INFRAESTRUCTURA PARA DATACENTER Un mercado en franco crecimiento | | | | De acuerdo a los resultados del "IDC datacenter Services Market Chile 2013", el mercado de servicios de datacenter, que considera a los proveedores con infraestructura propia, alcanzará los US$821,6 millones en 2017, con una tasa de crecimiento anual compuesto (o CAGR, por sus siglas en inglés) en el período 2013-2017 de 18,9%. Estas cifras solo vienen a reafirmar el importante aumento que ha tenido este segmento de negocios en el último tiempo, apoyado principalmente en la mayor oferta de servicios basados en la nube, así como en un aumento de las propias necesidades de almacenamiento y cómputo. Al respecto, Marcelo Leiva, Analista Senior de Software en IDC Latinoamérica, explica que, durante muchos años, los servicios de Hosting de Aplicaciones, Servicios de almacenamiento externo en disco y Servicios Profesionales que incluyen la administración funcional del aplicativo, han liderado este mercado. "Ahora bien, la madurez de los servicios y la experiencia adquirida por los proveedores ha posicionado a los servicios basados en Cloud (LaaS, SaaS y PaaS) como uno de los servicios con mayor demanda entre los clientes de los centros de datos y mejores perspectivas de crecimiento", agrega. Según el analista, otro de los servicios que ha experimentado un notable crecimiento es el de servicios profesionales, que consideran la administración de un sistema de nube privada en las dependencias del proveedor, pero que la infraestructura sea de propiedad del cliente final. Por su parte, Leonardo Miranda, Director Comercial de AKTIO-Chile, señala que parte de este crecimiento se explica por la digitalización de múltiples procesos y nuevos servicios de información que requieren centros de cómputos para alojar servidores desde donde se prestan dichos servicios. "Asimismo, hay un crecimiento de los datos que las empresas deben mantener almacenados y respaldados, como por ejemplo, e-mails y datos no estructurados (video, documentos)", añade. Para el ejecutivo, otro driver de este crecimiento es la externalización de servicios de plataforma. "Muchas organizaciones están prefiriendo trasladar sus servidores desde sus instalaciones propias a datacenters certificados y seguros, entregando a especialistas el cuidado de la infraestructura física", acota. ¿Quién quiere un datacenter? Por lo general, se trata de compañías de mayor tamaño, que tienen procesos de misión crítica y que requieren de ciertos niveles de disponibilidad de servicios, tanto en infraestructura como en monitoreo de procesos y elevados niveles de seguridad. Sin embargo, cabe recordar que la demanda de servicios de datacenter es transversal al tipo de actividad, considerando que todas las industrias tienen procesos informáticos de misión crítica que requieren de una infraestructura que involucra economías de escala. "En el caso de la Manufactura, hemos conversado con diferentes CIOs de empresas de este sector, y nos comentan que la producción es dependiente de los sistemas de TI, con lo que la detención de un servidor podría ocasionar severos trastornos en la producción de toda la organización", acota Leiva. En tanto, Miranda comenta que las entidades gubernamentales también prefieren mantener "in-house" sus servicios de datacenter. "Algunos organismos públicos están comenzando a contratar servicios Cloud, pero aún la gran mayoría prefiere centros propios", sostiene. En este sentido, el ejecutivo también cree que, frente a la decisión de contratar o construir su propio centro de cómputo, la ubicación del mandante es clave. "Generalmente, se contratan servicios de datacenter cuando la necesidad es en Santiago, pero se busca construir un centro propio cuando se halla en ciudades o zonas alejadas de la Región Metropolitana. Asimismo, las soluciones de datacenter móvil (en container) se ha hecho muy popular entre empresas de minería", arguye. En cambio, para Leiva, esta elección también pasa por "la evolución de la infraestructura empresarial hacia nuevas tecnologías que incorporen requisitos adicionales de acondicionamiento de Sala, como refrigeración. Estos mayores requerimientos influyen en un cliente que ya tiene un datacenter tradicional y que le resulta conveniente acudir a los servicios de un tercero para alojar su nueva infraestructura, disminuyendo así sus costos". Asimismo, de acuerdo al analista de IDC, otro factor es la oferta de especialistas con el alto nivel de empleo que se ha sostenido durante los últimos años. "Como capturar y mantener el talento en las áreas de TI se ha vuelto cada día más estratégico; el valor de tener un especialista por cada TI hace económicamente conveniente para una organización considerar el contratar los servicios de un tercero que tenga todos estos especialistas a disposición de su negocio", explica. ¿Qué tipo de infraestructura considera un datacenter? En este ámbito, Leiva declara que en la actualidad, un datacenter público considera una sala con una altura (que permite tener un piso técnico elevado), debajo del cual circulan los flujos de aire climatizado (que consideran el control de la humedad). Al respecto, Miranda cree que los "pisos falsos" son una medida en vías de desaparición, especialmente considerando la sismicidad de nuestro país. "El piso técnico o falso, ha comenzado a ser descartado, pues se elimina un riesgo importante, que además representa un costo importante dentro de la construcción y mantención de un datacenter", indica. En todo caso, una instalación de datacenter debe contar con sistemas ignífugos, incluyendo sistemas de alerta temprana y que permiten activar complejos sistemas basados en gas que disminuyen el nivel de oxígeno, sofocando el fuego. También tienen sistemas de energía ininterrumpidos, basados en subestaciones múltiples de 12kV de sectores geográficos distintos para disminuir al máximo cualquier evento externo que pudiera dejar sin energía al sitio. "En comunicaciones, debe contar con la conectividad necesaria, tanto en Backend, enlaces dedicados desde el datacenter a la organización como en Front End y enlaces de Internet desde el datacenter hacia la nube; dando acceso a los clientes de la organización y todos los sistemas de seguridad perimetral IPS IDS, administrar el acceso desde y hacia el datacenter de los accesos autorizados y detectar, prevenir e identificar los accesos no autorizados", enumera Leiva. "En infraestructura TI, el datacenter debe tener servidores y unidades de almacenamiento externo en disco empresarial, para albergar los datos del cliente en una modalidad de hosting de aplicaciones, lo que últimamente ha evolucionado a complejos sistemas empresariales de nube pública, que comparten la infraestructura entre distintos clientes, en un modelo de negocios de pago por uso". En términos de regulaciones y estándares, existen varias certificaciones que norman su construcción y su operación, desde el diseño de los planos y luego la certificación de la infraestructura. Entre las más conocidas, se encuentra el estándar Tier (de The Uptime Institute), que es específica para la construcción de datacenters públicos o privados y que ya han obtenido varios centros de cómputo chilenos. "Con la construcción de las nuevas salas, los proveedores de servicios en Chile han optado por certificar su infraestructura para dar garantías a sus clientes, muchos de los cuales tienen, a su vez, rigurosas auditorías que toman en cuenta la certificación de la infraestructura donde residen los sistemas de TI", señala Leiva. | | ¿Qué significa el TIER? El TIER de un datacenter es una clasificación ideada por el Uptime Institute que se convirtió posteriormente en el estándar ANSI/TIA-942 y que básicamente establece cuatro categorías, en función del nivel de redundancia de los componentes que soportan el datacenter. Las características básicas de cada uno de los niveles son: TIER I: Centro de Datos Básico Es una instalación que no tiene redundancia de sus componentes vitales (climatización, suministro eléctrico) y que por lo tanto, perderá su capacidad de operación ante el fallo de cualquiera de ellas. Puede o no puede tener suelos elevados, generadores auxiliares o UPS. Del mismo modo, las operaciones de mantenimiento derivarán en tiempo de no disponibilidad de la infraestructura. Disponibilidad del 99.671%. TIER II: Centro de Datos Redundante Los datacenters de esta categoría tienen redundados sistemas vitales, como la refrigeración, pero cuentan con un único camino de suministro eléctrico. Componentes redundantes (N+1). Tiene suelos elevados, generadores auxiliares o UPS. Conectados a una única línea de distribución eléctrica y de refrigeración. Se trata, por tanto, de instalaciones con cierto grado de tolerancia a fallas y que permiten algunas operaciones de mantenimiento "on line". Disponibilidad del 99.741%. TIER III: Centro de Datos Concurrentemente Mantenibles Además de cumplir los requisitos de TIER II, este datacenter tiene niveles importantes de tolerancia a fallos al contar con todos los equipamientos básicos redundados incluido el suministro eléctrico, permitiéndose una configuración Activo/Pasivo. Todos los servidores deben contar con doble fuente y, en principio, el datacenter no requiere paradas para operaciones de mantenimiento básicas. Componentes redundantes (N+1). Conectados a múltiples líneas de distribución eléctrica y de refrigeración, pero únicamente con una activa. Es requisito también que pueda realizar el upgrade a TIER IV sin interrupción de servicio. Disponibilidad del 99.982%. TIER IV: Centro de Datos Tolerante a fallos Además de cumplir con los requisitos de TIER III, estos centros de datos deben soportar fallos en cualquiera de sus componentes que inhabiliten una línea (suministro, refrigeración). Conectados a múltiples líneas de distribución eléctrica y de refrigeración con múltiples componentes redundantes 2(N+1). Por ejemplo, un DC TIER IV cuenta con 2 líneas de suministro eléctrico desde grupo electrógenos, y a su vez cada una de las líneas cuenta con N+1 grupos, por lo que para tener una interrupción del servicio se tendría que producir de manera simultánea la pérdida de suministro eléctrico, y el fallo de 2 o más grupos electrógenos en cada una de las líneas de suministro. Disponibilidad del 99.995%. | |