Ante el requerimiento de mejorar mi computador haciéndole algunos retoques, el balance fue más alentador que oscuro. "Se puede, pero tiene que invertir", me explicaron. Y, efectivamente, después concluí que haciendo una inversión de cerca de $90.000 podría transformar mi pequeño equipo en uno mejor. Ordenando mi recorrido de menos a más, en CSByte me dijeron con todas sus letras que si el objetivo era potenciar las herramientas de música y video, la mejor alternativa era cambiar de notebook a PC. En JHP el consejo fue menos dramático, pero igualmente categórico, porque aunque primero el vendedor me recomendó cambiar la tarjeta gráfica por una de mayor aceleración, terminó diciendo: A ver, si usted tiene un auto chico que tiene que cargar con muchas cosas, mejor cómprese uno más grande. Y aunque es posible que ese vendedor tuviera razón, continué para agotar todas las alternativas. Como en todo, más vale consultar una segunda, tercera o cuarta opinión. En Best Comp me aconsejaron partir por cambiar la memoria y el procesador. El vendedor no trató de convencerme de comprar una marca en particular, pero sí insistió en que, al momento de comprar, buscara los componentes más robustos y con mayores prestaciones. Si va a cambiar piezas a su equipo, ésas tienen que ser buenas piezas, me indicó. Sin dudas, puedo afirmar que en USA Online me dieron la mejor atención, o quizás me dijeron lo que yo quería escuchar, es decir, que era posible mejorar mi notebook y usarlo por un tiempo más antes de invertir en uno nuevo. Objetivamente hicieron un diagnóstico y una evaluación de mi equipo, aconsejándome cambiar la placa madre, reemplazar el disco duro a uno de 500 GB y reemplazar la memoria por una DDR2 667. Un último consejo que recibí en San Diego fue que antes de comprar un notebook es importante fijarse en sus características, ya que el tipo de procesador, la memoria y el disco hacen la diferencia. Por eso algunos modelos cuestan el doble que los más económicos. Para reflexionar. |