Ciberseguridad en tiempos de crisis Por Cristián Peña, Analista de Consumo de IDC Chile. Los acontecimientos de estos últimos días en Chile nos han vuelto a plantear la criticidad que tiene la información para una sociedad, y tanto gobierno, organizaciones, empresas y ciudadanos, pueden ser víctimas al perder la capacidad de tener una visión holística de la contingencia. Los canales de información hoy en día han dejado de ser los tradicionales, abriendo paso a plataformas sociales y la capacidad de contar con una gran cantidad de información generada casi en tiempo real por cualquier persona o individuo. Precisamente es en este escenario que la ciberseguridad se vuelve a convertir en un factor de criticidad.
Lo primero que debemos tener en cuenta es que la ciberseguridad es un conjunto de herramientas que contemplan políticas, procedimientos, formación y servicios que pueden emplearse para garantizar la protección de información digital, ya sean datos o incluso activos. Estas herramientas consideran dos factores fundamentales para funcionar: el factor técnico y el humano. Descuidar cualquiera de los dos puede generar vulnerabilidades para las organizaciones. Proteger la información En un entorno hiperconectado, debemos tomar resguardos en todos los niveles en los que interactuamos con la tecnología, para de esta forma ser capaces de generar un incremento en la capacidad de análisis y de juicio en la información que se está consumiendo, puesto que si bien la ciberseguridad se ha planteado como la forma de proteger la información, el fin último de esta protección no es más que mantener la confianza que se tiene respecto de la información que se disponibiliza tanto en organizaciones como en la vida cotidiana.
No cabe duda que la ciberseguridad requiere una agenda sometida a una supervisión constante, con una estrategia totalmente definida y compartida por los cargos de mayor responsabilidad, para tener la capacidad de enfrentar riesgos, aún en tiempos de crisis. Es de vital relevancia no bajar la guardia con información de cuidado que manejan organizaciones estatales, empresas o personas, sobre todo aquellas que son consideradas fuentes oficiales de noticias e informaciones relevantes en estas circunstancias.
Anticiparse y prepararse ante los ataques y mantener una cultura de ciberseguridad, podrá resultar, muchas veces, un tanto lento y difícil, pero al mismo tiempo será más llevadero mientras antes comprendamos que es inevitable y necesario, abordando esta preocupación como un todo y no como medidas atomizadas o solamente reactivas. |