Para el área de TI de cualquier empresa, la reducción de costos y espacio en el site, son fundamentales. La tendencia de la virtualización permite considerar todos los recursos de TI como un conjunto de servicios compartidos que pueden combinarse y recombinarse a fin de optimizar la eficiencia y facilitar su ampliación.

Cada vez es mayor la presión sobre los departamentos de TI para resolver los retos de las empresas, resultando en data centers que trabajan al límite de su capacidad lo que deriva en nuevas compras de servidores, aumentando los gastos de operación y administración, además de complicaciones por el espacio físico, consumo energético y aire acondicionado.

Los data centers son ecosistemas complejos donde conviven distintos tipos de servidores, SO y aplicaciones que interactúan con una gran variedad de equipos de usuario final, desktops o dispositivos móviles; lo que significa un auténtico reto.

El despliegue de tecnologías de virtualización de servidores supone transformar los servidores actuales en máquinas virtuales dentro de un entorno gestionado centralizadamente, siendo una alternativa cada vez más aceptada y difundida.

Gartner clasificó esta tecnología como estratégica para el futuro, ya que cuando un ambiente es virtualizado, es más fácil cambiar de un sistema viejo y lento a uno nuevo, así que las empresas que poseen servidores virtualizados pueden ajustar rápidamente el lugar de sus aplicaciones utilizando nuevo hardware o a medida. No obstante, esta tendencia se encuentra en una etapa de maduración y adopción, pues se estima que 7 de cada 10 empresas la utilizan.

La virtualización es una de las tecnologías más atractivas de los últimos tiempos. Con ella, una empresa puede hacer un uso más intensivo de sus recursos de hardware y crear una infraestructura más robusta. Estudios demuestran que con esta tecnología se ahorra desde 30 hasta 60% en adquisición de hardware, consumo de energía y aire acondicionado, horas de producción y mantenimiento.

En la mayoría de los data centers actuales, aproximadamente un 70% de la energía se utiliza en funciones como enfriamiento, distribución y respaldo, no para procesar información.

BCN Binary revela que la virtualización de servidores supone para una empresa un ahorro de costos de 50% en gastos de software y hardware, almacenamiento, mantenimiento u operación de infraestructura. Dichos datos se pueden cifrar en el ahorro en 6,000 euros anuales por aplicación en cada servidor.

En cuestiones de seguridad, los riesgos de los ambientes virtuales tienen la misma dimensión que en los físicos, lo que sucede es que en muchas ocasiones no se tiene en cuenta la implementación de políticas de seguridad.

En resumen, el costo-beneficio de la virtualización: Reduce la inversión en hardware. Normalmente los servidores no están al tope de su capacidad; la restauración de una copia de seguridad ante un desastre es rápida y sencilla en cualquier sistema virtualizado. Además, permite tomar esas medidas de seguridad que por necesidades de inversión no se han emprendido, como la separación de servidores en diferentes subredes o por servicios; permite instalar programas útiles en Windows y Linux sin mayores inversiones; reduce los costos de TI gracias al aumento de la eficiencia y la flexibilidad en el uso de recursos; ofrece administración global centralizada y simplificada; y mejora de TCO y ROI .

Las empresas están buscando hacer más con menos, debido a las restricciones presupuestales a las que se enfrentan y al alto costo de la tecnología. La virtualización da solución eficaz a esta necesidad, y permite que las organizaciones respondan a los crecientes requerimientos de los usuarios finales sin incurrir en incrementos en su gasto en tecnología.