Los peligros que hoy acechan a los computadores son muy diferentes a los que existían hace 10 años, y los "simpáticos" virus de antaño han mutado a sofisticados mecanismos de ataque. Entre las celebridades más utilizadas por los hackers para cometer delitos durante 2009 se destacaron Michel Jackson, Serena Williams, Patrick Swayze, Harry Potter y el Presidente norteamericano Barack Obama. Ataques de spam, infección de sitios con contenido malicioso y "scareware" (falsos antivirus) han sido algunas de las formas más típicas de cyberdelitos. Entre los gusanos, el más famoso del año fue sin dudas "Conficker", que infectó millones de computadores en el mundo entero. A continuación, una pequeña lista de ventajas que proporcionan las versiones profesionales de antivirus: Una diferencia sustancial con los productos gratuitos es el concepto de "protección por capas": las versiones pagas incorporan barreras adicionales de defensa para mantenernos libres del spam, el phising, el pharming o el robo de identidad. Estas amenazas son de trato diario ya que el pago de servicios y la compra de artículos por Internet se han convertido en una práctica casi habitual. Asimismo, quien posea una cuenta de e-mail sabe lo que es lidiar con los cientos de correos basura que se reciben. Actualizaciones periódicas: todos los días los hackers introducen nuevas variantes de virus y troyanos. Sin esta constante actualización, el antivirus pierde eficacia ya que no detecta las nuevas amenazas. Las versiones pagas cuentan con equipos y laboratorios especializados que están las 24 hrs. monitoreando la red. De este modo, se ofrece rapidez e inmediatez para los usuarios. Soporte: la desesperación es uno de los síntomas más comunes cuando se infecta nuestro PC. En esos casos, nada mejor que poder conversar telefónicamente con un especialista que nos indique qué hacer para restablecer su funcionamiento. Éste claramente es un privilegio de las versiones pagas. Descargas desde sitios no seguros: frecuentemente se ofrecen versiones gratuitas de antivirus desde sitios de dudoso origen, que no son otra cosa que páginas elaboradas por hackers para engañar a los usuarios desprevenidos. Finalmente, una pregunta que todos deberíamos hacernos es cuánto vale la información que tenemos en nuestros computadores. Desde datos confidenciales del trabajo hasta fotos y videos personales, contamos con archivos invaluables económica y sentimentalmente hablando. Es un buen momento para pensar cuánto invertimos en su seguridad. |