¿Cómo nace la idea de reimpulsar esta federación?
Nace producto de que nos comenzamos a percatar que la Gechs, la AIE, así como también otras asociaciones más pequeñas, al igual que la ACTI, mantienen conversaciones con el gobierno, las empresas y las universidades. De esta forma, nos pusimos a pensar que una entidad que tuviera una posición común en diversos temas y que pudiera canalizar las necesidades e inquietudes de la industria, se hacía indispensable para ordenar y eficientar este proceso. Nosotros sabemos que tenemos un posicionamiento en el sector, pero a través de esta federación de industriales TIC pretendemos que nuestro liderazgo se convierta en un impulso para que la industria crezca.

¿Cuáles son los pasos a seguir para concretarla?
Actualmente, nos encontramos en las vueltas preliminares, es decir, evaluando temas en común con las demás asociaciones. Es que si bien todas sabemos la función que cumple cada una, no lo hemos explicitado y, por ende, tenemos que trabajar en un programa común que nos permita estar en una posición de lo que nos une y no de lo que nos desune.

Por otro lado, tenemos que trabajar en los estatutos de esta federación, ya que estos reglamentos tienen que ver con las falencias que poseen dichas entidades para pertenecer a una asociación. Y para ello se requiere de un quórum mínimo en el que todos los miembros estemos de acuerdo y podamos trabajar en conjunto.

Es importante mencionar que llevamos muchos años con esta idea, sin embargo, no ha sido un proceso fácil, puesto que una conversación de estatutos requiere de un exhaustivo análisis con los socios y, a su vez, cada uno de ellos tiene distintos tiempos por las juntas ordinarias o extraordinarias que desarrolla. Además, entre noviembre y diciembre próximo, esperamos tener una reunión de trabajo que nos permita ir avanzando, a corto y mediano plazo, en una agenda de temas comunes con el Gobierno.

¿Qué importancia tiene esta federación para el sector?
Sin duda que esta federación va a marcar un hito trascendental, pero no sólo para la industria tecnológica en sí, sino que para todo el país. En este sentido, podremos consolidar el desarrollo tecnológico nacional, aunando esfuerzos para hacer crecer el sector y lograr reformar el sitial que tuvo Chile en materia de modernización del Estado y alfabetización digital, entre otros aspectos.

Asimismo, esperamos que a través de esta iniciativa logremos potenciar el ingreso de los jóvenes a las carreras técnicas y profesionales ligadas a las tecnologías de la información, y así aportar a la disminución del problema que experimenta el país por la falta de profesionales calificados.

¿En qué etapa se encuentra el proyecto de un futuro ministerio de tecnología?
Estamos avanzando en la creación de dicho ministerio, pero orientado a ciencia y tecnología, pues estamos convencidos de que ambos temas se deben trabajar bajo una misma tutela.

Es que consideramos una pérdida de tiempo y eficiencia tener que acercarnos a cinco ministerios y, por ende, a cinco ministros para abordar un único tema, a diferencia de lo que sería relacionarse con una sola entidad. Así el proceso se haría mucho más rápido, eficiente y efectivo.