En los últimos meses, la Inteligencia Artificial (IA) se ha convertido en un término familiar en los medios de comunicación. Lejos ha quedado aquella visión que calificaba a esta tecnología como futurista o elitista, pues hoy ya podemos ver sus usos y beneficios de manera tangible y directa, incluso en nuestros smartphones. Este aspecto nos demuestra que la IA no es un concepto más, o una simple “moda”, en la industria de las Tecnologías de la Información y Comunicaciones (TIC), sino que es el eje de nuestro camino al futuro.

Particularmente, en 2019, la IA aparece nuevamente ocupando un lugar central entre las tendencias tecnológicas estraté- gicas en medios, analistas de la industria y consultoras. La razón es clara: este tipo de herramientas es de vital importancia en la era de la automatización y los negocios basados en información. Por ello, no resulta extraño que Gartner vincule a esta tecnología con sus principales tendencias y herramientas relevantes del año.

Según esta firma de análisis de mercado, la primera de las tendencias clave de 2019, serán las “Cosas Autónomas”, en donde se incluye automóviles, drones y robots, entre otros. Todos estos aparatos se masificarán a contar de este año, debido a la consolidación de la IA.

En segundo lugar, se ubica lo que se conoce como “Analítica Aumentada”, es decir, la aplicación de avanzadas herramientas de aprendizaje automático (Machine Learning) que facilitarán la tarea de los científicos de datos (Data Scientists), profesionales encargados de apoyar el análisis de información en las empresas.

Dentro del top ten de Gartner, se encuentra también el desarrollo de aplicaciones impulsado por la IA, tendencia que hará -según la consultora- que en 2022 el 40% de los nuevos proyectos de este ámbito incluya en sus equipos de trabajo a desarrolladores de IA.

Como vemos, las tendencias tecnológicas para este 2019 no se apartan en nada de lo que ha venido configurándose en los últimos años: un conjunto de herramientas que harán que nuestro entorno y negocios estén completamente digitalizados. Esto, que Gartner ha venido denominando “Red Digital Inteligente” (Intelligent Digital Mesh), se refiere a la formación de un verdadero ecosistema digital, en donde conviven diversas tecnologías, servicios, dispositivos, empresas, contenidos y personas que interactúan entre sí, intercambiando datos digitales.

Esta “supertendencia” (es decir, la digitalización de nuestras ciudades, empresas, organizaciones y hogares), tiene como trasfondo un mundo “ciberfísico”, en donde ya no existen barreras entre lo “lógico” y lo “físico” o entre lo humano y las máquinas.

Sin embargo, para que todo esto sea posible, existe un elemento clave y común que hace posible materializar este nuevo mundo: la infraestructura de redes y comunicaciones. En efecto, sin contar con “carreteras digitales” de alta velocidad será imposible impulsar a fondo la digitalización. Por supuesto, estas están basadas en fibras ópticas, para garantizar la velocidad, capacidad de transmisión, y seguridad. Desde otra perspectiva, junto a la IA, los datos de alto volumen (Big Data) y la automatización están hoy consolidándose en todo el planeta, debido al avance paralelo de las autopistas de alta velocidad para transmitir inmensos volúmenes de datos en tiempo real, con baja latencia.

Por ello, 2019 será un año decisivo para el avance de las Redes de Quinta Generación (5G) que, gracias a sus notables capacidades en velocidad, confiabilidad y seguridad, permitirán potenciar y masificar diversas aplicaciones de IA, Realidad Aumentada, Realidad Virtual, vehículos o Cosas Autónomas, Telemedicina o el Video Ultra HD, entre muchos otras.

Si bien no será este el año del lanzamiento comercial de esta tecnología -que promete alcanzar velocidades potenciales de 10 Gigabits por segundo y reducir la latencia a menos de 1 milisegundo- sí será crucial en su desarrollo (así como en la realización de pruebas más avanzadas), por lo que su inminente llegada conllevará también la expansión de diversas soluciones que solo serán posibles con las capacidades que esta tecnología habilita.

Entonces, en este conjunto de tendencias, y como parte de esta autopista de alta velocidad (clave en la infraestructura de la Digitalización y el desarrollo de las llamadas “ciudades inteligentes”), veremos en 2019 nuevamente el auge de la fibra óptica, no solo porque forma parte de las redes 5G, sino también porque mantendrá su expansión en las organizaciones en donde, al ser más económica, durable y con mejor desempeño que el cobre, tiende cada vez más a llegar hasta el “escritorio”.

Esta tendencia también se está replicando fuertemente en el sector residencial, lo que hará que en 2022 la fibra óptica llegue, nada menos, que a mil millones de hogares, según datos de Idate Digiworld.

Algo similar vemos en las fuertes inversiones en cables de fibra óptica interoceánicos, siendo uno de los proyectos más atractivos e importantes para nuestra región el que unirá a Chile con Asia a través del Pacífico, en un recorrido de más de 22 mil kilómetros, cuyos estudios de factibilidad deberían arrojar resultados en algunos meses más.

Como vemos, 2019 será el año de la Inteligencia Artificial, la Automatización y la Digitalización. En cada avance de estas herramientas, veremos refrendada la evolución e importancia de la infraestructura de comunicaciones que las materializan y masifican.

Por eso, si hablamos de 2019 como el año de la IA, debemos tener siempre presente las autopistas digitales como “el” elemento estratégico indispensable a pensar y desarrollar con visión de corto, mediano y largo plazo. Y de eso debemos tomar nota en nuestros hogares, empresas y, por cierto, en nuestras ciudades y países, porque en un mundo digitalizado y ciberfísico, al igual que acontece con nuestro propio cerebro, las redes neuronales son más importantes que las propias neuronas por sí mismas, y determinantes para nuestra inteligencia.