Valga la siguiente analogía para denotar la importancia que sigue teniendo el desktop en el mundo empresarial. Una vez que apareció el formato disco compacto en la industria discográfica a mediados de la década de los ‘80, se pensó que la fabricación del soporte en vinilo bajaría sus cortinas. Pero esto nunca ocurrió. Asimismo, se piensa que el computador personal diseñado para empresas va a desaparecer como categoría del mercado por la incorporación de los formatos móviles.
Un rol insustituible
Las cifras aportadas por Gartner hablan de dos fenómenos que están afectando al computador de escritorio a nivel global. De acuerdo a un estudio realizado en 2013 por esta consultora, la comercialización de PCs alcanzó a 80,3 millones, lo que significó la caída de las ventas a su nivel más bajo desde 2008. Sin duda que la adopción natural de computadores móviles ha sido la razón de esta merma en la participación de mercado del computador de escritorio. “Lo que está sucediendo es que se está transformando una parte de esa categoría de escritorio a móvil, lo que no es para nada negativo”, explica Cristian Peña, Analista de Consumo de IDC Chile.
Cristian Peña, IDC Chile.
Juan Carlos Barroux, Consultor en TI.
Esta dinámica global del mercado de computadores no debiera extrapolarse al mundo del computador personal comercial. “Por un momento, se pensó que el notebook reemplazaría totalmente al desktop y eso no va a suceder. En el segmento corporativo, los tomadores de decisión entienden que hay muchas posiciones críticas dentro de una empresa que no necesitan movilidad y que sí requieren estaciones de trabajo de alto rendimiento”, sostiene Peña.
Desde una visión de industria, el mercado del escritorio personal diseñado para la empresa ha convivido con la diversificación de las plataformas tecnológicas, fenómeno para el cual no fue pensado y que muchas veces tiende a desdibujar la verdadera función que cumple un PC dentro de la arquitectura empresarial.
Con la explosión y masificación de Internet aparecen nuevos canales de comunicación asociados a los datos, nuevas plataformas tecnológicas y , consigo, una serie de ofertas de tipos de computadores. “Pero, en definitiva, estamos hablando de los mismos factores de forma de un computador de escritorio empresarial, solo que han reorientado sus propósitos”, aclara Christian Lazcano, Docente Adjunto y Coordinador del Centro de Innovación y Transferencia Tecnológica de la Escuela de Informática y Telecomunicaciones de Duoc Sede Plaza Oeste.
Para el docente de Duoc, esta diversificación de dispositivos se ha prestado para malos entendidos. “Con el desarrollo de los modelos multiplataforma que llegaron hasta la tablet, se creó en cierto modo un equipo autónomo y flexible que en apariencia absorbió las necesidades del mundo empresarial, y que habría relegado la importancia del computador personal en el contexto empresa. Lo que no es así”, enfatiza Lazcano.
Para Juan Carlos Barroux, Consultor en Arquitectura, Valor, Productos e Innovación en TI, la elección del dispositivo está en directa relación con los procesos que internamente una organización defina como las operaciones que dan vida al negocio. “El PC fue concebido como una isla monolítica, un computador completo y autónomo, desconectado del mundo de la Internet, tal como lo hace un mainframe. Los dispositivos móviles, en cambio, fueron diseñados para conectarse a servicios anclados a la Nube; ellos asumen sus operaciones en un mundo hiperconectado; los computadores personales no necesariamente y no dejan de operar si se bajan de Internet”.
Como señala Lazcano, lo que zanja esta mal entendida paradoja entre dispositivos es el concepto de productividad. “Lo que habilita la permanencia del desktop en este mundo hiperconectado son el software de productividad, la estabilidad de la conectividad, más las prestaciones del equipo y el soporte que pueda entregar el fabricante. Factores que no es capaz de absorber un dispositivo móvil diseñado exclusivamente para consumir servicios”, explica. “Hoy las arquitecturas empresariales hacen un mix entre modelos de servicios orientados a clientes, que son básicamente soportados por dispositivos móviles anclados a la Nube y en donde el procesamiento de datos se da en esta instancia; y está aquel modelo monolítico que soporta todo el proceso crítico de procesamiento de información en grandes volúmenes y que requiere estar centralizado, y que es heredero conceptual de los Macro y Mini Computadores aparecidos en la década de los ‘80”, señala Barroux.
“Las estaciones desktop Enterprise sirven para administrar las aplicaciones y generar todos los datos e información posibles que los distintos procesos requieran para su toma de decisión; distinto, en los sistemas smart que tiene más bien un carácter de generar servicios de consulta y de reporte”, enfatiza.
Escenario futuro
La gran noticia es que el mercado de desktop comerciales tiene aún larga vida. “La disminución en las ventas del desktop, tanto para el segmento hogar y empresa, es una constante en el tiempo. Sin embargo, los PC comerciales tienen una tendencia a que esa contracción sea menor. Sin ir más lejos, esta baja impacta más a todo el mercado de la computación que al desktop específicamente y esto tiene que ver más con la coyuntura macroeconómica que a una contracción natural de la categoría desktop”, explica el analista de IDC Chile.
La proyección del consumo de computadores personales comerciales en el mercado chileno es bastante auspiciosa. Si bien la tendencia marcará siempre un declive en los niveles de venta, el porcentaje de contracción de aquí a los próximos cinco años será del orden del uno por ciento.
Sobre la pregunta si el desktop va a desaparecer, Peña señala que al menos con los factores con que se analiza su comportamiento, no hay motivos para que las empresas dejen de comprar este equipo. “Sí vamos a ver la evolución de algunos factores, por ejemplo, que algunas organizaciones incorporen a sus procesos de negocios aplicaciones basadas en la movilidad, lo que podría redefinir la forma de trabajo de las empresas y llegar a prescindir de una gran infraestructura en términos de licencia, sistemas operativos, entre otros requisitos técnicos. Pero, en lo medular, hablando más allá del horizonte de cinco años, el desktop como tal podría cambiar en algunos factores, pero seguirá siendo el computador personal para lo que fue diseñado.
Respecto a esta evolución natural, Jaime Soto, Past President y Director Invitado de ACTI, cree que el desktop seguirá su curva de adaptación a las nuevas tendencias que imponen los dispositivos para el mundo usuario final, pero lo hará bajo los requerimientos que cada vertical vaya exigiendo. “Es innegable que el mercado del PC va a la baja, pero también veo que los fabricantes están generando soluciones adaptadas a los requerimientos de ciertos nichos de mercado, donde el Cloud Computing, el Mobility, el Big Data y el Social Media son modelos y paradigmas que dan sustento a sus estrategias de TI. En este contexto, el PC es y será una factor relevante en la toma de decisión, porque se necesitará de mayores capacidades de cómputo y rendimiento para acceder a interfaces gráficas más ricas y más complejas”, concluye.
De acuerdo a cifras aportadas por IDC Chile, la disminución en las ventas del desktop, tanto para el segmento
hogar y empresa, es una constante en el tiempo. Sin embargo, los PC comerciales tienen una
tendencia a que esa contracción sea menor.