A medida que vamos evolucionando como sociedad, las tecnologías se vuelven cada vez más sofisticadas, útiles y necesarias para el día a día de las personas, empresas, compañías y servicios. Una de las claves para que todos los servicios funcionen son los llamados Edge Data Centers (centros de datos de borde). Estos, a diferencia de los Data Centers tradicionales, son recintos más peque- ños localizados en zonas estratégicas de las ciudades, para poder abordar de mejor manera la creciente demanda que tienen. Sin embargo, si bien estos centros de Edge consumen menos energía que sus pares tradicionales, a futuro estos aumentarán considerablemente. Para 2035, estimamos que los centros de datos Edge consumirán 1112 TWh de energía, casi el doble que los centros de datos tradicionales. Eso se debe al crecimiento, pero también al PUE (eficiencia energética) promedio más alto de los centros de datos de Edge en comparación con los centros de datos tradicionales.

Responsables del consumo de energía en toda la huella de TI de la empresa, los CIO deben considerar la implementación de soluciones de vanguardia que consideren la eficiencia y la sostenibilidad desde el principio y los proveedores de soluciones están bien posicionados para ayudar a los CIO a abordar el desafío.

Para ayudar a los CIO a cumplir con ese desafío, consideramos algunos aspectos clave para lograrlo:

• Una estrategia de Edge sostenible comienza con el hardware. Al seleccionar el hardware más eficiente, incluidos las UPS y las unidades de refrigeración, es posible diseñar una solución que contribuya significativamente al concepto de economía circular con productos fabricados a partir de fuentes recicladas y diseñados para ser reciclados al final de su vida útil.

• La infraestructura para Edge también debe estar conectada para permitir el monitoreo y la administración remotos desde una ubicación central. Una plataforma de monitoreo eficaz tiene capacidades como la recopilación y el análisis de datos, inteligencia artificial (IA) para detectar anomalías y problemas, alarmas y la capacidad de solucionar la mayoría de los problemas de forma remota. También agrega previsibilidad, agilizando los ciclos de servicio.

• Los servicios optimizados habilitados para la conectividad son imprescindibles en el Edge. La selección de un modelo de servicio que se traduce en menos viajes que los técnicos deben realizar a los sitios periféricos, especialmente en lugares a los que es difícil llegar, permite ahorrar en combustible y otros gastos de viaje.

• Los ciclos de vida extendidos del producto también minimizan las visitas al sitio. Por ejemplo, las unidades UPS con baterías de iones de litio duran hasta 10 años, lo que significa que los técnicos deberían tener que visitar el sitio solo dos veces: para la instalación y, una década después, para el reemplazo.

• Los proveedores pueden trabajar con los servicios públicos locales en el uso de energía de fuentes sostenibles como la solar para minimizar el impacto del borde en el medio ambiente.


Estos puntos son claves, ya que según IDC, el mercado global de la informá- tica de punta se enfrenta a un crecimiento masivo, creciendo a un 12,5% anual a un estimado de $250,6 mil millones en 2024. En esta materia, Chile tiene una ventaja por sobre otros paí- ses de la Región. Su política de sustentabilidad, entre las que se incluyen el convertirse en un país carbono neutral para el 2050, así como ser conocido como el futuro laboratorio energético del mundo, con varias centrales de energía renovables, varios proyectos a futuro e inversiones fuertes en energías nuevas, como el hidrógeno verde, hacen del país un lugar muy interesante para implementar soluciones en materia de sustentabilidad y que consideramos que son críticas para el futuro de nuestra sociedad y nuestro planeta.

Además, varias empresas como Microsoft están instalando una verdadera “región” de centro de datos en Chile, junto con una iniciativa para estimular la economía digital del país y capacitar a las personas en habilidades digitales. Otras, como Google, usan energías renovables en sus centros de datos en el país, mientras que otras importantes empresas están implementando con fuerza los cables de fibra óptica en la zona Sur, e incluso, el tan ansiado proyecto de cable submarino de fibra óptica que conectará Asia con Sudamérica a través de nuestro país.

También la importancia que le ha dado al país a tecnologías como la red 5G, que debería estar implementada dentro de dos años, y la fuerte supervisión de ciberseguridad, hacen de Chile un país muy atractivo para implementar este tipo de medidas.