Hoy estamos viviendo una revolución caracterizada por la necesidad de diferenciamiento entre los diversos usuarios, quienes buscan desmarcarse de sus pares con equipos exclusivos, bellos, poderosos, atrayentes, fashion, y también intuitivos y táctiles. Bajo esta premisa, ya se han lanzado al mercado sistemas con pantallas touch, que facilitan la vida del usuario. Los botones desaparecieron, lo mismo que las pantallas pequeñas y los caracteres irreconocibles. La interacción con los equipos ahora es más simple, en menos pasos, más amigable y por supuesto, más personal, lo que hace que cada dispositivo responda fielmente a la necesidad y requerimiento de su dueño y no tanto a la configuración de fábrica. Sólo el comienzo La era táctil es sólo el punto de partida para el desarrollo de nuevos sistemas y aplicaciones que ayudarán finalmente al advenimiento del teléfono celular como el centro de la vida multimedia de las personas. Hoy podemos ver equipos móviles fabricados como los de LG, que incluyen organizador personal, agenda, redactor y lector de documentos office, acceso a e-mail codificado, navegador de Internet y hasta capacidad para teleconferencia. Por lo anterior, no será extraño ver en poco tiempo que estos mismos dispositivos sean la alternativa para los netbooks e incluso se conviertan en un elemento para trabajar remotamente con redes corporativas, realizando tareas básicas, pero no menos importantes, que faciliten el trabajo y administren mejor el tiempo de los ejecutivos. Con el desarrollo de nuevas tecnologías pensadas para estos dispositivos, tampoco deberemos extrañarnos de que nuestro celular sea un repositorio de nuestra información personal, que la tecnología touch que hoy conocemos evolucione para lograr que sólo nuestra huella digital active el terminal y que éste, gracias a avanzados sistemas de seguridad, pueda ser la interfaz de medio de pago del futuro, reemplazando a otros que hoy son fáciles de clonar. Hace cinco años, pocos apostaban a que el celular iba a reemplazar los dispositivos de MP3. Hoy son pocos los modelos y fabricantes que se atreven a lanzar modelos que no sean completamente interactivos y multimedia. Hace poco tiempo nadie imaginó que los teléfonos móviles iban a navegar más allá de su frontera WAP. Hoy no concebimos un celular que no tenga acceso a banda ancha portátil y que no cuente con un navegador compatible para ingresar a nuestros sitios favoritos. Y por lo mismo, no crea que lo que hoy es impensado no pueda convertirse en una característica a corto plazo de su siguiente celular. Como compañía, ya estamos pensando y diseñando los nuevos sistemas que dominarán la industria en los siguientes años y con una nueva mentalidad que incluye todo el poder touch y las aplicaciones que son imprescindibles para el usuario conectado y comunicado de la nueva década. |