Valeska Arias.

¿Cuándo y cómo nace Kropsys?
Kropsys nace en Concepción en 2010 como un emprendimiento del Ingeniero Civil Informático Sergio Ulloa. En ese entonces, Sergio trabajaba para una importante institución médica en la VIII Región y se dio la oportunidad de comenzar con una de las unidades de negocio que más nos representa, que es el arriendo de equipos de impresión. Ese fue el paso para crecer y desde entonces, hemos ido formando poco a poco el equipo que trabaja en este proyecto.

Posteriormente, nacieron otras áreas de negocio dentro de la empresa, pero siempre bajo el pilar del arriendo de equipos de impresión.

Actualmente, ¿cuántas áreas de negocio tiene la empresa?
Hoy en día tenemos tres unidades de negocio: arriendo de equipos de impresión, externalización de plataformas de call center, y equipamiento computacional, ya sea venta o arriendo de productos como all-in-one, notebooks, desktops, tablets, etc.

Además, como un proyecto que empezamos a desarrollar producto de la pandemia, vamos por nuestra cuarta unidad de negocio, que es la venta transaccional de equipamiento de tecnología, donde estamos preparándonos para lanzar una tienda online. Ya tuvimos una marcha blanca en septiembre y ahora estamos realizando algunos ajustes.

En términos de números, después del arriendo, ¿cuál es la unidad más fuerte?
Call center, área que tiene unos siete años funcionando y con la que nos hemos desarrollado bastante en el sector Salud, trabajando con clínicas, hospitales y algunas concesionarias. Podría decir que somos un 70% Impresión, un 20% Call Center, y el restante 10% sería para la línea de Cómputo, la que apostamos seguirá creciendo.

¿Qué beneficios tiene para los clientes la externalización de servicios TI?
La principal ventaja es que TI pasa a ser una preocupación menos. Además, se logra a largo plazo una disminución importante de costos y se mantiene una continuidad operativa, ya que a diferencia de organizaciones que trabajan con ingenieros informáticos externos que no están 100% disponibles para ellos, aquí hay una garantía que asegura que nuestro trabajo es atender al cliente y mantener la continuidad operativa de su equipamiento. En este sentido, hoy tenemos técnicos propios desde Iquique a Osorno y, en casos muy puntuales, recurrimos a la subcontratación.

Bajo este modelo, tampoco se requiere destinar una persona para que haga compras de suministros, ya que hay contratos de arriendo. Siempre tratamos de que la atención que brindamos a nuestros clientes sea con personal propio, porque se nota la diferencia.

A su juicio, ¿cuáles son los hitos más relevantes en la trayectoria de Kropsys?
Creo que, para ser una empresa joven, ha tenido varios hitos importantes. El primero a destacar es que a los cinco años de vida (2015), la empresa tuvo un cambio de oficina por el nivel de crecimiento que tuvo y, luego, el 2018 se pegó otro salto grande debido al crecimiento del área de Call Center, lo que generó nuevamente otra ampliación en la infraestructura y también en el número de personas.

Asimismo, Kropsys participó en 2017 en un programa de Consultoría y Gestión Empresarial, el que le permitió focalizar sus recursos y esfuerzos, ya que como empresa en crecimiento, era necesario saber dónde inyectar recursos y qué faltaba para ordenarse. En ese sentido, este proceso fue muy útil, y lo marcaría como un hito, porque en ese momento se empezaron a tomar decisiones que cambiaron la estructura y el foco de la empresa.

¿Qué cambios realizaron para ir en sintonía con el crecimiento de la empresa?
Uno de los proyectos más importantes fue conformar el área Comercial, desafío para el que me integré a Kropsys hace tres años. Antes de eso, la empresa solo tenía las áreas Técnica y Operacional, ya que la parte Ventas y Comercial la veía Sergio de manera directa, pero debido al crecimiento que estaba experimentando la empresa, era necesario incorporar a una persona que potenciara las diferentes unidades de negocio de la empresa y yo me integré a ese desafío.

Por otra parte, a fines de 2018, comenzamos a trabajar en la certificación ISO 9001, incorporamos más personal a las áreas Administrativa y Operacional y también nuevas herramientas de trabajo (software) que nos permitieran estar más comunicados y tener todo en línea. Fue toda una “revolución” en un año y medio de trabajo.

La pandemia también trajo desafíos…
La pandemia generó cambios en todas las organizaciones. En nuestro caso, voy a destacar dos: la forma de trabajar del área comercial y cómo empezamos a abordar otros segmentos de mercado. Desde siempre, hemos trabajado bastante con los Municipios y el área de Educación (colegios y universidades), pero con la pandemia, todos los contratos y proyectos con establecimientos educacionales quedaron parados y nuestros niveles de facturación bajaron significativamente. Entonces, además de cuidar nuestra cartera actual de clientes para no perder a ninguno, una estrategia fue enfocarnos en el único sector que estaba respondiendo para todo el país, que era Salud, sector donde nacimos.

¿Cuáles son los retos de trabajar con el sector Salud?
Salud es muy exigente. Tiene muchos procedimientos y protocolos, debido a que la labor que desempeña es siempre crítica, por lo tanto, no pueden tener una impresora parada y requieren de un nivel de servicio inmediato, ya sea tanto en lo técnico como en lo comercial. Por ello, el tener un área operando 24/7 es el mayor desafío, pues deben y necesitan mantener al 100% la continuidad operativa del equipamiento.

¿Es difícil ser un canal de regiones?
Es un tema, pero lo hemos sabido manejar. Por ejemplo, cuando empezó la pandemia, una de las decisiones que tomamos fue ser referentes en la zona Centro-Sur del país, pero muy pronto nos tuvimos que replantear y apostamos a expandirnos. Fue así como ganamos un proyecto en el Hospital de Iquique, que atendemos actualmente, compitiendo con varias empresas de Santiago y estando a 15-18 horas de esa ciudad.

¿Qué nos jugó a favor? Ser una empresa de región. Así nos dimos cuenta que podíamos hacerlo y empezamos a ver otros proyectos en la zona. Además, para compensar la distancia física con nuestros clientes, hace más de un año abrimos una oficina en Santiago, que actualmente es operativa, pero que también tiene la misión de ser en el corto plazo una oficina comercial.

¿Cuál es el sello de Kropsys?
La agilidad. Somos una empresa joven, con gente joven, y eso genera celeridad en los plazos, en las respuestas, en las decisiones. Lo otro que nos caracteriza y se nota en el servicio al cliente, es el trabajo conjunto del área comercial con el área operacional. Hoy en día, todos nuestros clientes tienen un ejecutivo asignado que sigue el proyecto hasta su término y que se preocupa desde reponer un insumo hasta ampliar un contrato si es necesario. Los clientes necesitan el contacto y eso es algo que no queremos perder.

¿Cómo esperan terminar este año?
El principal proyecto que queremos cerrar este año es el de la tienda online y esperamos el 1º de diciembre lanzar la tienda. Además, nos interesa retomar los proyectos del área Educación, apostando a que este sector se va a reactivar con la normalidad que tenía antes, y continuar con el proceso de certificación ISO 9001 que, por el estallido y la pandemia, tuvimos que posponer.

Para 2022, nuestra apuesta es seguir creciendo, ojalá con alguna sucursal comercial en Santiago, y también crecer en cobertura más al Sur y Norte de nuestro país, ya que vemos que hay potencial, un buen recibimiento y muchas oportunidades. En esta misma línea, también nos interesa empezar a trabajar más fuertemente con instituciones privadas y, por último, seguir desarrollando nuestra área computacional, donde nos ha ido bien, para que ojalá abarque más de la torta de la distribución de las unidades de negocio.