Los impactos medioambientales pueden reducirse drásticamente si se aplican estrategias eficientes durante todo el ciclo de vida del producto o servicio. Implica procesos de planeamiento que minimicen consumo de energía y materia prima. Al mismo tiempo, al final de la vida útil de un producto, y en particular en el de los de tipo tecnológico, el reciclaje es una gran responsabilidad.

Las leyes medioambientales serán cada día más potentes: la Conama está trabajando en una nueva ley que obligará a las empresas a manejar, con responsabilidad ambiental, los desechos, resultado del fin de la vida útil de sus productos, lo que hará obligatorio incorporar este concepto en todas las empresas. Epson se asoció con el sello de reciclaje Recycla hace aproximadamente dos años, por lo que en Chile y en Latinoamérica fue la primera empresa en utilizar este sello de reciclaje, siendo pionero de esta iniciativa.

EPSON tiene una filosofía corporativa definida con respecto al medioambiente. Al ser una corporación multinacional, cumple con estándares muy estrictos. Ya formuló su "Visión medioambiental 2050", cuya meta es reducir las emisiones de CO2 en un 90% a lo largo del ciclo de vida del producto para el año 2050. Al mismo tiempo, está comprometido para trabajar con las comunidades locales para la protección de la biodiversidad. Para lograr esta meta de largo plazo, hay varias etapas de corto plazo: 1) Reducir emisiones de CO2 en la fabricación de componentes 2) Prolongar el ciclo de vida de los productos y reciclar 3) Reducir a la mitad el consumo de energía en fábricas con cleanroom y 4) Ayudar a reforestar y participar en actividades medioambientales con ONGs relacionadas con la preservación y protección de la biodiversidad. En Chile, Epson está comenzando a participar en tales iniciativas; actualmente ayudará a reforestar una reserva ecológica, que sufrió un incendio forestal.

Al ser una empresa que produce y promueve el consumo de papel, Epson tiene regulaciones estrictas en cuanto a forestación sustentable. Planta un 20% más de árboles de los que consume. Al mismo tiempo, la empresa, y todas sus subsidiarias y afiliadas, trabajan bajo la norma ISO 14001 que regula y controla el manejo medioambiental de las empresas.

En cuanto a consumo energético, Epson ha diseñado máquinas que consumen menos energía, logrando así mayor eficiencia en sus equipos. Un ejemplo concreto está en las máquinas Stylus Photo, en las cuales el consumo energético por día (Wh) se ha reducido a un 55% en sólo 4 años. En los videoproyectores, el consumo de las lámparas por cada 100 lúmenes ha bajado un 90% desde el año 1998.

La tendencia en el mercado tecnológico es hacia productos energéticamente eficientes, y que han cumplido con estrictos procedimientos en el ámbito medioambiental. El consumidor está más informado de los productos. El ahorro energético ha pasado a ser determinante al minuto de elegir, ya que es un indicador de ahorro.

Las empresas de tecnología deberán mantener sus impactos medioambientales lo más neutros posibles, para así, a largo plazo, ser más eficientes. La responsabilidad social y medioambiental le da mayor confianza al consumidor, y le otorga mayor valor a la marca.