Llego a mi casa y de pronto estoy rodeado de tecnología de última generación. Mis hijos juegan en una consola de juegos con más capacidad de computación que aquéllas mainframes a las que me refería más arriba. O están conectados y hablando con amigos, usando el videochat. Mi esposa se prepara para ver una película en Blu-Ray, varios reproductores de MP3 se reparten por varios lugares, un televisor LCD nos entrega una imagen clarísima. Mi teléfono celular (el único que se mueve entre los dos mundos) es una pequeña computadora. Todos estos desarrollos han ocurrido en la última década.
Mi oficina parece una sucursal de un museo de la tecnología! Hace años usar una computadora, o e-mail u otros avances eran patrimonio de quienes trabajábamos en una oficina. Hoy la tecnología está en manos de los usuarios.
¿Y qué consecuencias tiene esto? Por lo pronto, que los usuarios están consumiendo otras formas de medios. El latinoamericano promedio, con conexión de Internet, pasa 25 horas al mes navegando. Sólo cuatro dedica a leer revistas. Sólo la televisión, de los viejos medios, se mantiene en un puesto de liderazgo.
Precisamente este lunes comentaba en el Festival de Media Latam, que se celebra en Miami, la necesidad de que las empresas se den cuenta de que sus usuarios y consumidores los aventajan en el uso de la tecnología y que para llegar a ellos deben buscarlos donde se encuentran, en nuestro caso en particular, en Internet.
Más de ocho de cada diez latinoamericanos realizan cada día millones de búsquedas en Internet utilizando Google. Decenas de millones, suben fotos, observan videos, se conectan a una red social. En esos lugares están las audiencias y allí es donde la empresas y sus marcas deben comunicarse con sus usuarios, no sólo los actuales, sino y quizás más importante, los del futuro.
Una breve encuesta que se efectuó en el Festival de Media este lunes entre la audiencia, la mayoría pronosticó que la inversión publicataria on-line crecerá entre un 10 a un 15 por ciento del total en los próximos tres años. Hoy está por debajo del 5%. Un largo camino por recorrer, pero necesario.
Los usuarios ya nos aventajan por mucho.