Big Data es una dinámica de importancia que parece haber surgido de la nada. Pero en realidad, no es nuevo. En cambio, es algo que va avanzando hacia la aceptación generalizada y va captando gran atención, y todo ello, por buenos motivos. Lo que lo habilita es el almacenamiento económico, la proliferación de tecnología de sensores y captura de datos, lo que aumenta las conexiones a la información a través de las infraestructuras de la nube y almacenamiento virtualizado, y de novedosas herramientas de software y de análisis. El big data no es un "algo", sino más bien una dinámica / actividad que atraviesa muchas fronteras de la TI. Así lo define IDC: Las tecnologías de big data describen una nueva generación de tecnologías y arquitecturas, diseñadas para extraer, de modo económico, beneficios de inmensos volúmenes de datos muy diversos, por medio de la habilitación de captura, hallazgo y/o análisis a alta velocidad.

El big data es una muestra representativa horizontal del universo digital y puede comprender datos transaccionales, data warehouse, metadatos u otros que se encuentren en archivos con un tamaño tan enorme que resulte absurdo. La media / el entretenimiento, el cuidado de la salud y la videovigilancia son ejemplos evidentes de los nuevos segmentos donde ha crecido el big data. Las soluciones de media social, como Facebook, Foursquare y Twitter son las fuentes más reciente de información fresca.

Es importante comprender que el big data no sólo se trata del contenido original que se haya almacenado o se esté consumiendo, sino también de la información que hay alrededor de su consumo. Los teléfonos inteligentes son un excelente ejemplo del modo cómo nuestros dispositivos móviles producen fuentes adicionales de datos que se capturan y que incluyen la ubicación geográfica, los mensajes de textos, la navegación por la historia y, gracias a la incorporación de los acelerómetros y el GPS, hasta los movimientos de uno o los lugares hacia donde uno se dirige.

La captura y el análisis de este "torbellino en danza" de datos es la oportunidad segura en big data, pero también una fuente de preocupación para los administradoras de centros de datos. La arquitectura y modelos organizacionales de los centros de datos tendrán que evolucionar a medida que las aplicaciones de big data impregnen la infraestructura de la empresa. El enfoque arquitectónico y organizacional de TI usado en entornos apiñados, como una red Hadoop grande, es sustancialmente diferente de ambientes TI convergidos y virtualizados que impulsan la mayoría de las estrategias de transformación de los centros de datos de las organizaciones.

Los proveedores de la nube desempeñarán una función habilitante clave en casi todas los aspectos del espacio big data. En primer lugar, estarán entre los recopiladores más relevantes de flujos de datos y contenido. En segundo lugar, estarán entre los usuarios de sistemas de big data de más empuje y dinamismo para dirigir sus propias empresas. En tercer lugar, también estarán en posición de permitir el uso de big data por parte de organizaciones con conocimientos tecnológicos, pero sin recursos, a través del suministro simple y temporario de grandes conjuntos informáticos y de datos.

El valor último de una puesta en marcha de big data se juzgará sobre la base de uno o más de los tres criterios: ¿Suministra información más útil? ¿Mejora la fidelidad de la información? ¿Mejora la tempestividad de la respuesta?

Necesidad imperiosa de que haya seguridad en la información: Porcentaje del universo digital. Fuente: Digital Universe Study de IDC, con el patrocinio de EMC, junio de 2011

Big data representa tanto las grandes oportunidades como los grandes retos de los CIO. Prácticamente todo CIO aspira a hacer que la TI sea un activo más valioso para la organización. Y la TI está delante y en el centro de los proyectos de big data, que en general se encuentran en los límites del negocio, donde están muchas de las oportunidades significativas que tienen la empresa de expandirse o de reducir costos.

Además, big data presenta una gran cantidad de retos. Tal como se observó anteriormente, los buildouts [construcción de software] de big data pueden ser perjudiciales para los planes actuales de transformación de los centros de datos. Además, las instalaciones y puestas en funcionamiento de big data exigen nuevas baterías de destrezas de administración de TI y de desarrollo de aplicaciones. Es probable que, durante un tiempo, escaseen las personas con esas destrezas. Sin embargo, el reto mayor es el cultural. Hoy día, lo que mejor describe a muchos de estos proyectos de big data es la expresión "proyectos científicos junior", con un pequeño núcleo de servidores y activos de almacenamiento. No obstante, a menos que se los gestione de cerca, estos pequeños proyectos pueden convertirse rápidamente en el próximo proyecto Manhattan, con consecuencias negociales, organizacionales y jurídicas tanto en la empresa como en el sector al que pertenezca.

Haciéndose a un lado los retos, abundan las oportunidades. Tomar la punta en los esfuerzos de big data le da al CIO la oportunidad de ser el socio estratégico más significativo de una unidad de negocios o incluso de impulsar la transformación de toda la organización.

Confianza en el universo digital

Por primera vez en 2010 se dimensionó la cantidad de información del universo digital que exigía un cierto nivel de seguridad. Lo que intimida es la comprensión de que la cantidad de información que hay que asegurar crece con mayor rapidez que nuestra capacidad para hacerla segura, dado que los empleados usan más dispositivos móviles, los consumidores comparten, deliberadamente o no, más información personal y las empresas hallan nuevas formas de hacer minería de estos datos.

A fines de comprender el grado de seguridad del universo digital, se clasificó en cinco categorías la información que la precisa. Cada categoría exige, a su vez, niveles sucesivamente más elevados: Privacidad, exclusivamente; Orientación al Cumplimiento normativo; Tutela; Confidencial y Lockdown.

En 2010, el 28% del universo digital precisaba algún nivel de seguridad (Ver imagen. Obsérvese que esta es información que precisa seguridad. Puede no tenerla).

La cantidad creciente de información que precisa seguridad recibe el impulso de dos fuentes principales: sociedades comerciales con limitación de responsabilidad (inclusive los empleados) y consumidores. Vienen a agravar esta situación las normas estatales y las políticas y procesos empresariales que imponen la captura y conservación de diversos tipos de datos.

Convocatoria a la acción

Desde 2007, el Digital Universe Study de IDC destaca la disconformidad que hay entre el veloz crecimiento del universo digital y el lentísimo de la dotación y la inversión para administrarlo. Este año, el estudio destaca un problema extra que promete definir gran parte de los próximos diez años de las carreras de los CIO y directivos de empresa: la disconformidad entre el valor de ciertos datos y el valor de otros. En el universo digital, ahora resulta posible dirigir fábricas a distancia, aprovechar las inmensas tiendas del tráfico de las redes sociales, analizar la clientela de maneras eficaces que resultaban imposibles aun hace unos pocos años y crear ciudades, edificios y hogares inteligentes. Pero esto exige examinar cuidadosamente las moléculas de datos (mientras estas existan) que hay en el universo digital con el fin de identificar las que son importantes y de que la organización obtenga un beneficio a partir de ellas.