Durante la pandemia, el salto que dio la digitalización en todo el mundo fue enorme para todo tipo de empresas y organizaciones. Ya a mediados de 2020, el CEO de Microsoft, Satya Nadella, comentaba que en apenas dos meses fuimos testigos de una Transformación Digital acelerada que -en situaciones normales- habría tomado más de dos años. Y este proceso se vio acompañado de un cambio cultural profundo, que quebró muchas barreras o mitos que existían con relación a la tecnología. Acá nuestro ecosistema de socios ha sido fundamental para acompañar el proceso acelerado de transformación tecnológica.

Es lo que llamamos la revolución de la innovación, una ruptura que llegó a todos los sectores de la Economía de golpe y que nos obligó a cambiar a todos la forma de trabajar, en un principio, para permitir dar continuidad a la operación y entregar servicios durante la pandemia, tanto de forma remota como implementando nuevas medidas para respetar las normas sanitarias y evitar contagios.

Una vez que las organizaciones se adaptaron para seguir trabajando, la continuidad de esta disrupción impulsó un nuevo proceso: seguir innovando para crecer y cambiar la manera de trabajar, la forma de conectar con los clientes, las operaciones o incluso reinventar el negocio, todo potenciado por la tecnología. Es gracias al trabajo con nuestros socios que durante los últimos meses pudimos mantener la continuidad operativa de muchas organizaciones en Chile, un factor clave para desarrollar soluciones pensadas en el regreso a la nueva normalidad y que potencia la innovación de diferentes sectores.

Este proceso de Transformación Digital acelerada se dio tanto en el sector privado como público, y no solo en nuestro país, sino que en todo el mundo. Así como las empresas necesitaron seguir vendiendo durante la pandemia con el apoyo de la tecnología, para los gobiernos, instituciones de educación y de salud fue fundamental poder continuar brindando sus servicios a los ciudadanos. El sector público también se vio obligado a repensar su forma de trabajar y acercarse a los ciudadanos de una manera diferente en un contexto crítico de crisis sanitaria. Estos meses hemos vivido una real revolución innovadora que nos impactó a todos como ciudadanos, y cambió nuestros hábitos para siempre.

Vemos que hoy la recuperación econó- mica -que incluye empleo e inclusiónnecesita ser repensada tanto desde industrias clave como también desde el gobierno y el sector público, analizando juntos cómo potenciarla para generar más oportunidades para todos los chilenos.

Una de las áreas más impactadas durante estos meses fue la salud. La presión de continuar entregando atención médica en tiempos complejos potenció la innovación y el desarrollo tecnológico del sector. Uno de los ejemplos es el reciente anuncio de nuestra alianza con Bupa Chile para impulsar la Transformación Digital del grupo de salud, que tiene como objetivo convertirlos en la primera firma de salud con una plataforma de trabajo completamente en la nube. El uso de datos para mejorar la atención de los pacientes es central en esta nueva era.

La Transformación Digital es uno de sus principales ejes del grupo a nivel global, en el cual la innovación y la vanguardia juegan un rol fundamental respecto del desarrollo de prototipos para mejorar la salud y la detección de enfermedades. En nuestro país esta alianza permitirá, por ejemplo, que el laboratorio ELSA perteneciente al grupo y el más grande de la Región, procese y analice de manera rápida y eficiente, gracias a las capacidades de la nube y la Inteligencia Artificial, más de 10 millones de exámenes que toman al año. Para apoyar de manera eficiente a clientes como Bupa, o cualquier otra organización del sector público -como salud, educación o gobierno-, la labor que realizamos año a año con nuestros partners es fundamental.

En el último año —y especialmente en los últimos meses—, en el marco de un mundo que cambia de manera radical, ha quedado demostrado que nuestros partners poseen un potencial ilimitado y la posibilidad de adaptarse, conectarse, innovar y lograr más; pudimos ver su esfuerzo por adquirir nuevos servicios y formas de trabajar, agregándole valor en estos nuevos tiempos.

Para continuar apoyando la Transformación Digital en todos los sectores, es crucial contar cada vez con más socios especializados, capaces de implementar tecnologías avanzadas como Azure, Servicios Cognitivos, Data o Inteligencia Artificial. Estas herramientas están en continuo crecimiento y evolución, ya que todos los días se desarrollan nuevas funcionalidades y se implementan nuevos usos para aplicarlas. Para que todos nuestros clientes -sean tanto de empresas privadas como del sector pú- blico- puedan aprovechar estas tecnologías, necesitamos partners que sean especialistas en ellas. Así podemos estar preparados para los nuevos desafíos, ponernos en el lugar de nuestros clientes, y realmente ayudarlos a avanzar en su transformación.

Por eso, apoyamos a nuestro ecosistema poniendo a disposición nuestras plataformas, iniciativas y certificaciones avanzadas para que se conviertan en los verdaderos expertos de la industria y sean el motor de cambio que impulsa la transformación digital en nuestra sociedad.

A modo de ejemplo, cuando hablamos de especializaciones vale la pena destacar que contamos con más de 1.134 usuarios en Latam Partner University, quienes tienen acceso a contenidos renovados y a más de 50 entrenamientos para este año fiscal. Además, cuentan con rutas de aprendizaje sobre Inteligencia Artificial, Seguridad de Trabajo Remoto, Aplicaciones de Negocios, Migración de Infraestructura, Teams, Colaboración, entre otros contenidos. Esto les permitirá aprovechar la transformación digital en temas de ventas, seguimiento a clientes, operaciones, negociaciones, rentabilidad, productos, licenciamiento, soluciones y temas técnicos, así como también en escenarios por industria.

Los desafíos de todas las organizaciones han sido enormes y lo siguen siendo, pero lo que ha quedado demostrado es que la tecnología nos hace más resilientes ante las crisis, nos fortalece y nos permite ganar competitividad. Aún quedan muchos aspectos que son necesarios trabajar, que van desde la recuperación económica de todas las industrias y sectores a los desafíos de reentrenar a la fuerza de trabajo para que esta recuperación se dé con inclusión, hasta temas de ciberseguridad, ética y desarrollo sustentable, entre otros.