De acuerdo con el reporte “Tech Buying Trends Among Small- and Medium-sized Businesses” (Tendencias de compra de tecnología entre empresas pequeñas y medianas) de CompTIA, la tecnología es un conductor primario que ayuda a las empresas pequeñas y medianas (Pymes) de EE.UU. a alcanzar sus metas.

“Ya sea para adquirir nuevos clientes, utilizar una nueva estrategia de marketing, lanzar nuevos productos u optimizar operaciones y procesos, la tecnología está en el corazón de estas actividades”, comentó Carolyn April, Directora Senior de Análisis de la Industria de CompTIA. “Muchos pequeños negocios están en el camino hacia la digitalización de sus entornos, utilizando soluciones y servicios basados en la nube y lanzándose cada vez más hacia el análisis de datos para conocer la demanda del cliente”.

Casi dos tercios (64%) de las Pymes encuestadas indican que la tecnología es un factor primario para perseguir sus objetivos de negocio. Las organizaciones medianas colocan el mayor peso en la tecnología como una herramienta estratégica, con el 73% caracterizándola como el factor primario para alcanzar sus objetivos totales. Aun entre compa- ñías con menos de 20 empleados, el 56% cita a la tecnología como un factor primario para alcanzar objetivos.

Pero el camino hacia la digitalización puede ser todavía una batalla difícil, hasta para las empresas más experimentadas en tecnología. En el año 2016, una encuesta de CompTIA sobre el mercado Pyme estadounidense encontró que el 23% de las empresas fueron reportadas como sobresalientes en visión y estrategia tecnológica. Ese número cayó a un 18% en la última encuesta. Las Pymes también reportan leves descensos en el dominio sobre la ejecución y administración de la tecnología actual.

“No es que estas empresas se hayan vuelto menos enfocadas o capaces en tecnología. El simple número y los tipos de soluciones han crecido a tal tamaño y complejidad que muchas compañías están tomando dos pasos hacia adelante y uno hacia atrás al tiempo que navegan en estas nuevas curvas de aprendizaje”, explicó la ejecutiva.

Los gastos en productos y servicios de tecnología van generalmente del rango de menos de US$5.000 anuales para la Pyme más pequeña, a US$249.000 por año para las empresas medianas. Un punto medio para el ecosistema total de Pymes estadounidenses está entre US$10.000 y US$49.000 de gasto por año. No obstante, casi 4 de 10 encuestados en el estudio de CompTIA describen la asignación del presupuesto de su compañía a gastos de tecnología como “muy bajo”.

Cuando hablamos de sus adquisiciones, el 36% de las Pymes mencionó que sus compras en los últimos dos años se han enfocado en infraestructura central: laptops, computadoras, teléfonos móviles, servidores y equipos de conectividad. El 31% ha hecho compras industriales o de un sector específico, tales como aplicaciones de facturación para prácticas legales o software de récords médicos electrónicos para la oficina de un doctor.

Al preguntarles lo que harían con una ganancia inesperada, el 30% de las Pymes comenta que invertirían en tecnología “innovadora”; el 23% mejoraría las computadoras y teléfonos móviles del personal; y el 20% mejoraría los sitios web, las aplicaciones e-commerce y las aplicaciones móviles.

Cuando se trata de tecnologías emergentes, el 53% de las Pymes menciona que esta amplia categoría representa una oportunidad positiva para innovar, beneficiarse y mejorar la productividad. Un cuarto de los encuestados dice que es muy pronto para hablar sobre el impacto de estas en su negocio. El 10% no está a favor de las tecnologías emergentes, citando el alto costo de entrada de muchas de estas soluciones y el riesgo potencial en la seguridad del trabajo inherente a la automatización.