporcionales entre notebooks y PCs de escritorio. Caros, lentos y bastante poco portátiles, también los notebooks tardaron 10 años en conquistar un lugar de privilegio en el mercado, al punto que hoy ya están superando en ventas a los PCs.

Muchas fueron las predicciones que osadamente se hicieron en las páginas de Channel News en estos 10 primeros años de circulación.

Naturalmente, son muy pocas, si acaso alguna, las predicciones que realmente se cumplieron y en los plazos que se esperaba.

Pero esa no es en todo caso nuestra función. Channel News es simplemente el canal de comunicación que reúne a la industria informática y su canal de resellers. En sus páginas, sólo nos remitimos a comentar y difundir lo que son las espectativas, deseos, políticas y estrategias de cada uno de los actores que participan en esta industria. Es la suma, promedio y ponderación de las distintas opiniones y predicciones las que permiten a las empresas orientarse en un mercado que como hemos sido testigos, es dinámico, siempre cambiante y muy peligroso para quienes no son capaces de advertir las señales con anticipación. Y como Woody Allen dijo: "Me interesa el futuro porque es el sitio donde voy a pasar el resto de mi vida".

Para el canal de distribución, Channel News sigue teniendo el valor de ser el punto donde converge esta industria, y desde donde es posible tratar de intuir su devenir.

Agradecemos que nos hayan acompañado en nuestros primeros 10 y esperamos poder seguir siendo útiles en los próximos 110.