Uno de los principales caminos para lograrlo es el uso de tecnología, que aumenta la productividad individual y grupal de las organizaciones, haciéndolas más eficientes, productivas e inteligentes. Es justamente el uso de Tecnologías de Información y Comunicaciones (TIC) lo que ayuda a las empresas a diferenciarse de su competencia, con una administración inteligente que sabe y puede transformar las amenazas en oportunidades. Un buen ejemplo a nivel internacional de la importancia de la tecnología para enfrentar la crisis económica fue entregado por el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, quien en su millonario plan de reactivación dispuso más de US$7 mil millones para llevar el servicio de Internet a sectores sin cobertura y casi US$20 mil millones para modernizar los sistemas de tecnología de información del servicio de salud pública. Esto es una muestra más de la importancia de incluir el ámbito de las TIC tanto en las empresas como en las políticas y prioridades de los gobiernos. Asimismo, el uso de TIC permite generar espacios para la creación de conocimiento al interior de la empresa que habilita la innovación y para el desarrollo de nuevos productos o servicios y/o modelos de negocios. En épocas de restricciones de demanda, es necesario replantearse las estrategias y modelos de negocios para adaptarlos a la nueva realidad. Además de apostar por el talento, la transformación y el desarrollo de procedimientos de innovación, es necesario sacar provecho de aquellas ventajas que las TIC generan para llevar a cabo nuevas ideas y mejores resultados: teletrabajo para mejorar competitividad y reducir costos, nuevas tecnologías para generar productos de mayor valor para sus públicos, mejor calidad de servicio, optimización de sus procesos, aumento de estándares de seguridad, etcétera. En épocas recesivas como la actual, utilizar el capital humano "ocioso" en este tipo de actividades permite además preparar a las empresas y organizaciones para enfrentar de mejor forma la recuperación de los mercados. La tecnología y la innovación se presentan entonces como la alternativa más eficaz para ayudar a las empresas a enfrentar momentos inciertos como el que está viviendo el mundo hoy en día, y los resultados del esfuerzo por lograrlo marcarán una diferencia importante entre aquellas empresas que emerjan airosas y con mayor poder luego de este período, versus aquéllas que sigan pensando sus estrategias de negocios sin tomar en cuenta el factor tecnológico para su desarrollo. |