La industria Audiovisual Profesional mueve miles de millones de dólares a nivel mundial, y está compuesta por fabricantes, distribuidores, integradores y programadores. Si bien Chile es uno de los países más desarrollados a nivel regional en la materia, aún le falta por crecer y consolidarse.

A continuación, se muestran las principales verticales de esta industria:

• Cartelería Digital o Digital Signage: Esta es la de mayor crecimiento en nuestro país, cuyas pantallas podemos encontrar en aeropuertos, metros y centros comerciales.

• Hospitality: Orientado principalmente a habitaciones de hoteles y clínicas.

• Salas de Control: Corresponde a salas de monitoreo, por ejemplo, cámaras de tránsito en una comuna o la ubicación de una flota de vehículos en tiempo real.

• OOH (Out of Home): Aquí se ubican los letreros LED o monitores de exterior que se encuentran en los techos de los edificios, en paraderos y carreteras.

• Salas de Reunión: Para llevar a cabo videoconferencias, agendar salas en forma remota o automatizar ciertos escenarios, dependiendo de la reunión que se quiera concretar.

• Eventos: Orientado a productoras, hoteles y centros de eventos.

• Home Cinema: Para habilitar un salón del hogar como cine, ya que los precios de las pantallas y de todos los accesorios relacionados hoy son mucho más accesibles.

Como se mencionó anteriormente, la cartelería digital es la vertical con mayor crecimiento, mientras que la de salas de control cuenta con más espacios para crecer en el corto plazo. Esto se debe a la necesidad de manejar y supervisar, no solo una gran cantidad de cámaras de seguridad (lo que es su principal objetivo), sino de monitorear en tiempo real flotas de vehículos, como, por ejemplo, los buses del Transantiago. También, para supervisar el estado de las distintas faenas en una minera, o de los servidores en un banco.

Hoy, el precio del hardware ha bajado considerablemente y hay muchas soluciones estables, fáciles de usar y de implementar. Por otro lado, el uso de letreros con imágenes fijas debe tender a cero, ya que el reemplazo por una pantalla permite, entre otras ventajas, difundir más de un mensaje, con una mejor calidad y de manera más atractiva para el receptor. En este sentido, en los últimos años hemos sido testigos de la gran penetración que han tenido los monitores en los restaurantes de comida rápida, para anunciar su menú y las promociones del día. Esto, sin duda, genera un uso más eficiente del espacio, transmitiendo más de un mensaje a los clientes.

También se han incorporado pantallas LED y videowalls de interior, para abarcar grandes muros o pilares en las multitiendas.

Si hay un actor fundamental en esta industria, es el canal de integración. Son ellos los que se relacionan con los clientes finales y los que tienen las mayores oportunidades para desarrollar negocios. Por ello, es importante que constantemente estén informándose sobre las nuevas tendencias, que tomen una posición proactiva y que generen la necesidad en sus clientes. En este sentido, es vital que capaciten, entrenen y certifiquen a sus colaboradores, a fin de que brinden un servicio de primer nivel.

Está claro que invertir en esto va a dejar satisfechos a los clientes finales, ya que se van a reducir las horas hombre de los proyectos, mediante una operación más eficiente que les permitirá, a su vez, ser más competitivos a la hora de presentarse a una licitación.

Según AVIXA (Audiovisual and Integrated Experience Association), en 2018 la venta a nivel mundial de esta industria fue del orden de los US$186 mil millones y se espera que para 2023 llegue a los US$230 mil millones. Esto significa que en países donde la industria es menos desarrollada, como Chile, se podrá incrementar en un 50% en los próximos cinco años, lo que sin duda se posiciona como una gran oportunidad.