Las necesidades de almacenamiento de información de las empresas han cambiado. Los requerimientos son mayores que antes, porque hoy el universo de datos digitales es más grande, los procesos en las empresas se han automatizado, los usuarios cuentan con mejores servicios móviles y las empresas han adoptado más tecnología.
Así lo indica Matías Fuentes, Analista Senior de IDC Chile, quien además señala que los datos hoy son variados.
Según María José Laverde, LAS Storage Sales de Lenovo, la cantidad de información que deben almacenar las empresas crece exponencialmente todos los días, debido a varios factores, como la generación de nuevas aplicaciones de negocio, la necesidad de integración entre las aplicaciones existentes, la tendencia hacia los nuevos requerimientos de información basados en analíticos y, sobre todo, el crecimiento en los datos no estructurados que provienen de necesidades de marketing basadas en herramientas de experiencia de clientes, redes sociales, streaming, etc.
Lo que necesitan las empresas
Para Jaime Matus, MCO District Manager de NetApp, la proliferación de tendencias como IoT (Internet de las cosas), la masificación de información no estructurada, evolución de modelos de negocio que buscan individualizar la experiencia del cliente (georeferenciación, ofertas personalizadas según hábitos de consumo, etc.), están trayendo no tanto un cambio en las necesidades de almacenamiento, sino una exigencia mayor en la infraestructura de almacenamiento que las empresas deben tener: muchísima mayor capacidad de almacenamiento disponible en forma casi instantánea, mejores tiempos de respuesta, disponibilidad y control de la información, capacidad de gestionar, analizar y disponer de muchísima más información, todo en menos tiempo, y a costos de operación decrecientes. “Todo lo anterior, claramente es un cambio importante que los ejecutivos de TI deben saber gestionar”, afirma.
Cada vez más, según Michell White, Sales Specialist, de HPE en Ingram Micro, las decisiones de adquisición o renovación tecnológica se están basando en decisiones del negocio, por lo que las áreas de TI en general, y las tecnologías de almacenamiento en particular, deben ser capaces de entender y adaptarse a estas necesidades y cómo impactan el día a día de las empresas. “Es por esto que las plataformas de almacenamiento deben sumar la capacidad de ajustarse al día a día del negocio; en otras palabras, ser capaces de responder a las necesidades de áreas que estén orientadas hacia las ventas y operaciones, las que requieren sistemas flexibles, adaptables y con una velocidad de ejecución adecuada, transformando estas tecnologías en un agente más de los procesos de negocio”.
En opinión de Francisco Silva, Gerente de Territorio Chile-Perú de Kingston Technology, el cambio ha ido a la par del el desarrollo del mercado de virtualización, Big Data y soporte a la nube (incluidas las redes sociales) y la continuidad operativa. “Es decir, se necesita cada vez más performance, capacidad, y el soporte debe ser constante. 24x7 es el estándar desde hace años. Todo esto ha generado productos más eficientes en cuanto al costo por GB, como en el caso de los discos duros tradicionales, así como en el desarrollo de soluciones de alto rendimiento y bajo consumo de energía. Ambos van a convivir por un tiempo y en la medida que los SSD se van haciendo más confiables y baratos, tomarán más participación en las ventas”.
En busca de la mejor tecnología
Lo tradicional convive con lo nuevo en cuanto a la tecnología que sustenta las soluciones de almacenamiento de información. Todo depende de qué se quiere almacenar. Según Michell White, actualmente en Chile se utilizan variadas tecnologías de almacenamiento, como por ejemplo discos duros tradicionales y discos de estado sólido implementados en arreglos de discos de distintos niveles de rendimiento, capacidades y disponibilidad. Para accederlos, hay variados métodos; por ejemplo, protocolo Fibre Channel, iSCSI, FCoE, NFS, CIFS.
Respecto de la eficiencia, el ejecutivo de IHPE en Ingram Micro señala que las tecnologías actuales ofrecen un amplio rango de soluciones. Indica que para seleccionar la solución ideal hay pequeñas reglas que deberían seguirse como lineamientos básicos. Por ejemplo, si el costo es lo importante, se puede comenzar con soluciones NAS y de ahí escalar a soluciones iSCSI a 1Gbps y 10Gbps, para pasar a soluciones FC de 8Gbps y 16Gbps; cada una de las cuales van aumentando en performance.
Para soluciones de respaldo, explica, se pueden utilizar discos Nearline de Alta capacidad. Para aplicaciones que requieren capacidad, en conjunto con rendimiento, se puede escalar desde discos SATA, SAS de 10k y SAS de 15k. “Cuando la preocupación es solo performance, se puede pensar en Discos de Estado Sólido (SSD por sus siglas en inglés).
No se puede dejar de mencionar que una buena alternativa son los sistemas híbridos que mezclan discos SAS con Discos de Estado Sólido, para armonizar espacio y rendimiento”, detalla.
Definitivamente, como explica Daniel Sanclemente, Sales Manager Chile / Bolivia de SanDisk, cada usuario tiene necesidades de almacenamiento diferentes. “Y si alguien está buscando dar nueva vida a su computador, alcanzando hasta 20 veces más velocidad que un Disco Duro tradicional, un SSD es una de las mejores opciones. Ya sea por SSD internos, para mejor el desempeño de su computador; o con SSD externos, para usuarios móviles”, asegura.
Francisco Silva indica que los sistemas HDD y los SSD son los más ocupados, siendo el SSD el que viene creciendo de manera importante en los últimos dos años. De acuerdo a la opinión de Jaime Matus, hay cuatro pilares sobre los que las tecnologías de almacenamiento se sostienen y consumen: Nube híbrida (que permite una flexibilidad enorme al momento de disponer almacenamiento en forma “elástica”), soluciones convergentes, soluciones flash e infraestructura (y almacenamiento) definida por software. “Ciertamente, no todas son aplicables a cada necesidad de negocio. Aspectos como protección de la inversión actual, compatibilidad con infraestructura existente, restricciones presupuestarias, aspectos regulatorios y de gobernancia sobre la información clave, etc. condicionan la incorporación de algunas de estas soluciones”, afirma.
El factor virtualización y nube
Virtualización y nube son dos de los grandes drivers en necesidades de almacenamiento. “El mundo virtual ha potenciado el negocio del alto rendimiento, porque los equipos deben ser más potentes, pero idealmente deben consumir menos energía. En eso los SSD y también las memorias RAM han jugado un papel importante. La nube tiene el factor de crecimiento exponencial si consideramos dentro de esta a las RRSS, las cuales han generado una necesidad de espacio nunca antes vista. Pero conforme van mejorando los medios de acceso, como las redes de celulares (4G), los proveedores se ven enfrentados una vez más a la necesidad de dar más ancho de banda, y nuevamente regresamos a los sistemas donde corren bases de datos sobre memoria RAM o sobre SSD pare evitar cuellos de botella”, afirma el ejecutivo de Kingston.
Para Jaime Matus, la virtualización y la nube están estrechamente ligadas a la madurez en la evolución de la infraestructura. La idea de nube privada o pública, por ejemplo, lleva años en el mercado (con nombres como hosting administrado o externalización de data centers). “Sin embargo, la disponibilidad de una visión -como data fabric- donde efectivamente es posible mantener el control, flexibilidad y movilidad de la información de los clientes, aprovechando lo mejor de los clouds públicos y haciendo más eficiente el uso de la infraestructura propia, han permitido que las empresas incorporen estas propuestas en sus procesos de evaluación de mejoramiento de sus data centers (y sus arquitecturas de almacenamiento)”, recalca.
Asimismo, el ejecutivo de NetApp señala que conceptos como el almacenamiento de objetos, QoS y desacoplamiento entre el compromiso que siempre existió entre capacidad y performance del almacenamiento (gracias a las tecnologías Flash) permiten hacer realidad la idea de virtualizar no solo los servidores o la capa de redes (con arquitecturas como NFV), sino también la capa de almacenamiento, lo que también trae cambios en cómo se consumen las soluciones de storage.
ALMACENAMIENTO DE DATOS ¿Por qué es una buena oportunidad de desarrollo de negocios para el canal?
1 Porque generalmente el storage es bastante técnico y crítico en las organizaciones. Debe abordarse a través de canales especialistas, que puedan brindar mejores prácticas en cuanto al tratamiento de esta información.
2 Es un negocio que está evolucionando de manera importante. En términos de márgenes, es apreciable el espacio que hay en este nicho, pero al mismo tiempo el desafío de sumarlo a soluciones que consideren servicios asociados en consultoría o post venta es una oportunidad que el canal no debe dejar pasar.
3 La incorporación de todas estas tecnologías y visiones en la gestión de información requieren servicios y conocimiento más específicos no solo de las nuevas tecnologías, sino en cómo estas se incorporan en lo que actualmente poseen los clientes. Y este es un tremendo espacio de oportunidad para los canales.
4 Actualmente, las compañías deben manejar innumerables datos de clientes, lo que permite al canal acercarse al core del negocio de cada uno de sus clientes y estimular a sus decision makers, para que se interesen en discutir el ámbito de la información en sus empresas y su impacto en el negocio, transformándose así en Trust Advisors que ayuden a generar oportunidades de negocios que, de otra forma, no saldrían del ámbito de las áreas TI.
