Sergio Rademacher.

Cuando Microsoft partió, en 1975, ¿qué estabas haciendo tú?
Probablemente estaba desarmando juguetes. Cuando era niño me encantaba ver cómo eran por dentro. Ahora pienso que la ingeniería se dio en mí de manera bastante natural, porque siempre me gustó entender el funcionamiento de las cosas. A los 10 años ya estaba programando en Basic, en 1984, y de ahí en adelante siempre estuve ligado a la tecnología.

¿Pensaste llegar a esta compañía?
Microsoft siempre ha sido un referente, por lo tanto, la respuesta es sí. El tema era cuándo. Esta es una tremenda compañía, que ha generado un impacto gigantesco en el mundo, y que hoy llega a todo tipo de personas y organizaciones, y la oportunidad se dio ahora. Fui completamente seducido por la transformación que está viviendo Microsoft; que comenzó hace tres años con la llegada del nuevo CEO y que llevó a esta compañía a ser más abierta, a liderar los cambios y la revolución de cloud; y me hizo mucho sentido. Microsoft siempre me atrajo por el impacto que ha generado en la sociedad. Hace 40 años sus fundadores decían “queremos que haya un computador en cada escritorio y en cada casa”, y prácticamente así fue. La transformación se intensificó con la llegada de Internet, los servidores y los videojuegos, hasta tocar a casi todas las personas del planeta.

¿Qué significa liderar en Chile una de las empresas más importantes del mundo y un ícono en la industria TI?
Una tremenda emoción y alegría, y también una gran responsabilidad: la de transformar la manera en que las personas logran sus objetivos y, como dice nuestra misión, de empoderar a cada persona y organización a ser más. Eso es algo con lo que vibramos. Estamos obsesionados por que nuestros clientes sean exitosos. Queremos que brillen en lo que hacen, no solo que estén satisfechos con nuestro servicio.

¿Diría que la evolución de Microsoft ha sido natural o radical?
Es natural y radical al mismo tiempo. Microsoft se ha reinventado de manera sorprenderte. Estar presente 40 años en una industria que avanza tan rápido no es fácil. El mundo está lleno de compañías que partieron desarrollando una tecnología y desaparecieron porque no fueron capaces de adaptarse a los cambios, mientras que Microsoft literalmente creó el mercado de los PCs con un sistema operativo más amigable, comenzando con DOS, luego Windows en sus distintas versiones, y continuó con sistemas de correo y mensajería.

Esta es una compañía que permanentemente se reinventa, de manera orgánica e inorgánica. Orgánica en el sentido de evolucionar escuchando a los clientes, y, en base a lo que ellos necesitan modificar, sus productos y servicios; e inorgánica porque hemos apostado y hecho fuertes inversiones en tendencias, como la cuarta revolución industrial. Un ejemplo de eso es que hoy tenemos laboratorios con 8 mil investigadores trabajando en Inteligencia Artificial, IA; una apuesta inorgánica porque IA está partiendo y queremos liderarla.

¿Cuáles han sido los grandes cambios en la estrategia de la compañía?
El foco en cloud. Microsoft venía desarrollando hace cerca de 10 años el cloud con Azure, pero sin duda con la llegada de Satya (Nadella), el cambio fue radical. Nos dimos cuenta de que el mundo sería “cloud first, mobile first”; un modelo 100% cloud y 100% vía teléfonos móviles, y así ha sido.

Con la cuarta revolución industrial nos encontramos frente a otro paradigma: el cloud inteligente y los dispositivos inteligentes, que generan grandes volúmenes de información y le confieren a la IA una fuerza potente. Esto empalma con la Transformación Digital, TD; y si queremos ayudar a que las personas y organizaciones sean capaces de lograr más cosas, debemos ser un actor clave. En Microsoft entendemos la TD en cuatro dimensiones: empoderar a los colaboradores de las empresas, lograr un mayor nivel de compromiso con los clientes, optimizar las operaciones y transformar los productos. Empleado, Cliente, Operaciones y Producto; eso es para nosotros TD.

¿Esto abre nuevas oportunidades de crecimiento al canal?
Absolutamente. Hay un tremendo potencial y un gran mercado, lleno de compañías que requieren ayuda para hacer el cambio. Nosotros somos proveedores de tecnología, pero el canal es quien está cerca del cliente; tiene su confianza, lo conoce y puede acompa- ñarlo en su proceso de TD utilizando nuestra presencia local y nuestra escala global.

Este 2017, ¿dónde estuvieron los principales focos de negocio?
En cloud. Estamos cerca de cruzar el umbral de que más del 50% de nuestros ingresos provengan de cloud, lo que es emocionante porque hace algunos años era una parte muy pequeña de nuestros ingresos. Es una transformación radical. Adicionalmente, el foco también está en IA, porque el impacto de la cuarta revolución industrial será increíble y tenemos que desarrollar tecnologías que permitan adoptarla de manera fácil, rápida y accesible, para que no solo las grandes compa- ñías puedan usar esta tecnología, sino también las pequeñas, y por otro lado, ayudar a las personas a que se preparen. Trabajamos con universidades y ONGs para reconvertir profesionales y formarlos.

   ¿Cómo proyectan el desarrollo de Microsoft en 2018?
Creemos que será sensacional. Estamos teniendo un crecimiento tremendo; en algunas áreas a triple dígito.

¿Qué importancia tiene el canal en esas proyecciones?
El canal es una parte integral de nuestra estrategia. Nuestro éxito es también el de nuestro ecosistema de distribuidores, canales, desarrolladores de software, integradores, prestadores de servicios y todos nuestros socios de negocios. Las proyecciones son tremendamente optimistas para Microsoft, y eso es válido para todos nuestros socios de negocios.

¿Qué rol debe jugar el canal para seguir desarrollando su negocio con Microsoft?
La invitación es a probar nuevos modelos de negocios y tecnologías. Uno escucha sobre IA y cree que va a tomar un buen tiempo hasta que se implemente en Chile, pero la realidad es que hay una gran demanda en torno a ella. El llamado es a atreverse a probar nuevas tecnologías, a crecer y a salir fuera del mercado chileno. Como Microsoft tenemos un rol importante articulando nuestra red global en 140 países, por lo tanto, invitamos a nuestros socios a desarrollar una nueva oferta, profundizando en las distintas verticales de la industria y mirando más allá de las fronteras.