Mejor alcance y cobertura, y capacidad para gestionar más eficientemente una mayor cantidad de dispositivos. Esas son tan solo algunas de las ventajas comparativas que tiene el WiFi 6 respecto de las versiones inalámbricas anteriores. Se trata de la evolución natural que ha tenido a través de los años el 802.11, un grupo de protocolos de comunicación que especifica la forma en que se deben intercomunicar diferentes dispositivos inalámbricos. Pero sus ventajas también pasan por disminuir el consumo de energía y aumentar la velocidad de transmisión, acelerando el desarrollo del Internet de las Cosas.

Es fundamental aclarar de dónde viene su denominación: la WiFi Alliance, organización que certifica los productos que soportan los diversos estándares WiFi, pretende hacer más fácil el reconocimiento de las diferentes tecnologías de conexión inalámbrica. Si en el pasado hablábamos de WiFi N (802.11n) o WiFi AC (802.11ac), ahora el WiFi Alliance habla de WiFi 4 y WiFi 5, respectivamente. A medida de que los números aumentan, se refieren a tecnologías más modernas. Por lo tanto, el WiFi AX (802.11ax) será reconocido como WiFi 6 o, en su defecto, WiFi de 6ª generación.

Esta nueva tecnología surgió de la misma forma que las versiones anteriores: el WiFi Alliance reunió a fabricantes de todo el mundo, quienes en conjunto definieron el estándar. Luego, son los mismos fabricantes quienes desarrollan productos de todo tipo (como routers, smartphones, equipos IoT, etc.) que soportan este estándar, lo que les permite interoperar entre ellos.

El desarrollo del estándar base, el 802.11, tuvo su primera versión en el año 1997. A partir de allí ha tenido varios desarrollos, siendo el más reciente WiFi 6, que fue lanzado en septiembre pasado de manera oficial. Y, aunque este lanzamiento es reciente, ya existen productos que siguen las bases del estándar y esperamos que los primeros routers certificados para usar esta tecnología estén disponibles en Chile para esta Navidad.

La opción de manejar eficientemente una mayor cantidad de dispositivos con anchos de banda superiores a los actuales, junto con un consumo más eficiente de la energía, dan una infinidad de posibilidades.

Las nuevas aplicaciones surgen todos los días, pero es claro que será mucho más fácil conectar múltiples dispositivos de IoT junto con equipos “smart”, como TV, celulares y tablets, todos ellos en un espacio más amplio gracias a la utilización de routers de alto rendimiento. Asimismo, esperamos ver cada vez más dispositivos que nos permitan tener una interacción y contacto con nuestras casas, oficinas y fábricas desde cualquier parte, como nunca antes.

En lo técnico, no se parecen mucho. Aparte de que ambas son tecnologías de comunicación inalámbricas, entre las dos solo existen diferencias: sus tecnologías de acceso, modulación, canalización y su forma de interconexión son diferentes. La razón radica en que WiFi 6 está orientado a comunicaciones de corta distancia, mientras que WiFi de 5ª generación está pensado para conexiones de mayor distancia.

Si tuviéramos que hablar de otro elemento en común, podríamos referirnos al concepto de “acceso”, que agrupa a todos los dispositivos que permiten “entrar” en la red. De allí su importancia, ya que tanto el WiFi 6 como el WiFi 5 vienen a mejorar nuestra capacidad de “acceso” a la red. Las tecnologías anteriores (como WiFi 5 y WiFi 4), podrán comunicarse con WiFi 6, pero solo hasta donde alcancen sus posibilidades, mientras que un equipo WiFi 6 podrá alcanzar su máximo rendimiento solamente al conectarse con otros dispositivos que tengan esta tecnología.

Para finales de este año, esperamos tener en el mercado nacional los primeros productos con WiFi 6, los que serán dispositivos más “de nicho”. De cualquier modo, creemos que a mitad del próximo año, comenzarán a aparecer soluciones que sean de consumo más masivo.