Jorge von Bischhoffshausen M.

Grandes fotos, gráficas, mapas y planos arquitectónicos necesitan impresoras que soporten un formato más grande, pero en la práctica, la externalización de estos trabajos puede ser costosa y es posible que no se logre un producto terminado con la calidad adecuada. Por eso, y para cubrir todas esas necesidades, las marcas se han adaptado, ampliando sus portafolios con productos de alta calidad y precios competitivos, ajustándose además para cumplir con lo que el cliente requiere, principalmente productividad del dispositivo, calidad de la imagen y menores costos de impresión, aspectos que marcarán la diferencia en los trabajos de estas industrias.

Si bien se estima que el crecimiento del mercado de ingeniería no será muy alto este año, puesto que está ligado a la construcción y minería -rubros que se han inclinado a la baja el último tiempo- en este mercado contamos con equipos mono y multifuncionales, con tecnología de tinta, que permiten imprimir monocromático y a color de alta calidad.

La variedad de las necesidades que cubren estos equipos ha hecho que existan diversos tipos de dispositivos de los que los distribuidores han debido aprender también, adentrándose en un desafío importante a la hora de enumerar características para convencer al cliente, ya que hoy se pueden encontrar impresoras de formato ancho de diversos tipos, por ejemplo, a base de tinta en distintos tamaños (de 17 a 44 pulgadas) con cinco colores (cian, magenta, amarillo, negro y negro mate), y que permiten imprimir en calidad fotográfica, detallando líneas y colores, con cabezales de incluso 15.360 boquillas, lo que se traduce en una mayor velocidad de impresión y mejor distribución de colores. También existen dispositivos con impresión continua, que permiten cambiar los tanques de tinta mientras la impresora está trabajando. De esta forma, se evita interrumpir el trabajo de impresión.

Al igual que el mercado de ingeniería, en el área de plotters para gráficas sucede lo mismo. Su crecimiento no será de los más altos ya que está ligado al retail, el cual ha moderado su desarrollo con respecto a los años anteriores. Para este caso, es recomendable apuntar a negocios que están creciendo como el de fotografía y cartelería, puesto que contamos con equipos específicos para ellos, los que entregan mejor calidad y bajos costos de impresión.

En esta área se pueden encontrar equipos de 12, 8 y 6 colores, que abarcan los negocios de arte, fotografía, prueba de color y producción de cartelería. Estos equipos poseen un mayor número de colores, cuya combinación permite lograr mejor claridad de las imágenes, evitando así también los reflejos de luz sobre las imágenes. Además, las tintas tienen un polímero de adhesión que evita que la imagen se deteriore.

Impresora Canon iPF780, de 36 pulgadas y alta velocidad,
ideal los mercados de CAD/GIS y cartelería.

Más allá de las especificaciones particulares, las impresoras de gran formato son por definición dispositivos profesionales que permiten imprimir gran cantidad de metros cuadrados en poco tiempo; utilizan tinta especializada para crear una imagen nítida y pueden trabajar con una variedad de tipos de sustratos. Por ello, los equipos deben ser eficientes, imprimir a una alta calidad y con líneas extrafinas. Su rendimiento general es una de las cosas más importantes a tener en cuenta al elegir este tipo de dispositivos.

Es justamente esta definición, que las orienta hacia las necesidades específicas de un público conocedor y que tiene absoluta claridad de lo que requiere de una impresora de este tipo, lo que constituye el principal desafío tanto para los fabricantes como para el canal de distribución. Y es que este nicho debe ser atendido con total conocimiento, tanto respecto a su trabajo, que delimita sus propias necesidades de impresión, como de la oferta disponible para cubrirlas.

Las marcas, entonces, debemos apoyar bastante a los canales de distribución en cuanto a capacitaciones y demostraciones de las impresoras, cuyas tecnologías van cambiando de acuerdo a las necesidades, destacando las distintas características del equipo para que el cliente pueda evaluar las alternativas en relación a la calidad, la productividad, el precio de los equipos y sus necesidades específicas. Esta es una preocupación constante, que requiere entrenamientos permanentes, además de actividades dirigidas al canal, para que conozca y pruebe los equipos que especializados en esta área.